Capítulo 7

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Los días han transcurrido bastante rápido, ya había iniciado el mes de estudio para responder correctamente en los exámenes de A levels, pero no debía preocuparme por eso ahora, hoy es viernes y hay una fiesta en casa de Liam, no me lo perdería por nada en el mundo, aunque siempre es lo mismo, música ridícula, gente sudorosa y borracha. Particularmente, voy por la bebida gratis y en busca de alguna chica para pasar la noche.

Justamente me estaba preparando para la fiesta, acostumbro a elegir lo primero que veo entre mi guardarropa, lo que nunca falta es la chaqueta negra, estaba a punto de salir, cuando el sonido de mi móvil llama mi atención, le doy una rápida mirada al identificador de llamadas, es Liam.

—¿Qué quieres? —había mucho ruido del otro lado de la línea.

—Majid, ¿a qué hora piensas llegar?, solo faltas tú, bueno también Danielle, ¡¿Zack estás con mi novia?! —Liam ya está ebrio, solo estando de esa manera el pensaría que estoy con su novia, absurdo.

—Liam que mierda dices, claro que no estoy con ella, ya voy saliendo —dicho eso cuelgo la llamada y pongo en marcha mi moto, el transito es un desastre, hay demasiada gente en la calle, es viernes social, es de esperarse muchas personas yendo a fiestas, a los pubs, a cenar y beber, y los aburridos solo se quedan en casa a ver películas en Netflix comiendo pizza o palomitas con su perro al lado.

La casa de Liam estaba repleta de personas bebiendo, bailando y algunos casi teniendo sexo, lo que encuentro algo muy desagradable, ¿por qué todo el mundo se tiene que enterar de que lo tendrán?, un gran porciento de lo que están aquí lo harán y no por eso tienen que demostrarles a los demás de que será así; busco a Liam con la mirada y no lo encuentro por ningún lado.

Él vive con sus padres, y no se fueron de viaje por una semana y le dejaron la casa sola a Liam para que haga una fiesta, mas bien, sus padres son demasiados modernos diría yo, y apoyan casi en todo a Liam, después de todo es un tipo sano, sus padres hacen su propia fiesta dentro de esta, y luego desaparecen con sus amigos ricos a emborracharse a alguna habitación y quedarse dormidos mientras intentan parecer jóvenes, cuando no lo son.

—¡Hey Zack!, aquí un trago —aparece mi amigo, no sé qué es, ni por dónde ha pasado, pero no pienso mucho en ello y solo me llevo el vaso a la boca y le doy un sorbo a la bebida, quema al pasar por mi garganta, pero luego de saborearla tiene un toque de dulzura y solo puedo pensar que es realmente delicioso.

—¿Qué es esto Liam? —nunca lo había probado antes, tomo otro trago.

—Es vodka con otra cosa que no recuerdo, diviértete Majid, si ves a Danielle hazle saber que estoy en la cocina—seguido de eso desapareció entre la multitud.

Lo único que hice después fue irme a una esquina a disfrutar de mi bebida y ver como las chicas movían sus caderas al son de la música, cómo dije antes un tanto ridícula, siempre hacía lo mismo, observar primero para luego acercarme y al final de la noche ya tenía un buen polvo.

Mientras miraba la falda ajustada de una chica de cabello rojo oscuro y me preparaba para acercarme, el sonido de algo además de la música llamo mi atención, alguien estaba tocando el timbre, quien estaría llamando a la puerta cuándo es notable que hay una fiesta dentro y que nadie se va a tomar la molestia de abrir, pienso muy bien lo que estoy a punto de hacer y efectivamente desvío mi camino y abro la puerta.

Para mi sorpresa Danielle y Brenna están paradas frente a mí, Danielle usaba algo que dejaba a la vista sus piernas como el resto de las chicas que están aquí, mientras que Brenna solo usaba jeans gastados, y debo admitir que se ve mejor que cualquier chica que haya visto en este lugar, se ajustan muy bien a su cintura y es la única diferente.

Escape: Zack ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora