• 15: ¡Estas aquí! •

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La bocina de un auto que se encontraba en la puerta principal llamo la atención de los guardias provocando que estos aparten su vista del sospechoso.

Yoongi optó esto como una oportunidad para escapar.

Levantó su mochila que se había caído cuando cayó accidentalmente del árbol y salió corriendo obstinado a llegar a la cena.

Llegó al muro que dividía la calle principal con el jardín de su casa.

Gracias a lo ágil y flexible que era el chico puso saltar el muro sin ningún problema, algo que los guardias no puedieron hacerlo al ver al chico que se escapaba.

Sin mirar hacia atrás se perdió entre los edificios que componían la ciudad.

-Vamos que esperan- dijo el padre en el auto mientras tocaba bocina para que le dejarán entrar.

-Lo siento señor.

El padre solo hace un gesto de fastidio y decide acelerar y llegar a la puerta principal de la casa.

-Okay, come over here- se dirigía su padre hacia los empresarios ingleses que habían llegado a su casa con el propósito de cenar.

-Eh señor, tenemos un problema- aclaro uno de los sirvientes.

-Wait here- mencionaba mientras les señalaba la sala principal.

-Señor su hijo, ha escapado-

El padre no podía creer lo que estaba pasando, en un noche tan importante para el, su hijo se escapa de casa.

Golpea el comedor y luego manda a los sirvientes para que atiendan a los invitado.

Mientras tanto Yoongi iba corriendo hacia la casa de su amigo.

Llegaba con 10 minutos de retraso.

Miles de cosas pasaron por la cabeza del chico al pensar en Jimin, pensaria que no quiso venir o que le mintió.

La rabia y la insistencia de llegar tarde a la casa daba impulso a qué el mayor corra cada vez más rápido.

-Llegue, Soo- gritaba jimin mientras cerraba la puerta con el pie.

En sus dos manos traía las bolsas del súper.

-Por fin, tengo muchaaaaa hambre- se quejaba la niña mientras se estiraba en el sofá.

Jimin la veía y no podía parar de comprarla con un gato gordo que su única funcion era la de comer y dormir todo el día.

-Hmmm que raro, Yoongi ya debería de haber llegado- mencionaba el pelirrosa mientras veía como las manijas del reloj cada vez se movían de una forma más lenta de lo normal.

Tal vez por lo impaciente que estaba, o porque su cerebro jugaba con el.

-No lo sé, tal vez no quiso venir.

-No digas tonterías.

Jimin se dirigió a la cocina y colocó las bolsas sobre el mesa.

Iba sacando las cosas que había comprado para la cena, pensando que este iba a hacer un gran día.

-¿Y la pizza?- pregunto Soo mientras se reclinaba sobre el marco de la puerta que conectaba la sala principal con la cocina.

-No habia.

-¿Como es eso que no había?.

-No, por eso pensé que lo mejor sería hacer pizzas caseras a lo jimin.

Soo no le gustaba la idea, la última vez que su hermano cocino casi quema el 80% de la cocina.

-Okey....- dijo Soo mientras se reía algo preocupada porque Jimin trataba de buscar una receta en su celular.

"¡Estúpido Ángel!" »YM« 💜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora