La Sustituta.. El Engaño

Capitulo 29

Llaman a la puerta de la oficina de Chris.

- Señor Evans!
- Que quieres David?
- Informarle que su reunión comenzara en 20 minutos.
- Cancelala!
- Pero señor?
- Que la canceles! - Grito Chris
- Si señor

David cierra la puerta, Chris lanza el teléfono contra el sillón, le da un golpe al escritorio y se sentía en su silla frotándose la cabeza, todo había sido producto de su imaginación y de sus celos enfermizos por Henry.

- Maldita sea Emilia dónde estás?

Mientras que yo en la habitación del hotel termino de vestirme, miro el reloj estoy justo a tiempo, el taxi que he pedido llega por mi, tomo mi celular lo meto al bolso, de camino a la entrevista llamaré a Chris, salgo de la habitación, tomo el ascensor hasta la planta baja del hotel, el taxi me espera, en el camino saco mi teléfono para llamar a Chris.

- Mierda! Esto no puede ser, porque soy tan estúpida...

Mi teléfono está sin batería, olvide recargarlo la noche anterior... Chris va a estar furioso. No hay nada más que pueda hacer, y no puedo detenerme en ningún lugar para llamarlo, llevo el tiempo justo.
El taxi se dirige a la sede principal de HC GROUP, miro mi reloj y marcan la 08:45 am, me bajo del taxi y observó el imponente edificio de treinta pisos de altura en vidrio y acero, y con las palabras * HC GROUP * en un discreto tono plateado en las puertas de cristal de la entrada. Respire profundo, entre en el inmenso vestíbulo. Llegó al mostrador donde una hermosa mujer morena me sonríe amablemente.

- Buenos días, bienvenida a HC Group en qué puedo ayudarle?

- Buenos días, vengo a ver a la señorita Elizabeth Olsen. Soy Emilia Benett.

- Discúlpeme un momento, señorita Benett -me dice

Decidí usar mi nombre de soltera, porque no deseo que me lleguen a tratar con favoritismos por ser la esposa de Chris Evans.
Espero tímidamente frente a ella. No sé porque estoy tan nerviosa, me paso por detrás de la oreja un mechón de pelo que se me ha soltado de la coleta fingiendo no sentirme intimidada mientras la morena habla por teléfono.

- Señorita Benett me acaban de confirmar su cita, por favor firme aquí, me permite una identificación por favor?
- Oh si .. claro
- Tome el ascensor de la derecha, y oprima el número 30.

Me sonríe amablemente, me entrega un pase de seguridad que tiene impresa la palabra VISITANTE. Respiro profundo, le doy las gracias y me dirijo hacia los ascensores, se abre la puerta del ascensor óprimlo el # 30 y este comienza a subir, las puertas se abren y salgo a otro gran vestíbulo, me acerco a otro mostrador y me saluda otra hermosa mujer vestida impecablemente de blanco y negro.

- Señorita Benett, puede esperar un momento por favor?

Señalándome una sala de espera con muebles de color negro, un ventanal desde el suelo hasta el techo que ofrece una vista de la ciudad. Me siento, saco mi currículum del bolso y le echo un vistazo, estoy muy nerviosa. Nunca me he sentido cómoda en las entrevistas cara a cara. Prefiero el anonimato de una charla en grupo. Respiro profundo. Contrólate Emilia es solo una entrevista. Para calmar mis nervios observo todo el lugar es impecable, el diseño es moderno, trato de imaginarme como será la señorita Olsen, me la imagino de unos 30 o 35 años, me supongo que debe mantenerse en forma, para estar juego con el resto del personal del lugar.
De una gran puerta sale una elegante mujer, impecablemente vestida. " De dónde sale tan perfectas?" Parecen de un catálogo de revista.

- Señorita Benett? me pregunta la mujer
- Ah! Sí..
- La señorita Olsen la recibirá enseguida. Quiere darme su abrigo?
- Ah! Sí, gracias - le contesto intentando con torpeza quitarme el abrigo.
- Quiere un té, café, agua? -me pregunta
- Un vaso de agua estaría bien, gracias - le contestó en voz baja
- Amelia, tráele a la señorita Benett un vaso de agua, por favor - dice en tono serio.
- La señorita Olsen la atenderá en cinco minutos.