Existe un bar en donde los requisitos de admisión son bastante estrictos y la identidad y privacidad de los clientes es lo primordial. Por ello es necesario el llevar antifaces durante toda su estadía, cambiar un poco algunos rasgos del rostro y cre...
¿Cómo se me encuentran? Las cosas están cada vez más difíciles. Espero de corazón que todos estén bien al igual que sus familias. Les mando fuerzas.
Para alegrar su día aquí les traigo actualización. Espero entre mañana o pasado actualizar "La Voz de un Ángel"
Disfruten.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Shouto sabía que el camino al cementerio estaba siendo lento y tortuoso para el celeste.
Después de la consulta médica de la abuela Nana, Tomura y su hija quisieron ir a visitar la tumba de Touya. El bicolor no dudó en ofrecerse a llevarlos y acompañarlos.
Al llegar al lugar, la pequeña celeste quiso que compraran unas flores para su padre, eligió un ramo de alcatraces.
Shouto miraba de vez en cuando al doncel mientras ayudaba a la azabache a andar, y cada vez éste se veía más apagado pero no soltaba la mano de su niña.
Cuando finalmente estuvieron frente a la lápida, tanto él como la abuela Nana decidieron sentarse en alguna banca cercana para que Tomura y la niña tuvieran privacidad.
- Espero que no estés molesto con mi nieto por no contarles sobre Nana. - Dijo de repente la mujer sin dejar de mirar al mencionado.
- Descuide. No negaré que me sorprendió, pero me alegra conocerla. - Respondió. - Estoy seguro de que nadie de mi familia estará molesto con él por lo que pasó, cuando lo sepan entenderán al igual que yo que sus acciones fueron comprensibles. Tomura, la niña y usted pueden contar con nuestra ayuda para lo que necesiten, ustedes son parte de la familia.
Ambos vieron al doncel y a la niña inclinarse para limpiar el poco polvo que cubría la lápida y colocar las flores.
- Se los agradezco de corazón. Me hubiera gustado conocerlo personalmente. Solo le conocí por una foto que Tomura siempre carga y por lo poco que me ha contado. - Dijo nuevamente la mayor.
Durante varios minutos la pequeña celeste conversaba frente a la tumba de su padre varón mientras que a su lado el doncel estaba hincado y con un brazos sobre los hombros de la menor. Al final, Tomura palmeó la espalda de la niña indicándole que era hora de irse, Nana abrazó la lápida y después tomó la mano de su padre para acercarse a Shouto y su abuela.
Los cuatro regresaron a paso lento hasta el auto de Todoroki y abandonaron el cementerio.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
