Lilith

25: La verdad

¿Su hermano? 

Su rostro se torna pálido y rápidamente voltea a ver a TaeHyung que le ve con temor. Había escuchado bien ¿cierto?

El castaño intenta acercarse pero aquellos brazos que lo sostienen se lo impiden. Ella lo ve con sus ojos llorosos, no entendía que demonios sucedía. 

—¿No lo entiendes? siéntate. —con una señal hace que uno de sus hombres la agarre y la tire a un colchón que yacía en el suelo. Cae acostada y rápidamente se incorpora quedando sentada. El tipo la ve y prosigue—. Ese que ves ahí, es mi hermano.

—No soy tu hermano. —entre dientes gruñe TaeHyung. 

—Oh, cierto. Perdona. —sonríe—. Es mi medio hermano. Compartimos la misma sangre ¿no es irónico? te acostaste con los hombres de la familia, zorrita. 

Ella jadea al escucharlo, TaeHyung era... no no no... él no, sólo quería engañarla, él no podría. Lo mira con súplica, rogándole que desmienta eso. Pero nunca llega.

—¿Sabes que es lo mejor? —Se acerca a ella y se agacha a su altura—. Todo el tiempo estuvo fingiendo. —Ríe al ver la sorpresa en el rostro de ella—. Ese bastardo del que te enamoraste, es sólo alguien que estuvo de mi lado todo el tiempo, la razón por la que estás aquí y por la cual perdiste el juego que muy bien pudiste ganar.

Palmea su mejilla y se levanta. Se para junto a su hermano. Ella los ve con ojos llorosos. Todo se estaba desmoronando, otra vez. Junto con sus sentimientos.

Había confiado y en la persona incorrecta, había dejado que esa persona calara en su ser, muy muy profundo. No sólo estaba perdiendo, se estaban llevando su última esperanza de creer en alguien de nuevo.

—Todo fue planeado desde el principio, aunque debo de admitir que no creí que te enamoraras —suelta una risita—, digo... fue el plan aunque lo miraba imposible, ¡pero mira! lo logró, te enamoró, te engañó y ahora tengo todo lo que quería. Eso te incluye a ti.

Ella sólo lo escuchaba pero su mirada estaba en aquella persona de hebras castañas quien se estaba llevando lo último de ella. Esa persona que la miraba con sus ojos llorosos, esa persona que... fingió...  fingió todo.

—¿T-Todo... fue una mentira? —le dice y él niega. El tipo ríe ante la escena.

—No, yo nunca mentí en--

—Suficiente de cursilerías. —agarra su arma y dispara a cada uno de los hombres que llegaron con ella, todo se queda en silencio—. Esta escoria —con su arma señala a TaeHyung—, prefirió darte a ti que a su madre. Sí, su madre aún está viva ¿no te lo dijo? vaya... te enamoró sin siquiera saber de él.  

Volvió a dar  unas señales a sus hombres quienes la agarraron, quitaron sus ropas dejándola en su ropa interior, para luego encadenar cada una de sus manos a dos tubos de metal que yacían a los costados del colchón. Todas las luces del sótano fueron encendidas dejando en claro las barras y el colchón, junto con varios hombres al rededor del lugar.

TaeHyung forcejeaba con los tipos que lo detenían, no... él no quería eso, no a ella, no después de saber lo que había sucedido en el pasado.

Era tarde.

Ella estaba expuesta ante aquel hombre y un montón más, eso no era parte del trato.

—¡Dijiste que no le harías nada! —le grita a su hermano—. ¡no la toques! ¡suéltala! ¡NOO!

Sus lágrimas brotan al ver cómo toca a su amada, y quita aquel sostén, todos los presentes jadearon. TaeHyung gritaba y forcejeaba con los tipos.