CAPÍTULO 42- "Ángel" Parte 2

167 29 6
                                    

CAPÍTULO 42- "Ángel" Parte 2

Me le quedé mirando, atónita. Esperando que me dijera que se trataba de una broma, pero él ni se inmutó, firme ante su declaración. Creí haber estado así por horas pero al parecer sólo fueron minutos. La luz que comenzaba a irse y a dejar a oscuras la habitación me despertó de mi ensoñación.

-¿Estás bien? -me preguntó Theo-. Hace una hora que estás sin hablar y con la mirada perdida.

Bien. No habían sido minutos. Había sido una hora. Bien por mi sentido de la orientación; pero lo que me acababa de confesar era demasiado para asimilar.

Recordé lo que me había dicho hacía un rato y tiré:

-Antes me dijiste que era una simple mortal y ahora me dices que soy mitad ángel, ¿cómo es eso posible? ¿Estás jugando conmigo o siendo sincero?

-Esa, fue una prueba. Quería asegurarme de que lo creía era verdad.

-¿Y cómo lo supiste entonces? ¿Es con tu sentido arácnido de ángel?

-Primero, los ángeles no tenemos sentido arácnido, ese es Spiderman. Segundo, mis poderes vienen de Dios, él me los regaló en el momento en que morí y me eligió para seguir su tarea.
"Pero para responder tu pregunta, lo supe cuando vi tu aura. Irradias un aura muy fuerte incluso para ser mitad ángel".

-¿Y por qué es eso?

A este punto ya me había levantado de la cama e iba y venía caminado por mi habitación tratando de calmarme, cosa que evidentemente no estaba funcionando.

-Moriste tres veces en tu vida. Y en la tres veces regresaste.

Rápidamente me di vuelta para mirarlo de frente.

-Yo no morí tres veces -dije de manera tajante. 

-Las dos últimas fueron en el accidente con tus padres y cuando caíste en la piscina en la fiesta cuando Bethany te tiró.

-¿Y la primera? Debes estar mal de la cabeza porque esa no me la recuerdo.

-La primera fue cuando naciste.

Esa revelación era algo que me dejó muda nuevamente, nunca antes escuché a mis padres mencionar algo remotamente parecido a morir cuando apenas era un bebé.

-Tus padres no te lo dijeron, es verdad. No les pareció que era importante remover algo tan doloroso como el haberte perdido cuando recién habías nacido. Es esa la verdadera razón por la cual tu madre no quiso tener más hijos, ella no quería pasar por el mismo sufrimiento que pasó cuando tú naciste. Eso la marcó hasta el día de su muerte. 

Me senté en mi cama nuevamente para asimilar todo lo que me había contado Theo. Estaba casi segura de que estaba por tener un ataque de ansiedad cuando Theo tocó mi hombro.

-Sé que en este momento estás librando una batalla personal en tu mente y que todavía te cuesta creer que eres mitad ángel, pero tienes que entender que cuando moriste la primera vez eras un alma pura, recién nacida, sin pecados. 

"¿Nunca te preguntaste por qué tienes esa marca en la espalda? ¿Más precisamente del lado de tu hombro derecho? Cada vez está más grande. Te dejaré sola para que empieces a asimilar todo. Te espero abajo en un rato para que hablemos sobre el destino de Lucas".

Theo se fue y al dejarme sola me desmoroné, pero psíquicamente. Todo era demasiado, sentía que me estaba por volver loca, y quizás lo habría hecho si no se me hubiese ocurrido mirar la herida en mi espalda que Theo había mencionado con anterioridad. 

Me saqué el abrigo y la camiseta que llevaba puestos, tirándolos al suelo. Miré el espejo de frente y de a poco fui dándome vuelta hasta quedar de espaldas a él. Di vuelta mi cuello para tratar de ver la herida, pero lo que vi fue mucho peor. La herida ya no era pequeña ni de broma. Medía unos diez centímetros y sangraba. De repente comencé a sentir que dolía. Sin embargo, lo que más me asombró fue algo blanco que intentaba salir de la herida. Lo tomé y empecé a sacarlo con el máximo cuidado posible, tratando de que el dolor no me noqueara en el proceso.

Lo que vi fue más allá de mi entendimiento. Era una pluma, una pluma blanca. Y yo, solo pude gritar.

Después del silencio ©(Después de la vida #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora