Gine ''Una Historia que contar'' (DBZ)™ «Editando»

Diez

La masa amarilla devora cada vez mas mi cuerpo, quitándome total movilidad de mi cuerpo. Tengo miedo, y a la vez tengo rabia consigo misma por que siempre he tenido miedo.

-¡Escuchame!- Bardock me grita alertandome por completo -¡Sube tu pierna en forma horizontal, intenta a la vez subir tu mano también!- una de las bestias se acerca e intenta golpearlo pero rápidamente él lo esquiva -Confía en mí-

Lo miro a los ojos y asiento. Confío en él.

Hago lo que me pidió y siento que ya no me atrae. Me alegro un poco y rápidamente busco la forma para salir de allí.

El pecho me comienza a doler por el magullamiento que me provoca la masa, empiezo a toser repetidamente hasta que alguien me agarra del cuello y me eleva.

-Mira, es débil como lo supuse-

Coloco mis manos en modo de protección pero es inútil, me esta ahorcando y lo esta logrando.

-¡Gine, prestame atención!- Bardock vuelve a llamarme -¡No te rindas, deja tu debilidad atrás y suelta tu poder, puedes dar más, solo tienes un pequeño obstáculo que no te deja hacerlo, muestrame lo que eres en realidad!-

Y tiene razón, maté a mi madre por soltar mi poder, ella me había prometido que estaría aquí conmigo. Y resulto todo ser mentira, pelee con ella, me transformé, y aquí estoy. No quiero perder a las personas que mas amo.

Cierro los ojos y las lágrimas salen ante los recuerdos de mi madre.

-No importa lo que me hayas echo, Gine, siempre estaré aquí para ti, pudiste dañar mi cuerpo, pero no mi amor por ti-

Derrepente los abro y algo dentro de mí se despierta, algo frío y negro. Siento mi cuerpo fuerte y mi corazón late lento.

Hasta que pierdo la razón y ataco sin piedad, primero arrancándole el brazo a mi atacante y ahorcarlo con mi cola apretándole el cuello fuertemente hasta que viera salir sangre de ello. El orgullo se enciende y mi actitud cambia totalmente. Podría decir que esto que siento es más fuerte que el ozaru, es un don indeseado que no sé a quien se lo heredé, un maldito don al que le tengo miedo.

No escucho nada, ni mi conciencia, ni a Bardock. Solo estoy en un cubo negro lleno de recuerdos en el que solo la muerte me puede sacar. Aquel sujeto empieza desesperadamente desatar mi cola de su cuello, pero solo me dan mas ansias de hacerlo. De repente queda inconsciente por un ataque en su espalda y dedujo que Bardock tuvo que ver en esto.

Libero mi cola y siento que es mas larga, mas fuerte, mas imparable.

Bardock sigue luchando con la otra bestia pero lo noto herido y cansado, además de que esta atrapado. Algo dentro de mí se remueve para ayudarlo, pero mi orgullo despertado no me deja.

A rastras camino gruñando ante la idiotez que quiero hacer.

-Sueltalo- susurro hacia la bestia, aquel me mira sorprendido y parece que quiere reírse hasta que ve el cuerpo de su amigo tirado en el piso.

-Gine no hay....-

-¡Sueltalo!- grito formando puños con mis manos.

La bestia no parece hacerme caso y me envía un puñetazo pero lo esquivo fácilmente parándome en su gigantesca mano.

-¡Ven aquí, maldita saiyajin!- veo que suelta a Bardock para poder atraparme mas fácil pero lo único que hago es esquivar sus ataques.

Subo lentamente hacia su cabeza y cierro mis ojos para acumular la fuerza que necesito.