Capítulo 17

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Capítulo 17

- ¿Qué estás haciendo ahí? -Woo Bin te observó desde la cama, con el ceño fruncido y realmente cansado.

- Estoy grabando todos tus datos y bocetos de arquitectura para mandarlos a las mejores compañías de Estados Unidos -Dijiste con una sonrisa divertida y traviesa.

- ¿Qué? -Preguntó el pelirrojo- Estás de joda, ¿no?

- Obvio, tonto, además que sería muy estúpido decir un plan tan ampliamente a tu enemigo.

- Así que tú enemigo, ¿Eh? -Woo Bin alzó una ceja divertido y sonrió de lado y se acercó caminando a ti.

- Solo ando jugando -Dijiste, Woo Bin se puso tras de ti y miró el juego, se mordió el labio- ¿Sucede algo? -Preguntaste.

- ¿Qué harás hoy? -Preguntó.

- Tengo que practicar el patinaje -Dijiste- ¿Por qué?

- Debo hacer trabajo en la compañía de mi padre, ¿Te parece si pasan buscándote y comemos juntos?

- Dependiendo de la hora en la que salga -Dijiste- Pero... yo te aviso -Lo miraste y le diste un pequeño beso en su barbilla, para seguir jugando.

...

No era verdad que tenías que ir patinar, habías dicho una pequeña mentirilla, pero con fines buenos o al menos eso creías. Llegaste a tu casa, toda emocionada con ganas de cocinar y preparar algo para darle una pequeña sorpresa a Woo Bin, justo cuando ibas a la mitad de preparar los bollos de carne, un mensaje te llegó, era de Ji Hoo.

- ¿Qué Jan Di qué? -Fue lo que dijiste al ver ese mensaje tan alarmante de parte del rubio, lo llamaste dejando a un lado la comida por unos minutos- Pero, ¿Estás seguro que está bien?

- Descuida, solo fue para avisarte que está aquí, si puedes llamar a sus padres -Pide el rubio.

- Claro, Sunbae -Dijiste- Yo los llamó, por favor cuídala -Dijiste.

Trancaste la llamada y te quedaste mirando el celular, eran las 2 de la tarde y ya estabas comenzando a tener hambre, miraste de nuevo la comida y suspiraste, aún quedaba trabajo por hacer.

Cuando todo estaba listo, lo metiste en boles para luego meter estos dentro de un gran bolso- Espero que estén calientes al llegar -Susurraste para luego salir del apartamento, desde luego ya te habías dado una ducha súper rápida y estabas luciendo una linda chaqueta azul sobre una camisa blanca, unos blue jeans y unas hermosas botas color beis.

Le habías avisado unos minutos antes a Woo Bin que irías a la compañía, el muchacho se encargó de mandarte una limusina para recogerte y llevarte directo con él. Desde luego, cuando bajaste y saliste del edificio, ahí estaba la limosina negra junto con el chofer que te esperaba tranquilamente, al verte, se bajó y abrió la puerta para que pudieras pasar. "Ni si quiera sabe si soy yo, ¿O sí?, ¿Le hubiese abierto la puerta a otra persona?, Ay, deja de pensar tonterías, _____."

Al llegar a la compañía te bajaste y te encaminaste por el lugar, ya te sabías todo de memoria más o menos, a veces se te olvida donde debías doblar, si quiera a la izquierda o a la derecha, te mordiste el labio inferior después de marcar el último número del ascensor al entrar y este cerrar sus puertas.

Al llegar al último piso, dudaste un poco, miraste a la izquierda y luego a la derecha, te fuiste por la derecha, luego por la izquierda y otra vez a la derecha. "Definitivamente este lugar parece un laberinto" -Pensaste.

Alzaste una ceja al ver que no había secretaría alguna donde debía estar, miraste por todos lados y se te hizo raro que no hubiese tampoco personal o incluso alguno que otro cliente, solo eras tú en ese lugar.

BFF: La Otra HistoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora