DADDY » duamila

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Camila POV

La Luna llena brillaba por todo el bosque y me ayudaba a caminar mejor sin necesidad de llevar una lámpara en la mano para buscar a Dacre.

Los lobos estaban aullando al otro lado de la colina, y mi arma se mantenía sujeta a mi cinturón.

Escuché los crujidos de las hojas detrás de mis pasos y de pronto, alguien cubrió mi boca por la espalda y me arrastró hacia uno de los árboles cercanos.

Al mirarlo, me encontré con sus ojos azules. Era Dacre. Estaba golpeado y con manchas de su propia sangre por toda su camisa.

-¿Qué diablos...?

-Shhh...no es seguro que esté aquí, señora Cabello.

-¿Por qué?

-Porque hay unos hombres que me tenían secuestrado y ahora están detrás de mí.

Él aún no sabe que yo estoy detrás de todo.

-No te preocupes...vamos.

Le indiqué con señas que regresáramos hacia la casa pero él negó en silencio.

–Si regreso ahí, me encontrarán.

-¿Y a dónde piensas ir?

En mente ya estaba buscando algún plan para seguir cubriéndome.

-No sé...

-Puedo ayudarte.

-¿Cómo?

-Te esconderé en un lugar mientras todo eso pasa.

Dacre lo pensó un poco mientras seguía atento de lo que sucedía a nuestro alrededor. De pronto, escuchamos un disparo y la risa de los hombres que se encontraban en el bosque, a poca distancia de nosotros.

-Tú ve a casa, yo los distraigo-le indiqué a Dacre.

Él no accedió.

-No, me quedo, usted no puede quedarse sola aquí, en peligro.

-Sé cómo manejar esto.

-No lo creo.

-No me conoces.

El chico lo pensó de nuevo, y sujetó mi mano para llevarme con él hacia otro lugar para escondernos.

-Venga conmigo, se acercan.

-No tengo miedo.

-No sabe lo que dice.

Y a lo lejos, vi a Fred y Chris cargando un ciervo de gran tamaño.

-Son unos malditos-Dacre dijo en voz baja pero molesta.

Lo miré y lentamente me fui alejando de él. Tenía que hacer algo para escapar sin involucrarme, pero alguien me detuvo.

-Amor, ¿que pasa?

Dua estaba detrás de mí. Definitivamente hoy me estaban sorprendiendo de más por no cuidarme bien la espalda.

-Cariño, necesito que regreses a casa-sostuve sus manos y la miré directamente a los ojos cafés que me observaban con miedo-por favor.

-No puedo, hay unos hombres cazando...escuché los disparos.

-Lo sé...sólo...

Y ella lo vió.

-Es Dacre-me dijo mientras el chico nos miraba y buscaba cómo ir hacia nosotras sin hacerse notar por los otros hombres.

-Vamos-la intenté dirigir hacia el camino contrario.

-Debemos ayudarlo.

-Vamos-le ordené.