Oscura Atracción (Completa)

Dimitri

Los jugadores dedicaban horas a entrenar sus cuerpos, con el fin de darlo todo en la cancha. Músculos palpitaban y mientras hilos de sudor corrían por sus piernas, junto a su corazón latiendo a mil caballos de fuerza; se empezaban a notar en la cancha exhausto, pues llevaban dos horas entrenando y Connor consideró que fue suficiente estaban más que listo para hacer frente al equipo contrario. Solo faltaba preparar y repasar las estrategias próximas.

Dimitri a su lado sonreía por el placer que percibe  al ver como luchaba intentando recobrar el aliento. Buscando aire para continuar.

Connor sentía su pierna arder quemando energía, que luego recuperará  comiendo en cantidades colosales. Y en la cama.

Verde como el bosque circunscrito por líneas blancas el campo de batalla se abría ante los jóvenes donde un ganador levantaría la copa sobre el equipo perdedor. Como en la vida debe existir ganadores y perdedores, personas que por sus capacidades se levanten sobre los demás. No en forma de regocijo más para demostrar que son dignos y dignificar la meta que se han propuesto.

Connor le hace un signo al entrenador y se aproxima a él para pedirle que paren pues considera que es suficiente. 

—Vamos a parar, por hoy ha sido un entrenamiento adecuado—dijo el entrenador, tomando el cuaderno donde anotaba las deficiencias que veía de los jugadores.

Su esperanza era que Connor y Dimitri hicieran la parte pesada y los demás les sirvieran de apoyo.

En los vestidores los cuerpos llenos de sudor y excitados por el entrenamiento se mofaban unos de otros, golpeando sus carnosos glúteos con las toallas. Repitiendo lemas de victorias para animarse y animar a los demás.

Cuerpo de chicos desnudos pueblan entre el olor a sudor los baños, hablando de chicas y la fiesta en el bosque de esa noche.

  —¿Y qué vas a hacer? — le pregunta Connor a Dimitri.

—Tengo una batalla cuerpo a cuerpo con una chica de primer año—dice Dimitri sonriendo y guiñando un ojo.

Dimitri se dirigió  a su habitación donde una chica lo esperaba sentada leyendo  una novela de romance sobre vampiros.

  —Demoraste mucho, bebe—le dice besando, mientras él se tira sobre ella quitándose la ropa mutuamente.

la ropa empezó a ser tirada al suelo, y por las próximas dos horas disfrutaron de su cuerpo hasta el cansancio.

La espalda de Dimitri quedó llena de arañazos y la chica dormida sin cubrirse debido a la muerte lenta que le produjo el último orgasmos que sintió, despertara una hora después en esa habitación; satisfecha. 

El hambre despertó a Dimitri y pensó en la deliciosa comida que debe estar siendo servida en la cafetería. Observando a su compañera dormida le arrojó una sábana cubriendo su pubis.

Se dirigió a la cafetería.

Dimitri entró a la cafetería, en una esquina los platos se acumulaban esperando pacientemente ser fregados, pues la hora de la comida fue hace dos horas. Solo ofrecían alimentos como: Botanas, pan, dulce. Cada cuatro hora se sirven las comidas.

La comida restante era llevada a centros de alimentación en el mundo humano, donde las personas sin recursos podrían comerlo.

Connor estaba hablando con Emily en una de las mesas próximas a los baños, lugar donde pocos se colocaban por lo incómodo que resultaba para todos comer cerca del espacio donde hacen sus necesidades básicas.

A Dimitri no le agradaba Emily porque desde que apareció veía a su amigo más atraído de las actividades divertidas a las que se dedicaban.

Lo tenía abandonado lo mismo que a sus fiestas y locuras como tríos con diferentes chicas cada noche. Sentía que se había vuelto más aburrido.

Consideraba cambiar el comportamiento de Connor y empezaría con la fiesta que se celebraría esa noche en el bosque.

Emily sostenía la mano de Connor y este se observaba incómodo por algo que ella le dijo, se levantó y caminó hasta donde estaba Dimitri. Sus ojos conteniendo las lágrimas de impotencia por no lograr su objetivo.   

—¿Qué pasó ahora? ella sigue pensando en ese idiota de Khalil— le pregunta Dimitri mientras se cómo su postre. Un pastel de vainilla con un jugo de naranja.

—No me molestaría que piense en otro, es solo, no sé porque él—responde Connor. Golpeando la mesa con fuerza derramando un poco del jugo de Dimitri.

—Deja de pensar tanto vamos a divertirnos hoy, habrá una pequeña reunión en el bosque. Muchas chicas y licor para todos. No tienes porque sufrir por una chica si hay tantas esperando tener la oportunidad de estar con nosotros—Dijo riendo

—Tienes razón, a pesar de ello no puedo quitarme este mal sabor que me deja ella.

—¿Cómo te fue con Connor? — le pregunta Magnar a Emily.

Ella hizo un gesto con los hombros intentando restarle importancia a lo que acababa de suceder y solo intento terminar de tomar su jugo de moras.

—Sí, él no comprende que te gusta Khalil es asunto  de Connor—dijo Tarah. 

—Pronto serán las vacaciones de mitad de curso, las invito a mi casa podemos divertirnos mucho—le dice Magnar.

Magnar poseía una casa en la playa donde solía pasar largas temporadas divirtiéndose con las turistas y practicando deportes extremos.

Las fiestas que organizaban su familia eran de las más famosos de la región. Llevar amigos era algo normal para él.

—Gracias por preocuparte por nosotros, lo pensaremos—dice Emily.

—Habla por ti, yo si me apunto—dice Tarah —solo debo avisarle a mi madre y ya.

La cafetería estaba vacía la mayoría estudiaba para la época de exámenes.

Emily se sentía profundamente molesta al ver que Connor complicaba todo poniendo sus emociones antes del trato que habían establecido con anterioridad. Solo sexo y nada más.

Las chicas del aseo pasaron recogiendo los platos y limpiando las mesas.

La mayoría pensaba en sus notas, pero, Emily se había esforzado tanto que ya no era un problema. Se podría ir a su casa sin preocupaciones por ese tema.

Su mente estaba ocupada por temas más importantes y peligrosos un sentimiento extraño habitaba su interior.

Emily se retiro a la biblioteca y saco un libro para meditar que implementaba el método de las energías.

El primero en la base de la columna y es de color rojo debes pensar en la tierra la madre de todo.

Lo que permite la vida de los árboles, árboles que dan fruto y alimentan a los animales. La madre que permite el ciclo de la vida. Concentra la energía de éter en esa zona dando masajes circulares alrededor de cuello.

Medita en la naturaleza viva y muerta que te rodea, escucha a tu madre naturaleza. Se una con el todo.

—Emi..Emil...Emily, ayuda me

Mientras Emily meditaba escuchaba la voz se Khalil llamando la desde las sombras...