Capítulo 11, parte 2: Las consecuencias de confiar.

13 3 0
                                    

VENECIA

Mordisqueo la punta de mi lápiz con nerviosismo. No he visto a Cameron desde lo sucedido con Fred, no se ha presentado a la primer clase y ya estamos a sólo tres minutos de que comience la segunda. Me encantaría tener tan siquiera una idea de dónde está.

Por otro lado, me preocupa el hecho de que Peter no ha querido dirigirle la palabra a Holly. Me imagino que sigue muy enfadado luego de sus mentiras, y estoy muy segura de que mi mejor amiga no se disculpara pronto. El orgullo siempre ha sido más fuerte que ella.

-Jane, ¿Ya terminaste?-cuestiono, intentado desviar mi cabeza de mis propios pensamientos. Ella se sienta frente a mí, junto a Peter.

-Claro. Me gustó mucho, estoy segura de que a la profesora le encantará.-me devuelve el libreto que estuve escribiendo y me tranquiliza un poco. Desearía contar con la opinión de Holly, pero ella está muy ocupada durmiendo. Y Peter no es opción, tampoco ha querido voltear a hablarme.

De pronto, la puerta del salón se abre, y por ella ingresa un serio y distante Cameron. No se ubica en su lugar de siempre, junto a sus amigos. Sino que se va a la esquina derecha del salón, último y solitario banco. Todos lo examinan con detalle, la habitación quedó en completo silencio por al menos diez segundos, hasta que una mirada fulminante de su parte hizo que todos volvieran a centrarse en sus propios asuntos.

Deuce intenta hablar con él, pero Cameron reacciona mal. Ben interroga a Fred, o eso creo por la forma en la que su cara denota asombro. Sé que estoy observando como una chusma todo lo que ocurre, pero ya da igual.

Habría continuado haciéndolo, hasta que la señorita Emilce ingresó.

-Buenos días, clase.-saluda, con su habitual alegría. Todos responden el saludo en forma similar a un coro y ya estamos empezando a prepararnos para ir al auditorio.-Antes de irnos a ensayar, quiero recordarles a todos que nos quedan nada más que cuatro semanas antes de la presentación de la obra, ¿Oyeron? Eso quiere decir sólo cuatro ensayos más. Así que por favor, comprometanse. Sobre todo aquellos que necesitan aprobar.

Pongo los ojos en blanco, despierto a Holly y nos ponemos en marcha. Quiero hablar con Cameron, pero la verdad es que no creo que este sea un buen momento.

Él está en el grupo de escenografía, así que lo veo desaparecer por la puerta de su respectivo salón.

Entrego mi libreto a la señorita Emilce, que queda muy complacida, y me dispongo a hacer nada el resto de la clase. Sé que debería ayudar en escenografía, pero honestamente no tengo ánimos de hacerlo. Además, la actuación de mis compañeros es demasiado cómica, sobre todo Deuce. Es un Romeo estupendo. Él y Bianca tienen una química impresionante al actuar.

Me pregunto cómo es que lo hace, cómo puede ocultar tan bien sus emociones reales sobre el escenario. Cameron me dijo que el viernes estaba irreconocible, totalmente enfadada e histérica. Ahora mismo, lo único que yo veo es a la propia Julieta a punto de tomar veneno por creer perdido a su gran amor.

Se le llama actuación, supongo.

-Contigo quería hablar.-la voz fría y gruesa me hace saltar en mi asiento. Estaba demasiado concentrada como para notar su presencia a dos asientos de mí.

-Pues aquí me tienes, ¿Qué ocurre?-intento sonar amigable. Él y yo nos hemos llevado bien por poco más de un año, cuando lo conocí. Pero honestamente, me sigue pareciendo demasiado misterioso y oscuro. André es ese tipo de personas que nunca termina de sorprenderte, y yo nunca jamás me he metido en sus asuntos. Pero no puedo olvidar lo que ocurrió, como tampoco estoy segura de qué tan buena soy fingiendo demencia sobre el asunto. La idea de él presionándome porque mantenga la boca cerrada me causa escalofríos.

Un Amor UnilateralDonde viven las historias. Descúbrelo ahora