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Lance estaba molesto, la chica no cooperaba y el está a a punto de matarla... Ah, no, Aleen pasaba a cada rato para verificar el avance del interrogatorio/tortura. Aleen particularmente le molestaba, no podía adivinar lo que estaba pensando. Pero debía centrarse en lo que estaba haciendo, aún con la presencia de la sucubo cerca.

-Uno de mis espías te escucho hablar con Ykhar sobre algo interesante, en la biblioteca hace unos días... ¿Aún así dices que no tienes nada que esconder?- interrogó Ashkore, irritado. Llevaban en eso horas y ya no era divertido.

-No, nada de nada- Hela sonrió, tosió un poco de sangre y entonces se desmayó. Mientras  empezaba a sumergirse en la oscuridad de su inconsciencia, pudo ver a Hestia acercándose y detrás de ella venía Valarian; ambos parecían buscar algo. Vio también como un manto de bruma oscura se extendía sobre el gran cristal. Otra visión.

-Se desmayó otra vez, que débil y patética- ¡Traigan al enfermero y despiertenla rápido!- gritó Ahkore, que además, no contuvo el desprecio en su voz.

-Lance... ¿Podrías ser más cuidadoso?... O... De lo contrario nunca sabremos toda la información de lo que consiguió sobre el lazo con el gran cristal que tienen ella y Gardienne, tampoco sabremos con quienes habló sobre ello- dijo Aleen un tanto molesta desde la puerta recién abierta. Lance la miró con la misma frialdad con la que ella lo estaba mirando- ya viene el enfermero- le dijo ella sin apartar la mirada. Odiaba estar bajo su mando, pero si Leiftan confiaba en él... No había de otra.

-No me digas, ¿Te encariñaste con ella?- se burló Lance, al que llamaban Ashkore o enmascarado, mientras el enfermero entraba en la prisión- has estado dando vueltas todo el rato, ni siquiera has regresado al CG... Eso se vería un tanto sospechoso ¿No?-

-Eso no es un problema- Aleen se acomodó la bufanda para ocultar su incomodidad al ver el estado en que se hallaba Hela, a pesar de estar fieramente comprometida a la causa de Leiftan ya no se sentía segura de lo que estaba haciendo- al parecer están  ocupados allá, bastante distraídos para pensar en mi- dijo mientras fijaba su mirada en Hela.

La información que habían obtenido era cierta, en el CG había un problema: Gardienne había sido poseída por un peligroso espíritu errante llamado Yêu, y se encontraba en peligro. Esto tenía ocupados a los a los lideres del cuartel, incluyendo a Leiftan, por supuesto.
Con esfuerzo y un poco de suerte, lograron encontrar la manera de invocar a Tinh, la pareja del espíritu errante, que sería la clave para que el espíritu de Yêu pudiera descansar en paz, dado a que pertenecía a la especie de las quimeras y éstas no encontraban la paz a menos que fuera con su alma destinada.

Tinh lucía como un enorme y musculoso surfista, con ojos negros y tatuajes típicos de su raza. Se mostró devastado en cuanto le informaron a cerca de su novia Yêu y prometió ayudar. El asunto es que necesitaba poseer a alguien por su poca energía espiritual residual.

-Me ofrezco voluntario- dijo rápidamente Nevra.

-Nevra, ya me ocupo yo- Leiftan se ofreció, ante esto, Ezarel levantó una ceja.

-Leiftan, yo debo ayudarle. Le debo muchas cosas y por culpa de que discutimos es que ella salió corriendo- Nevra le refutó a Leiftan.

-Yo estoy de acuerdo en que lo haga Nevra, quizás esto sea una buena forma de intentar redimirse con Gardienne- dijo Ykhar intentando que su tono sonara de lo más despreocupado.

Historias de Hadas: Amour Gardienne [Eldarya]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora