Capítulo 9, parte 3: La fiesta.

13 2 1
                                    


VENECIA

Entré al baño muy preocupada. Lo primero que vi, fue a Holly sentada en el excusado, con gruesas lágrimas cayendo por sus mejillas sonrojadas. Luego mi atención cayó en Luce, que intentaba consolarla sin mucho éxito.

Cuando me vio, todo su ser se relajó.

-¡Cia! Menos mal que llegas.

-¿Qué ha pasado, Luce?

- Pues no estoy muy segura. Estaba jugando al beer pong muy tranquila, cuando Peter vuelve de fumar afuera, con Holly llorando.-me explica. Miro atentamente a mi mejor amiga, consciente de lo que está haciendo.-Es mejor si te lo explica ella...

-Y claro que me lo va a explicar.-me agacho hasta quedar a la altura de Holly, y la miro de forma seria. Está muy equivocada si piensa que puede fingir conmigo.-Escúchame bien, te conozco desde hace años. En primaria nos llevábamos fatal y siempre te salías con la tuya para que la maestra me culpe por hacerte llorar. Sé muy bien cuando finges el llanto, Holly Maxon. Eres una gran actriz, pero no vas a mentirme a mí.

La rubia me mantiene la mirada, se seca las lágrimas de cocodrilo y suspira. No tengo idea de lo que ha pasado, pero sin dudas tengo que averiguarlo.

Luce la mira con cara asesina e indignada.

-¿Estabas fingiendo?

-Lo lamento, Luce. Pero no podía dejar que Peter siguiera a André...

-Eres imposible, Holly. Me voy de aquí.

La pelirroja sale hecha una furia. Se le pasará, creo...

-Ahora sí. Cuéntame lo que ocurrió.

Holly empieza a narrar los hechos con nerviosismo.

-Luego de lo que pasó con Deuce, André y yo discutimos. Él se fue enfadado de la fiesta y yo le seguí a pesar de todo.-me explica, con sus ojos cristalizados de verdad.-En el jardín de Cameron habían tres chicos esperándole. Me mantuve escondida detrás de unos arbustos cuando escuché que le preguntaban si había conseguido lo que les pidió el jefe.

Los engranajes en mi cabeza intentan comprender lo que me está diciendo. ¿Qué tendría que buscar André aquí, en casa de Cameron?

-Entonces recordé que hace un tiempo, cuando falte a la escuela, me quedé con André en su casa. Había ido para hablar pero pasaron cosas...-se sonroja de pronto. Entiendo a donde quiere llegar. Niego con la cabeza y espero que continúe.-la cuestión es que en la mañana al levantarme, él ya no estaba. Bajé al comedor de su casa, casi nunca hay nadie, pero esa vez, estaban André, su padre, sus dos hermanos mayores y el enemigo político del señor Hilltop...

Wade Preston. Conocía de la existencia de ese sujeto por sus constantes publicidades y apariciones en entrevistas. Me pregunto que hacía un tipo de tanto renombre y prestigio en casa de la familia D' Amico. La misma maneja una pandilla conocida por realizar trabajos no muy legales y por no ser el tipo de personas con las que te gustaría tratar. André ha odiado a su familia toda la vida, siempre ha dicho que quiere salir de ese agujero, aunque no parece encontrar la manera.

-¿Qué hacía Wade Preston allí?

-Escuché a escondidas que estaban haciendo un trato para acabar al señor Hilltop en las elecciones.-Falta tan sólo un mes para que se abran las votaciones y se elija un nuevo alcalde.-No entendí a qué podían referirse, pero entonces André dijo que no quería saber nada con ellos y volvió al cuarto. Corrí como nunca para que no me descubriera y lo logré.

<<La cosa es que al oírlo hablar con esos tres tipos, entendí que sea lo que sea que haya venido a buscar aquí no era para nada bueno. Salí a enfrentarlos, me mandaron callar y me amenazaron. André les dijo que ni se les ocurra ponerme un dedo encima, pero me rogó que me fuera... yo... yo no hice caso, me sentí muy mal. Exploté por todo lo que había pasado entre nosotros últimamente, y terminé gritándoles que iba a denunciarlos por todo lo que sé de sus movidas ilegales.-la primer lágrima se escapa de sus ojos. La abrazo con fuerza, a sabiendas de que esta vez son reales. Acaricio su cabello intentando tranquilizarla.-uno de ellos me dijo que necesitaba aprender a callarme y me abofeteó.

Un Amor UnilateralDonde viven las historias. Descúbrelo ahora