Existe un bar en donde los requisitos de admisión son bastante estrictos y la identidad y privacidad de los clientes es lo primordial. Por ello es necesario el llevar antifaces durante toda su estadía, cambiar un poco algunos rasgos del rostro y cre...
¿Cómo les ha ido con toda esta situación? ¿Están bien todos?
Les mando mis mejores vibras positivas. Ánimo a todos.
Yo estoy muy feliz ya que en este mes está historia cumple su primer año y "La Voz de un Ángel" cumple su segundo aniversario. Y como motivo de celebración (una muy flojilla pero aún así celebración) les he traído nuevamente doble actualización, este capítulo y el 41 de "La Voz de un Ángel". Ambas con un factor en común, en las notas finales me gustaría que me comentaran cuál es dicho factor.
Así que bien. Disfruten.
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- M-más. Por... por favor. Más.
Chillaba de placer el azabache mientras Sou lo tomaba. Al escuchar su petición, el pelirrojo lo complació y aumentó la velocidad de sus embestidas.
Deku no daba tregua a sus gemidos, estos salían uno tras otro sin parar. Y tal parecía que aquellos sonidos causaban que el pelirrojo tampoco quisiera parar.
Los gruñidos se sumaban a los sonidos de la habitación al igual que el choque de sus pieles sudorosas. Sonidos que reflejaban lo mucho que estaban disfrutando del sexo.
En algún momento, el punto dulce del doncel fue golpeado con fuerza y éste se corrió con un gemido ahogado y después de unas cuantas estocadas más, el varón también liberó su esperma.
Sus cuerpos se sentían débiles, era su segunda ronda de esa noche, estaban claramente agotados, pero sumamente satisfechos. El placer aún corría por sus músculos mientras regalaban sus respiraciones.
Ninguno de los dos se movió después de que les llegará el orgasmo. Deku estaba acostado con las piernas sobre los hombros de Sou, mientras que éste último aún sostenía de forma floja la cintura del azabache. Su miembro ablandado aún estaba en el interior del más bajo.
El pelirrojo tardó unos pocos minutos en recuperarse. Cuándo lo logró, bajó lentamente las piernas ajenas, se inclinó y le dió un beso corto pero profundo a Deku. Finalmente salió de su interior y rodó a su lado para retirarse el preservativo.
Ambos permanecieron acostados y en silencio durante un momento considerable y lejos de lo que pudieron pensar, era un ambiente muy agradable.
- Eso estuvo muy bien. - Comentó el doncel con voz agradable.
- Así es. Podemos repetirlo en unos momentos. - Respondió Sou con los ojos cerrados.
El silencio cómodo continuó por unos minutos.
Esta era la cuarta vez que se encontraban para tener relaciones sexuales.
- Sabes. Nunca me había acostado varias veces con un varón antes. - Dijo en voz tranquila Deku aún con la mirada en el techo. - Pero definitivamente me ha agradado hacerlo contigo.
