Tú eres, Mía. © | ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵃ ✔ |

|14| Hormonas

Narrador

— Señores Kim ¿Qué hacen aquí? —pregunto viéndolos sentados en su salón frente a la chimenea con una taza de chocolate.

— Hola. —saludaron ambos, poniéndose de pie con una gran sonrisa.

— Hemos venido a visitarte. —hablo la mamá de Taehyung, mientras se acercó a darle un beso en la mejilla.

— Esperamos no molestar. —dijo el señor, Kim.

— No, no me molestan. —le aseguro. —Es una sorpresa, estábamos incomunicados por una tormenta ¿Reservaron? —pregunto. Se había olvidado por completo que estaba embarazada, aunque no duró mucho, cuando una patada en su costilla izquierda le recordó que había alguien más con ellos. — Ustedes vinieron porque Taehyung les dijo que estoy embarazada. —declaro cuando sintió el segundo golpe.

— Si, queríamos asegurarnos de que están bien. —menciono la señora, Kim.

— Gracias. —ella se sintió un poco avergonzada, jamás se imaginó que tendrían que enfrentar a los padres de Taehyung.

— Estamos muy felices de que nos hagas abuelos. Taehyung no pudo venir porque tenía que cerrar unos negocios, pero vendrá en cuanto esté todo listo. 

— ¿Puedo tocarte? —pidió la madre de, Taehyung.

— Si.

— ¡Oh, dios! ¡Se está moviendo! Kim, Toca aquí. —dijo tomándole la mano del señor y llevándola a donde se sentía el movimiento.

— Lo siento, está muy emocionada. —dijo el señor Kim por su esposa que estaba más que feliz.

— No hay problema, ¿Ya les dieron una habitación o regresan a la ciudad?

— Nos quedamos aquí, si tienes alguna habitación disponible. —contesto la señora Kim.

— Si claro.

Mía les dio una habitación para que descansaran. Luego bajo a la cocina, donde la esperaban la señora Bada y el señor Choi y les contó quiénes eran. Por la noche cuando llego su hermana Haneul, les presento a los padres de Taehyung y al final de noche compartieron una cena. La señora Kim le contó a Haneul, en cómo habían sido los días que había pasado Mía de vistas en Londres.

— ¿Ellos aún piensan que tú y el idiota están juntos? —pregunto Haneul, en la habitación de Mía, pues antes de ir a dormir le encantaba tocar su pancita.

— Creo que solo están siendo prudentes y educados, algo que usted señorita debería de ser. 

— Se merece que lo llame peor. 

— Yo conozco a Taehyung y créeme, que si no estuviera comprometido con nuestro bebé, no les hubiera informado a sus padres. 

— ¿Estas ilusionada? ¿Crees que así volverá por ti y serán felices para siempre?

— No, no soy tan ingenua como piensas. Sé que lo nuestro como pareja no será, él no se enamoró de mí, lo tengo claro. No estoy creyendo que volverá por mí, porque no hay medias luces con Taehyung, o es negro o blanco. Lo vi día a día trabajar, los días de descanso que eran los domingos se despertaba tarde y hac... —se detuvo, porque iba a decir que hacían el amor y trato de improvisar. — Hacia un poco de su trabajo, antes de ir a comer algún restaurante, para luego regresar al hotel o a su departamento en Londres a preparar su trabajo del día siguiente.

— Definitiva estas enamoradas de él. —dijo sonriendo su hermana. — Si es verdad lo que dices, creo que el idiota está enamorado de ti y no se ha dado cuenta.