Desesperado.

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💙CRAIG💙

Ya había pasado una semana después haber ido a la casa de Clyde y de descubrir que me gustaba Tweek. Al día siguiente, entre el desayuno me habían preguntado a que conclusión había llegado con ojos muy pícaros, al escuchar aquella pregunta me sonrojé un poco y les confesé que tenían razón, que me gustaba aquel rubio. Como era de esperarse, se rieron y empezaron a dar gracias a Dios, porque al fin me había dado cuenta. Les dije que por favor no le dijeran a Tweek, que yo hablaría con él. Ya para ese punto les había platicado todo lo sucedido y aunque no sabía si contar que aquel ojiazul era gay, se los termine diciendo, me sorprendió mucho al saber que ellos ya lo sabían, que éramos muy obvios y más Tweek; ellos pensaron que yo me habría dado cuenta y que por eso según ellos "andábamos". Me dijeron que era un estúpido, y que la había cagado; al escucharlo solo podía aceptarlo, en sí porque era verdad. Al final solo me desearon suerte y que pronto lo arreglara para que volviéramos a pasar las tardes juntos, nosotros cuatro como lo hacíamos antes.

Hoy era el día en que regresaríamos a la escuela, me sentía ansioso y con una gran corazonada de que todo saldría bien, no mentiré estuve ensayando en cómo podría hablar con Tweek y que poco a poco le haría saber mis sentimientos hacía él, no sin antes disculparme por haber sido un idiota. Al sólo entrar y ver en que salón nos había tocado me dispuse a ver en donde mi rubio se sentaría, había llegado tarde y pensé que él ya estaría ahí, pero no lo encontré. Supuse habría faltado, pero no lo nombraron en la lista, así que pensé lo peor, pensé que se habría mudado, pero no podría sacar conclusiones muy rápido ¿cierto? Al ir al receso me senté con Clyde y Token, mientras hablamos sobre aquello.

—¿Ustedes saben el por qué Tweek no está ni siquiera en la lista? —pregunte con un tono preocupado.

—No, nosotros pensábamos preguntarte. Pero si lo piensas no se pudo haber ido, él nos avisaría.

—No lo sé Token, recuerda que no hablamos mucho con...

Clyde no pudo terminar de decir toda su oración por que pasaban tres rubios a la cafetería, uno de ellos era Tweek, y los otros eran Kenny y Butters. Pensé sobre que estaba pasando, rápido me di cuenta de que Tweek no estaría con nosotros en el aula, que le había tocado una diferente. Me dispuse a solo verlo y me sentía nervioso, demasiado para ser yo.

—Craig, Craig. ¿Iras a hablarle? —preguntaba Clyde sacándome de mis pensamientos.

—No, no lo sé viejo, hoy no podría —dije demasiado nervioso, había pensado que él se habría ido, me sentí calmado al verlo, pero no podía ir y hablarle solamente.

-Date tu tiempo Craig, igual Tweek estaría sorprendido porque no seguimos juntos después de todo —dijo el más sereno de nosotros tres en ese momento.

Mientras comíamos me le quedaba viendo al áureo, mi mente se llenó de pensamientos sobre que él en realidad era muy mono, demasiado. Pensaba en su piel pálida y sus ojeras que hacían que sus ojos fueran hermosos, a pesar de que los ojos de Tweek fueran azules tenían en la parte superior un tono verde, un degradado maravilloso, reaccione cuando sentí la mirada de Tweek y voltee rápido, avergonzado por que parecía una niña tonta enamorada; y si estaba tontamente enamorado de él pero no era una chica.

Pasaron los días, semana y meses, mientras los chicos me preguntaban cuando hablaría con él, mi respuesta siempre era la misma. "La próxima, esta vez no puedo", "No creo que quiera hablar ahora". Siempre eran las mismas, solo me la pasaba observándolo, me sentía algo celoso ya que Kenny se la pasaba ahí con ellos y se acercaba mucho a Tweek, pero no podía hacer nada. Para acabar, se terminó el año escolar, yo no había hablado con él, ni siquiera me lo había topado, me sentía desesperado, quería hablarle, pero mi cobardía no me lo permitía. Quería estar cerca de él, poder decirle que me gustaba, que estuviéramos juntos, que supieran que yo era novio de esa maravilla, pero no era así. Estar enamorado es raro, y se torna más oscuro cuando tú mismo le dijiste que no te hablara y después notaste que te gustaba, era jodido. En todo lo sentidos mi suerte no era muy favorable. Ese año transcurrió así, en las vacaciones de verano veía a los chicos y les decía lo mismo, pero aquí era diferente me daría vergüenza solo entrar a la cafetería de los padres y decir que vengo a buscar a su hijo, después de haber pasado casi dos años sin hablarle o visitarles. Solo podía esperar que llegara el nuevo ciclo escolar, que ironía ¿no? Solo querer entrar por qué quieres ver a la persona que te gusta ahí, sentada sin hacer nada y aun así pensado que es la persona más maravillosa que ha creado el universo.

Algunas veces me sentía asustado, asustado al pensar que Tweek se enamoraría de alguien más, desesperado al ver cómo otros chicos y chicas se le acercan de una manera no tan amigable, porque joder, ese rubio no está para nada mal, a cualquiera le podría gustar.

—Pero yo no soy el indicado para sentirme así, el rubio tendría sus razones para que le empiece a gustar alguien más, pero no quería, espero él pueda seguir amándome solo a mí, es pensamiento muy egoísta de mi parte —le platicaba a Stripe, y al mismo tiempo me lo decía a mí, sentía pesado mi corazón al pensar que él estaría con alguien más.

Este ciclo iba a ser diferente, yo iba hablar si o si con Tweek, para aclarar todo. Me propuse a no ser un cobarde más y afrontar la situación, solo era de esperar que esa valentía siguiera todo este año. Al final de cuenta tendría que esperar a que entremos a secundaria.


Comentario de corrección: Alc quien sabe que me fume para crear a los personajes de cabello negro bien mensos xdxd

No sé por dónde empezar...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora