"Me asusta un poco, ¿sabe?, sentirme sentimental."
-Mario Benedetti.
[Parte 2]
Escucho con atención el motor del auto, es impresionante siempre recordar sonidos con instantes.
-¿Te encuentras bien?- le digo a Emilio, no ha hablado ni un poco desde que salió de la ducha.
-Romina, es una chica terca- y vaya que lo es...- es odiosa, y un montón de cosas. Pero, es mi hermana y yo, la amo.Asiento, no soy capaz de decir mucho, la cabeza me palpita, estoy seguro que va a explotar, pero bendito alcohol caro.
-¿Tú estás bien?
-Si tu lo estás, yo lo estoy.Baja del auto con una sonrisa a media luna, y camina por el pequeño camino de cemento que adorna el jardín, salgo del auto y observo mi alrededor, todo parece no saber quien soy, supongo que así esta bien.
-¿Joaquín?
-¡ya voy!- cierro la puerta, y trazo los pasos que ha marcado Emilio a la puerta, su madre está tirada en el sofá, con una humeante taza en las manos y los ojos hinchados de llorar.-¡mamá!- su madre lo mira con un inmenso calor maternal, con el alma rota, y soy conciente de lo humano que soy, mi corazón da un pinchazo, aunque los demonios no deberían sentirlo.
-Mi amor, deberías estar en la escuela.
-No te voy a dejar sola, ¿lograste hablar con ella?
-No, todavía no. - entonces sus ojos conectan a mi presencia.- Hola mi amor, perdón por todo esto.
-Esta bien, no pasa nada, ¿tiene algún número de teléfono en el que podamos localizar, un amigo, una amiga?
-ya lo intenté, pero nadie sabe nada de ella.
-entiendoLo pienso un poco, quizá podrían ofrecerme un vaso de agua, tengo mucha sed, y una resaca como para no salir de casa, pero ahora debo estar aquí parado, esperando que acaben de pensar donde puede estar.
-No deberías faltar tanto a clases.
-ma, no voy a dejarte aquí angustiada hasta que tengamos idea de donde está.
-tu madre tiene razón Emi, podrías ir a las últimas clases y luego venimos para acá.
-Lo siento, enserio no puedo.Sus manos toman la taza de su mamá y bebe el contenido, ¡maldición! Creo que puedo arreglarmelas yo solito.
-perdón, yo... ¿Creen que podría tener un vaso de agua?
-¡oh! Perdón, sí, es tu casa.
-gracias, voy a tomar una pastilla- Emilio me mira con ese típico reto de autosuficiencia y sonrió a ello.Entro a la cocina y miro a detalle, hay fotos de esta familia por donde mires, que terrorífico.
-Mamá dice que estás muy pequeño para ser un alcohólico.
-¡Me asustaste!- digo tocando mi pecho.
-Perdón
-Está bien, ¿Enserio dijo eso?Se ríe.- no, eso lo inventé yo, sólo me dijo que fuera amable y te sirviera un vaso de agua.
-Gracias, oye ¿Enserio huelo a alcohol?
-Hueles a perfume, lo digo en serio, te pusiste loción de manera exagerada.
-oh- consideró la idea de no volver a tomar, pero desisto en cuestión de nada.Me tomo el agua y la pastilla, sonrió, salgo con mi pastillero directo con la mamá de Emilio.
-Tome una, le irá bien.
-Gracias, mi cielo.
-¿ya hablaron a la policía?
-lo hice, pero dicen que deben pasar 48 horas.
-Que tontería- digo para mi mismo.
-lo sé, es desesperante.
-debería dormir un poco, me encantaría quedarme, pero, mi hermana está un poco molesta conmigo y quiere que vaya al Instituto a tomar mis últimas clases.
-¡oh!- dice Niurka- bueno, tienes que hacerlo.
-Gracias- me dirijo a Emilio- ¿crees que puedas avisarme si tienen noticias?
-Lo haré.
-Gracias, yo vendré con algo para comer cuando terminen las clases ¿está bien?
-Muchas gracias, de verdad- Niurka no se ha movido ni un poco de ese asiento, sólo asiento y me despido con la mano, camino a la puerta con Emilio siguiendo mis pasos.
-regresaré pronto ¿bien?
-Bien- confirma. Luego se lanza a mi en un abrazo que me hace moverme de mi lugar, me besa con mucho miedo.
-Todo irá bien, sólo confía.
-Eso espero.
-Nos vemos en unas horas.
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26 días...
Teen Fiction¿estás preparado para enamorarte? o necesitas sólo seguir órdenes y no precisamente las de tu corazón. 26 días donde una historia cambiará el ritmo natural que debía llevar... Narrada por Joaquín. -S...