Carta A Un Ex Amor

capitulo 31

Silencios prolongados había entre Carlos y yo, miraba los juegos artificiales y fue inevitable recordar nuestro corto viaje al interior del país, donde la noche y los sonidos de los juegos artificiales eran testigos de las miradas y nerviosismo de dos jóvenes jugando a ser mayores,  no voy a negar que por un momento te extrañe y tal vez  en el  fondo deseaba que ocuparas el lugar de Carlos esa noche , pero también debo admitir que la presencia de Carlos en mi vida no me resultaba del todo indiferente.

Me agradaba conversar con él, eran charlas eternas de confesiones y risas, muy diferentes a las nuestras que en las últimas semanas de nuestra relación estaban llenas de reclamos y arrebatos tratando de buscar culpables.

Terminaron los juegos artificiales, se apagaron todas las luces por unos segundos sentí que alguien me toco el brazo yo salte del susto, tranquila soy yo dijo Carlos, pero tu estabas en el otro lado, sí, es cierto respondió, hace algún momento, solo que cierta personita anda pensando en los elefantes que vuelan y no se dio cuenta que pase cambie de lugar.

Discúlpame, Carlos, tienes razón ando un poco volada, lo se contestó , acaricio mi cabeza y dijo vamos te llevo a tu casa, Perdón!!!!????? , a ver si es cierto desde que lo conocí se ha portado bien conmigo pero no me voy a subir al auto de una persona que recién estoy conociendo pensaba , no sé qué expresión vio pero se apresuró  en decir tranquila, mira¬ saco su celular¬ te voy a enseñar a mi familia ellos son mis papas , el es mi hermano , mi hermanita y este es mi perro llevamos 10 años con él, y estos de aquí mis amigos , estamos en una fiesta mi cumpleaños, estos son mis apellidos , mi calle donde vivo ,la dirección de aquí y la de México.

Ahora silo vivo con mi hermano, mis padres ya se regresaron, algún día los conocerás y te darás cuenta lo maravillosos que son, por ende, tienen a un buen hijo.

Al ver todo ese despliegue de honestidad y presentación familiar virtual me dio cierta confianza, pero igual iré con la mano en el seguro de auto pensaba.
Vivo lejos dije¬ no importa, respondió.
Bien vamos, caminamos hacia su auto ,entramos, encendió la  radio y entre música y platica enrumbamos  camino a mi casa………….