Ayanokouji Kiyotaka X Harem | Classroom of the Elite

Parte 18

Ayanokouji Kiyotaka

Enfrentamientos. Estos por fin habían iniciado. Mi primer enfrentamiento, si es que nadie se interponía, iba a ser contra alguien completamente irrelevante. Un estudiante que pertenecía al promedio inferior con respecto a notas académicas, pero por encima de lo normal en habilidades físicas. Incluso me atrevo a decir que fue arrastrado por sus compañeros más capases hasta donde se encuentra.

Les daré las gracias por traerme un sacrificio a mis propias manos. Gracias a este personaje irrelevante, sobreviviría un año más en esta escuela.

El creer que alguien es inferior a ti solo por tener unos cuantos años más de existir no te hace solo un idiota, sino también un ingenuo. Cada persona es un mundo desconocido que todos ignoran. Debilidades y fortalezas encierran a una persona a conseguir lo que desean.

Yo era alguien que carecía de muchas debilidades, y eso me hacía alguien "excepcional". Pero, el carecer de debilidades, para mí, era mi principal debilidad.

Para mi padre al menos no lo era. Pero para mí lo es. Va en contra de la vida que deseo vivir.

La ingenuidad del tipo al que me enfrentaba, lo llevo aquí. Enfrentar a un espécimen libre de la sala blanca en temas físicos. Pese a pertenecer a un año superior, sentía temor de elegir un tema académico. No lo culpo, yo haría lo mismo si estuviese en su posición. Pero pudo elegir mejor a su oponente...

Confianza. Su molesta sonrisa, y su caminar despreocupado, expresaban confianza en lo que había conseguido. El tipo era tan irrelevante, que Nagumo, ni nadie por el estilo, le había advertido sobre mí.

Mi nombre no era muy popular pese a lo sucedido con Horikita mayor, ni por Nagumo, debería agradecerle luego de darme un enfrentamiento gratuito.

Pero ahora eso no importa. Conseguiría lo que estaba buscando. Puntos casi gratuitos y sin ningún esfuerzo.

La vida le daría una prueba del karma que supuestamente existía en el mundo. Y yo me encargaría de eso.

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El ambiente en los pasillos era un poco extraño. A pesar de no haber muchos alumnos circulando, aún se podían ver a unos cuantos conversando o simplemente pasando el rato. Pero, lo más extraño, era ver el patio lleno de grupos de alumnos observando o enfrentándose el uno a los otros.

Lamentablemente... mi vista se topó un enfrentamiento un tanto peculiar... El tema de "piedra-papel-tijera". No tenía muchos espectadores y creía saber la razón de por qué esto era así...

Los temas de nuestros enfrentamientos eran muy simples, así que la persona con la cual me enfrentaría buscó por un buen rato a un juez, y un sitio donde poder enfrentarnos.

—Por fin pude encontrar un sitio... —dijo mientras se limpia una gota inexistente de sudor de la frente— Deberías esforzarte al menos un poco, ¿sabes? Lo he hecho todo yo... —se quejó de su pequeña caminata.

Obviamente mentía. Lo había visto dar vuelta y conversar con unas cuantas personas que aparentemente eran cercanas a él. Había hecho de todo menos buscar un juez y un sitio.

—Lo siento. —me disculpé de forma indiferente.

No quería hablar demasiado con él. Me incomodaba mucho más que Sudou cuando se volvía un completo gorila.