Esto Solo Lo Causas Tú [Offgun 💚]

•14•

Corrió lo más rápido que pudo para alcanzarlo, y justo antes de que se suba a su motocicleta, llegó y lo detuvo del hombro.

Levantó su dedo índice para pedirle que le dé algo de tiempo y así recobrar su respiración.

—¿¡Qué ocurre!?— preguntó cuando su respiración estaba en un ritmo normal.

—Nada— respondió Singto secamente.

Toda esa situación lo estaba desesperando, los problemas que tenía con Krist, solo debían ser de Krist y él, no de Off. Pero él sabía, que su amigo no iba a quedarse de brazos cruzados cuando uno de ellos estaba en problemas.

—Sé que algo está ocurriendo y exijo que me lo digas.

—Escucha— dijo dejando su casco sobre el tanque de la motocicleta para darse la vuelta y enfrentar a su amigo —lo que está pasando es nuestro problema y te voy a pedir que dejes de involucrarte, nosotros lo solucionaremos.

—¡Dime qué mierda está pasando!— gritó enojado —Krist no es de hacer esas cosas ¡Bebió hasta la inconciencia maldita sea! Dime qué ocurre.

—¿¡Por qué mejor no te vas y arreglas tus problemas de maricas y nos dejas en paz!?— Singto lo empujó y se subió a su motocicleta.

—¡Oye!— gritó Off mientras se levantaba del suelo para detener a su amigo.

Una línea de polvo fue lo que dejó Singto tras irse a toda velocidad. Off, enfurecido, corrió a su coche para ir al dormitorio de su amigo y tratar de averiguar lo que estaba sucediendo.

~°~°~°~

Krist se despertó con una terrible jaqueca y lo único que quería era beber un poco de agua. Trato de incorporase, pero una mano lo detuvo rápidamente.

—Tranquilo P'— escuchó a su lado, giró la cabeza lentamente para encontrarse con su compañero de dormitorio —toma, es medicina para el dolor de cabeza, seguramente es insoportable— dijo dándole una pastilla de color blanco y un vaso de agua.

—¿Qué hora es?— preguntó Krist devolviéndole el vaso vacío.

—Las 3 p.m.

—¿Qué pasó?

—Te emborrachaste.

—Oh— Krist miró hacia el suelo, empezando a recordar lo que había pasado y una lágrima lo amenazó con salirse.

—¿Te sientes bien?— preguntó tímidamente el menor.

—Si, gracias— Krist se levantó lentamente para dirigirse al baño.

Entró, cerró la puerta y se puso frente al espejo. Estaba sufriendo, porque a pesar de toda la mierda que Singto le había hecho, él seguía amándolo y se odiaba por eso.
Si tan solo se hubiera controlado con las bebidas aquella noche, nada de esto estaría pasando.

——Incio de flashback——

Los exámenes habían terminado y para celebrarlo, los tres amigos, aprovecharon que los padres de uno de ellos habían hecho un viaje de negocios, e hicieron una pequeña reunión.

Off sacó algunas bebidas del pequeño bar que su padre tenía en casa y algunos snacks que la señora del servicio había comprado para él.

El primer año de la universidad no era tan genial como lo esperaban, los seniors eran bastantes estrictos y los exámenes muy difíciles. Pero lo que si les gustaban, eran las chicas que se conseguían gracias a una sonrisa picarona.

Esa noche, Off había invitado a tres chicas a la celebración.
Les dijo a sus empleados que se tomaran el resto del día libre y que vuelvan al otro día en la tarde.

La noche estaba tranquila, algunos juegos de mesa con algo de perversión, bebidas a gusto y muchas risas.

A las 3:28 A.M., Off subió a su recámara con la chica de cabello rubio, ambos con el alcohol tomando el control de sus cuerpos.

Los cuatro restantes siguieron con el juego, que en ese momento, era uno de cartas.
La chica de cabello negro rizado, tuvo que correr al baño porque el alcohol le estaba dando una señal de que quería salir de su cuerpo, junto a los snacks. Su amiga corrió, como pudo, tras ella.

El de tez alba estaba totalmente borracho, ya ni siquiera podía mantenerse firme, por eso, su amigo aprovechó que las chicas se habían tomado un momento, y lo llevó a una de las habitaciones desocupadas de la planta alta. Subieron las escaleras tambaleándose y después de cinco minutos llegaron a la habitación.
Singto abrió la puerta sin soltar los hombros de su amigo y con mucho esfuerzo lo llevó hasta la cama, le sacó los zapatos y le acostó de lado, tapándole con el adredón. Cuando se levantó para poder ir, sintió que lo detuvieron por el brazo.

—¿Puedes quedarte hasta que me duerma?— preguntó Krist.

—Está bien— Singto era un buen amigo y si uno de ellos lo necesitaba, él no dudaría en ayudarlo. Por eso, no le importó cuidar de su amigo por unos minutos.

—Gracias.

La conciencia de Krist le decía a grito, que lo que estaba haciendo estaba realmente mal. Singto era su amigo y tener sentimientos hacia él no era algo bueno. Pero su corazón tomó el control por esa noche, aprovechando que si mente estaba desbordada de alcohol.

—Oye.

—Mm— respondió Singto algo somnoliento.

Krist se sentó en la cama quedando a unos pocos centímetros de Singto.

—¿También estás borracho?— preguntó a medida que se iba acercando.

—Si, un poco— contestó sin percatarse de lo que su amigo tenía en mente —¿Ya estás mejor?

—Siempre que estás conmigo en siento mejor.

Krist dirigió su mano lentamente hacia el rostro del mayor y lo acarició tiernamente.

—¿Q-qué ha-haces?— Singto estaba sorprendido pero, sin saber porqué, no retrocedió.

—Solo quiero comprobar si tu piel es como me lo imagino, y si, sí lo es.

Llevó su mano hacia los ojos, haciendo que el de tez morena los cerrara, después dirigió su mano a su nariz, abriéndose paso a su labios. Estando ahí, los acarició como si fueran algodón de azúcar y Singto, sin entender lo que estaba pasando, abrió su boca, dejando que Krist ingresara dos de sus dedos para comenzar a succionarlos.
Krist cerró los ojos al sentir la lengua de Singto saborear sus dedos. Y Singto, al  ver esa expresión en el rostro de su amigo, comenzó a chuparlos más fuerte, ganando un gemido que fue directo a su entrepierna.

 
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Siii, ya sé que tardé mucho en actualizar, les perdón.
Espero que les haya gustado 🙆
Anticipen el próximo capítulo 🔥

Nos leemos pronto ❣️