10: Fiesta pt. 2

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No había apartado su mirada de ellos, bailaban muy cerca y eso de alguna manera no le agradaba, quería ir hasta allí y quitar las sucias manos de aquel tipo sobre ella. Era cruel esa imagen, él debería estar en su lugar.

Llevaban solo cinco minutos bailando y eso era suficiente para que él ardiera de envidia. Él quería ser quien la hiciera sonreír, no ese tipo.

—Creo que se olvidaron de nosotros.  —Al estar sumergido en sus pensamientos no se percató de la mujer que se sentó muy cerca de él. Al girarse notó como le sonreía con malicia sosteniendo una copa de ¿vino?

—Eso parece...  —La miró—,  pero no es malo, después de todo, tengo la compañía de tan bella dama...  —Ni él mismo se creía las palabras que acababan de salir de su boca—,  ¿de nombre...?

—MiRae... Kang MiRae...  un gusto, señor Kim. 

—TaeHyung, se escucha mejor.  —Le sonrió.

—Sí, es mejor... —Ambos se voltearon para verse de frente y TaeHyung podía ver a kilómetros la mirada lujuriosa que la mujer le dedicaba—,  ¿no crees que estas fiestas son un poco... aburridas?

—Lo poco se queda corto, Kang.

—Mi Rae, solo Mi Rae.

—Bien, Mi Rae...  Hay algún lugar de esta casa, más...   ¿privado?

Sabía que por la urgencia de la mujer captaría su insinuación a la primera, ya que le estaba mostrando una nueva faceta de él, la de "casanova" y tal parece no lo estaba haciendo mal o era por la urgencia de ella.

—Lo hay y me encanta que lo menciones... ven conmigo. 

Se deslizó del taburete tratando de lucir "sensual" ante los ojos del castaño. Él sonrió. Siguió a la mujer que caminó contorneando sus caderas exageradamente.

Se alegró en gran manera al ver que ella iba en dirección de las escaleras, pero eso se desmoronó al ver que cruzó antes de llegar a estas y se condujeron a una puerta que.... daba al jardín trasero. ¡Al jardín! 

Sin duda era un fracaso en todo, no pudo conseguir que ella lo llevara a las habitaciones, aunque si lo pensaba bien ¿a que iría? no sabía ni que era lo que ella quería, por lo tanto, si subían sería para eso...  le hubiera tocado sacrificarse.

Porque ¡vamos!  al ver bien aquella mujer, no se negaría a lo que pudiera pasar.

¡Demonios! ¿él había tan siquiera pensado eso? un tiempo atrás, ni siquiera se hubiera imaginado tal cosa. ¡Él no es así! 

Además, a la que quiere llevar a la cama, no es a esa mujer que se le acaba de casi pegar a su brazo, sino, a la mujer que seguro en estos momentos está en una habitación con aquel tipo, vaya mierda de suerte la suya.

—¿Que haces en este tipo de reuniones sino te gustan?  —Le preguntó la mujer mientras daba caricias a su brazo. Se habían sentado en una banca del jardín y ella casi se convierte uno solo con su brazo.

—Compañía, eso es todo.

—Ya veo...  me imaginé que no estás relacionado a este mundo.

—Y...  esta "fiesta"  —Hizo las comillas con la dificultad en uno de sus brazos. Porque estaba claro, esa no es una fiesta sino una reunión refinada—,  ¿es en honor a..?

La mujer rió.  —Ni siquiera eso sabes.  —No es como que me informen las cosas. Pensó TaeHyung—.  Bueno...  es una especie de presentación para el nuevo postulado a senador.

LilithDonde viven las historias. Descúbrelo ahora