-Ponte el cinturón- le ordene. Si quería hacer esto. Lo haría bien.
-¿o qué?- me desafío. Bueeeeno, si no cedía por las buenas, tocaba por las malas ¿cierto?
-O tendrás la peor experiencia de tu vida-
-Ya he tenido demasiadas. Además, nunca me gusto el cinturón de seguridad.
-Ah ¿chico malo?-le dije con ironía.
-¿Te gustan los chicos malos?- pregunto mientras me mostraba sus blancos dientes y me guiñaba un ojo.
¿Me giño un ojo? Claro que si estúpida. Me gruño mi subconsciente.
-De hecho, si, me encantan los chicos malos. Pero tu no. Tu eres un chico bueno fingiendo ser malo solo para atraerme- le dije sonriéndole coquetamente, obvio que nada de eso es real. Ryan sería la última persona con la que estaría.
-Sí, claro. ¿Piensas arrancar o qué?- dijo Ryan.
-¿Última palabra para no ponerte el cinturón?- le dije entrecerrando los ojos, y tratando de ocultar mi sonrisa.
-Sí. Lo que sea. Arranca- dijo poniendo los ojos en blanco y sin aún ponerse el cinturón.
-Como quieras...- y así puse en marca a mi jeep. Conduje lo más rápido que pude.Cada vuelta la daba como en Rápidos y furiosos. Dejando una leve mancha de mis llantas. Mire de reojo a Ryan y vi que tenía una cara de espanto. Se aferraba con manos y todo al asiento.
Fui a dar otra vuelta al estilo Abel y pude escuchar a un Ryan totalmente arrepentido decir:
-¡OKEY, PARA! ¡YA ENTENDI, ME PONDRE EL CINTURON!
Riéndome pise el freno, haciéndolo volar hacia adelante. Casi me da un ataque de risa. Sabía que me iba a divertir esta mañana.
-¡Chica! Manejas como una loca- exclamo Ryan.
-Te advertí de ponerte el cinturón- le dije mientras trataba de detener mi risa.
-¡JODER! Casi me matas. Nunca me volveré a montar en un carro si tú manejas. Ya aprendí, siempre llevar el cinturón a tu lado.
-Eres una niñita. Me alegro de que tengas eso claro. El cinturón de seguridad es muy importante.-le dije frunciendo levemente el ceño. La verdad siempre me preocupo por todas esas cosas de seguridad.
-¿Te preocupas por mí?- pregunto poniendo una fingida cara de asombro.
Ah. Hombres. Mi humor desapareció por completo.
-Por más difícil que sea de creer, sí, me preocupo por ti cereza- dije lo primero que se me vino a la mente. Además tenía hambre.
-¿cereza?-
Me reí. Cereza seria su apodo. Cuando Ryan se enoja se pone rojo como las cerezas. ¿Qué cursilerías son estas? Nah. Le llamare cerecita solo para molestarlo.
-Sip. Eres tan dulce como las cerezas.
-Awww. Me alaga que pienses eso de mí. Pero soy todo lo contrario a dulce. Soy tan frio como el hielo.- dijo Ryan con los ojos bien abiertos.
-Como digas. Cerecita- le dije resaltando un poco su apodo.
Ryan soltó un gruñido.
-No me llames así. Pondrás en peligro mi reputación. O es más, me harías quedar como todo un gay-respondió fingiendo preocupación.
-Sí, bueno, creo que eso ya no será un problema.- le respondí pensando en lo que Anna me había contado, que Ryan solo andaba con sus hermanos...
-¿A qué te refieres? Tú podrías ser Abby... como mero nombre de porrista.- Respondió Ryan, pero yo simplemente lo ignore.
Me quede con la mirada fija por encima del hombro de Ryan. Aun no habíamos arrancado. Me quede con mi mirada fija en un hombre que estaba sentado en una banca en el parque detrás de nosotros. Me quede bloqueada. No era la primera vez que me pasaba eso, que me queda viendo a las personas como una lunática. Algo estaba mal en ese hombre... solo que no sé qué es...
-¿Abb? ¿Te encuentras bien?- pregunto Ryan con un tono de preocupación.
Las palabras no salían de mi boca... mi mente estaba completamente concentrada en ese tipo. Yo... yo no podía reaccionar. No tenía el control de mi mente. Ese tipo me estaba consumiendo. Mi mirada seguía en él, hasta que tuve una visión... sí. Tuve una visión, vi que el tipo al que no paraba de mirar se giraba y su mirada se encontraba con la mía... me conecte con él.
O por dios!!! Que pasaraaaaa 😱
Aún hay muchas sorpresas esperando!!!
Besos
Isabella03271
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We are...
Science FictionMi vida era genial. Mis padres se amaban, mi hermano me cuidaba y me amaba, éramos todos unidos. Pero cuando mi padre murió las cosas cambiaron, el hermano que pensé que me amaba mostró su verdadera cara y me abandonó, dejándome con el corazón roto...