Si, profesor [Aizawa Shota]

Cap15

Aizawa

Ya es el cuarto dia que vamos a trabajar en la biblioteca y estoy caminando hacia la clase de Mei, que está por acabar en unos minutos. Lo único que me molesta mientras espero es toda esa chiquillada saliendo en manada de clase para irse a casa.

Espero contra la pared cuando suena la campana para evitar lo máximo posible el grupo de adolescentes. A pesar de la multitud y de haberlos aguantado todo el dia estoy de bastante buen humor. Me hace cierta ilusión pasarme este par de horas ordenando libros. Mei hace buena compañía, muchísimo mejor de lo que me esperaba, eso sin duda.

Además, verla reir es mil veces más agradable que verla cabreada, aunque también es entretenido tocarle las narices de vez en cuando, quitando que no se corta un pelo para devolverlo.

-Hola profe- habla Mei después de haber salido prácticamente la última del aula.

-¿Qué tal las clases niña?- le pregunto en cuanto empezamos a caminar.

Por la hora que es los pasillos se vacían rápidamente quedándonos básicamente solos en un par de minutos.

-Largas, demasiado- protesta echando la cabeza hacia atrás

-Que exagerada eres Weber- respondo mientras miro la mochila de su espalda- dame eso.

Agarro la bolsa y me la cuelgo de uno de los hombros.

-Gracias- dice sorprendida de mi acción. Lo he hecho sin pensarlo demasiado, que tontería.

Seguimos caminando hasta llegar prácticamente a la biblioteca en un silencio bastante extraño antes de que Mei vuelva a quejarse. Siempre se le ocurre algo diferente para lamentarse, esta mujer no termina de encontrarle pegas a todo.

-Ya no me apetece nada seguir con esto, de verdad...-dice mirándome con cara de pena- estoy cansada.

-Te pondré un positivo por cada dia que tengamos que trabajar, ¿te parece?

-Profe, ¿me esta sobornando?- pregunta con una sonrisa en la cara. Yo simplemente me encojo de hombros. Apenas quedan unos pasos para llegar a la puerta y ella se adelanta rápidamente y se detiene delante de esta. Extiende la mano hacia mi antes de hablar otra vez- trato

Levanto una ceja y la observa con algo de diversión.

Esta chica es todo un caso.

Niego ligeramente y saco una de las manos de los bolsillos para agarrar la suya y apretarla sin demasiada fuerza

-¿Cómo tiene las manos tan frías? Parece un cadáver- comenta sorprendida. Tiene la mano templada y extremadamente suave. Abro los ojos de golpe y una sensación de nervios me invade de pies a cabeza cuando pone la mia entre ambas palmas y los dedos de una de sus manos se entrelazan a medias con los míos- le voy a regalar unos guantes profe.

Me suelta y entra en la biblioteca dejándome ahí parado como estúpido.

¿Qué ha sido eso?

-¿Cuándo es su cumple?- pregunta desde lejos empujando el carrito hacia el siguiente pasillo. Yo me apresuro a acercarme a donde esta ella después de salir de ese estado de idiotez momentáneo

-8 de noviembre, ¿y el tuyo?

-31 de octubre- responde concentrada mientras apunta algo en su móvil.

-¿Cumples en Halloween?- ella asiente con una enorme sonrisa. Parece ser que le gusta la fecha.

Empezamos a trabajar callados y con su musica de fondo, no tiene un gusto horrible, pero tampoco puedo decir que me encanten las canciones que pone. Me quedo observándola moverse de vez en cuando al ritmo de la musica, canturreando muy bajito la letra y concentrada en lo que está haciendo. Sonrío ligeramente mientras la miro de reojo de vez en cuando hacer el bobo.

Cuando queda cerca de media hora para que terminemos por hoy me escapo cinco minutos para ir al baño, y al volver la encuentro sentada dentro del carro, jugando con el móvil y con un libro encima de las piernas. Me mira y sonríe maliciosa. ¿Y ahora que trama?

-¡Profe, mire! Este libro es perfecto para usted- dice al tiempo que me lo ofrece.

-"Como controlar el mal humor"... que graciosa eres

-Pero le caigo bien- habla antes de guiñarme un ojo.

-Bueno, te soporto- respondo para picarla un poco

-¡Mentiroso!- exclama con aun con una sonrisa.

-¿Sabes qué? Estas para una foto ahí metida- saco el móvil bromeando porque no tengo intención de hacérsela, es ilegal, y antes de que pueda reaccionar lo tiene entre las mano. Menuda rapidez- ¡Ey! Devuélveme eso.

-Nop, ni hablar- dice negando y con una sonrisa.

-Pero si no puedes salir, ¿dónde piensas ir?

-Si que puedo, pero...- la corto empezando a empujar el carro con ella aun dentro, evitando del todo que intente escapar-¡NOOO! ¡PARA!

Sus carcajadas se escuchan altas y claras mientras estoy casi corriendo por los pasillos. No me lo había pasado tan bien como estos días en años. A pesar de hacer tanto el tonto el trabajo ya está a más de la mitad, en un par días estará totalmente terminado y listo para que se pueda entrar a la biblioteca de nuevo con normalidad. Pero... ¿porque me apetece alargarlo? ¿Por qué me entristece el pensar en dejar de trabajar estas dos horas extras?

Esto no es normal, ¿verdad?

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gracias por leer🖤