Aprenderé A Vivir (Alonso Villalpando & Tu)

Capítulo 2.- "El fín del principio"

-¡Despierta! Son las ocho con cinco –me lanzó una almohada.

-Te dije que no iría –dije frotándome los ojos.
-Y yo te dije que no iba a aceptar un ‘no’ por respuesta –rió- así que vístete fea durmiente –temó mis dos cachetes y los apretó haciendo que le saque la lengua y mi amiga carcajee.
Me di un rápido baño y me vestí con unos jeans negros y una blusa blanca, nada complicado.
Jade y yo nos dirigimos a un pequeño Starbucks Coffee que estaba en la cuadra. Estuvimos ahí unas horas charlando sobre nuestros planes del futuro, Jade me había hecho prometer que haría lo posible para que me transfieran a Inglaterra, sabía que no aguantaría estar mucho tiempo sin Jade, ella era mi única familia.
Tomé un taxi directo a casa de los Villalpando Camarena y Jade se encaminó al departamento. El taxista se estacionó frente a una mansión con rejas altas, negras. La casa tenía una fachada demasiado elegante, pintada de un color entra crema y blanco hueso, era impresionante la magnitud del terreno y el tamaño de la casa. Fui con uno de los guardias de seguridad que se encontraban en la entrada.
-Disculpe, soy _____(Tn) Fray, tengo una cita con la Sra. Villalpando.
-Un momento –el hombre sacó un pequeño radio y murmuró cosas que no logré escuchar. Despues de unos segundos me dejó pasar y me dijo que cuando llegara a la puerta tocará el timbre, y así lo hice.
‘Ding, dong’, en menos de 5 segundos abrieron la puerta.
-¿_____(Tn) Fray? –la chica que me atendió era baja de estatura, tenía el cabello color azabache y unos profundos Azules grisaceos, tan claros como el agua cristalina. Llevaba el uniforme típico de sirvienta; negro con detalles blancos, y el cabello recogido en una coleta alta. Le sonreí.
- Sí, ayer hable con..
-Lo sé, siéntese –me dirigió hacie el living y me senté e uno de los sofás- ¿Quiére algo de tomar? Hay jugo, café, agua...
-Un vaso con agua estaría bien, gracias.
A los minutos ya tenía el vaso con agua en mis manos, tomé el primer sorbo de agua mientras checaba mensajes por mi celular.
-¿_____(Tn) Fray? –escuché una voz tan suave como el terciopelo, sexy y misteriosa, pero andaba tan distraída que al escucharla di un pequeño respingo, dejando caer mi móvil al suelo y atragantándome con el agua.
Tosí de manera exagerada.
-Lo siento, no quise asustarte –rió bajito- ¿te encuentras bien?
El dueño de aquella hermosa voz, se puso de pie frente a mi y si creía que su voz era hermosa, su físico lo era aún más; delgado pero un poco fornido, de una estatura mas alta que la mia, yo diria que de unos 1.76mts, piel blanca y aparentemente suave como la porcelana, tenía unos ojos color Azul con toques verde completamente hipnotizantes, su cabello ligeramente alborotado, castaño claro que se confundia con rojiso pero claramente era castaño... ¿era un ángel? Tal vez me ahogué con el agua y ahora me encuentro en el cielo. Sacudí ligeramente mi cabeza dejando a un lado todos esos pensamientos.
-_____(Tn), ¿eres tú? -¿Cómo aquella perfección sabe mi nombre? No tengo ni la menor idea.
-Sí –dije con la garganta adolorida-, ¿Cómo sabe mi nombre?
-Soy hijo de la Sra. Villalpando –que estúpida me sentí- Me llamo Alonso Villalpando.
-Alonso, ya sabe mi nombre –sonreí.
El chico me tendió la mano para saludar y yo la tomé, nuestras manos encajaron a la perfección como dos rompecabezas, hechas para estar unidas; o tal vez fue mi imaginación, estoy exagerando y estoy quedando loca.
-Mi madre no está, salió hace unos minutos por una emergencia de la empresa. Por cierto, no me llames de usted, ‘tutéame’, y dime Alonso –su aliento fresco rozó mi rostro.
-Está bien.
-Ven, te enseñaré la casa.
Primero fuimos a esto: http://weheartit.com/entry/35715072
-Esta es la cocina, tu no te tienes que preocupar por cocinar, Niní es la cocinera y sabe los platillos favoritos de Darcy –supuse yo, que Darcy era la niña a la que cuidaría y también que era su hija.
-¿Darcy es su hija? –pensé, esperen…¿Lo dije? ¡Maldición ____(Tn)! Eso no te incumbe- Lo siento, eso es algo que no me incumbe –dije apenada.
Alonso rió.
-No te preocupes, Darcy es hija de mi hermana Paris. Ella no está, salió de compras con Darcy, y te repito: No me llames de usted –rió de nuevo- me haces sentir viejo.
-Lo siento, lo olvidé.
-Bueno, sigamos.
Retrocedimos y me mostró la sala de estar junto con el comedor: http://weheartit.com/entry/51813296
-Bueno, aquí ya estuviste. Es la sala y el comedor –anunció.
Subimos por las escaleras y llegamos a un pasillo con varias puertas.
Abrió la primera puerta y me encontré con esto:http://weheartit.com/entry/53939151
-Esta es la habitación de Darcy.
Salimos.
-La de ahí es de Paris –apuntó hacia la puerta, pero no entramos-. Esa es de mis padres –apuntó a otra- y esa, -señaló otra- es mía. Tu habitación es esta –entramos y vimos esto:http://weheartit.com/entry/52952875
Esperen… ¿dijo MI habitación?
-¿Tengo habitación? –pregunté aturdida.
-¿Dónde dormirás entonces?
-No me dijeron que viviré aquí.
- El trabajo es de tiempo completo –musitó lentamente.
-Iré a la Universidad en las mañanas, no puedo trabajar a tiempo completo –repliqué.
-Pues creo que no podrás trabajar aquí –se encogió de hombros- lo siento.
-Dime que es mentira –hundí mi rostro en mis manos.
-Oye, enserio lo siento, el trabajo es de tiempo completo –apoyó en mi hombro la palma de su mano.
-No te preocupes, no es tu culpa.
Dios mío, ahora no tenía ni un solo empleo. Las ganas de llorar me invadieron, se que es un poco exagerado pero así soy yo, en esos momentos sentía que mi mundo se quemaba, encontrar empleo en Los Ángeles no era nada fácil, sobre todo si no sé hacer absolutamente nada más que cuidar niños y preparar cereal con leche.
Después de unos segundos destapé mi rostro, no me mostraría vulnerable con alguien que acabo de conocer.
-¿Estás bien? –preguntó.
-Sí, me… me voy de aquí –dije-.Gracias de todos modos.
Me dispuse a bajar las escaleras cuando la voz de Alonso sonó a mis espaldas.
-Espera –musitó y me detuve- ¿No quieres esperar a que llegue mi mamá? A lo mejor podría hacer una excepción.
-¿Crees que sea posible?
-Supongo que sí. Mi mamá llega en unos minutos, mientras te podría hacer una entrevista.
-¿De verdad? Gracias, enserio muchas gracias –sonreí.
Bajamos las escaleras y fuimos hacia su oficina.
-Siéntate –ofreció y me senté en una de las sillas en frente de su escritorio.
Tomó una carpeta, sacó un bolígrafo y comenzó a anotar algunas cosas que no alcancé a ver.
-_____(Tn) Fray…-dijo para sí mismo- ¿Cuál es tu edad?
-Dieciocho años.
-¿De verdad? Te vez más pequeña –comentó y reí, todos me dicen lo mismo. Y para mí es un halago verme más joven –Soy un año mayor que tú –dijo mientras anotaba.
Me limité a sonreir.
-¿Cuánto tiempo le dedicarías a Darcy? –preguntó.
-Saldré de la Universidad a las tres, a partir de esa hora puedo dedicarle todo mi tiempo.
-¿Tienes experiencia con niños?
-Cuidé a Josh de seis años –dije.
-¿Tienes familia en la ciudad?
-No.
-¿Viven lejos?
-No lo sé, hace dos años que no veo a mi familia –limité.
-Ajá…Supongamos que te contratamos, tendrías que vivir aquí… ¿tienes algún inconveniente?
-No –dije segura, ahora ya no tendría que pagar renta, un peso menos- Pero tengo que ir a la Universidad por las mañanas.
-Bien, permíteme un momento –Alonso tomó su celular, marcó y pegó el móvil a su oído.
-¿Paris? Soy Alonso, vino una muchacha por el puesto de niñera y pensé que podrías traer a Darcy a ver como se lleva con ella –carraspeó-. De acuerdo, yo te espero.
Me mordí los labios nerviosa.
-Ya están viniendo para acá, Darcy es…
Pero Alonso no pudo terminar su frase, pues aquella chica que me había atendido al principio entró por la puerta y comenzó a hablar.
-Alonso la Sra. Columba llegó, te busca a ti y a _____(Tn) –dijo y me pregunté si Alonso tenía tanta confianza con todas las sirvientas, pues “Alonso la Sra. Columba llegó…” no era una frase que todas las sirvientas les decían a su jefe, en especial al entrar a su oficina sin tocar.
-Dile que en un momento estamos ahí Lorena –le dijo Alonso a la chica-. Vamos ____(Tn) –me sonrió.
Nos pusimos de pie.
-Suerte, a veces la Sra. Villalpando puede ser un poco dura al principio –me dijo la chica en un susurro de modo que Alonso no lo escuchara.
Le sonreí.
-Gracias –murmuré.
Alonso y yo nos dirigimos al living, yo estaba hecha un manojo de nervios mientras jugueteaba con los dedos de mis manos.
Al llegar, distinguí a una señora de mediana edad hablando por teléfono muy alegremente.
-Luego te hablo cariño –dijo y dejó el teléfono de un lado-. Tu debes ser ____(Tn).
-Mucho gusto Sra. Columba –ambas nos estrechamos la mano.
-Hijo, ¿le has hecho la entrevista ya? –dijo examinándome de pies a cabeza.
-Incluso le he enseñado la casa mamá.
-Bien, ¿ya la contrataste?
-En realidad, tiene un pequeño inconveniente. _____(Tn) no sabía que el trabajo es de tiempo completo, ella va a la universidad en las mañanas, no podrá cuidar de Darcy –musitó Alonso.
-Eso se puede arreglar, el sueldo será menos en todo caso –dijo y yo asentí-. Pero tendrás que vivir aquí, tus días libres serían los domingos.
-Solo falta que conozca a Darcy para ver si se llevan bien, ya sabes mamá que Darcy no se lleva bien con todos.
-Que va, esta chica ya está contratada, con el tiempo Darcy se acostumbrará a ella –dijo la Sra. Columba y yo sonreí.
Y ya estaba contratada, empezaría a trabajar en dos días, un día después de que Jade se valla; no me podría ir mejor. Regresé al departamento para encontrarme con una Jade totalmente estresada, buscando por todos lados quien sabe que cosa.
- ¿Qué buscas? -Dije mientras ponía mis llaves en la mesa.
- Mi cámara -dijo mientras alzaba cada colchón del sofá.
- ¿No ya la habías metido en tu maleta? Ayer me dijiste que la ibas a guardar de una vez para que no se te olvide.
Me miró por un segundo.
- ¡Agh! Tienes razón, lo olvidé -dijo tirándose en el sofá-. Aún no creo que esté lista para irme, el estrés me está matando ____(Tn).
Me senté junto a ella.
- Tranquila, disfruta de esta oportunidad.
- Te voy a extrañar mucho -sus ojos comenzaron a aguarse.
- Jade, no llores -la abrazé-, yo también te voy a extrañar, te prometo que estaré en Londres antes de la primavera, si consigo el intercambio.
- Tienes que conseguirlo. 
Me limité a sonreir.
Al día siguiente acompañé al Jade al aeropuerto, quién con lágrimas se despidió de mi. Luego me la pasé empacando mis cosas ya que al día siguiente era yo la que dejaba el departamento. Empaqué mi ropa y todos mis objetos personales.
Ya es el día de mi mudanza, me levanté temprano y me di un baño antes de tomar mis maletas y dirigirme a casa de los Villalpando Camarena por medio de un taxi. 
Llegué y toqué el timbre, Lorena me recibió.
- ¡____(Tn)! Bienvenida, ahora le digo a Alan que lleve tus maletas a tu habitación -dijo y me pregunté porque me trataban como visita si al final soy una sirvienta.
- Gracias Lorena.
- ¡Alan! -gritó-. Dime Lor -me dijo-, ¡Alan! -gritó de nuevo.
- ¿Qué pasó Lor? -llegó una voz desde la cocina.
Un chico demasiado atractivo, ojos ámbar, cabello negro y una hermosa sonrisa llegó. Y me derretí por dentro, ¿acaso en esta casa solo hay chicos guapos?
- Lleva las maletas de _____(Tn) a su habitación -ordenó Lor.
- Muchos gusto _____(Tn), me llamó Alan -me estrechó la mano.
- Mucho gusto -sonreí.
- Así que... ¿nueva nana? -inquirió en tono coqueto.
Me reí en mi interior.
- Supongo.
Alan me regaló una sonrisa para después tomar mis maletas y subir las escaleras hacia la habitación, yo lo seguí.
- Yo soy chofer de la Sra. Villalpando, si sales con Darcy me avisas y yo les llevo -dijo.
- De acuerdo, gracias -observé con detalle la habitación.
- Alonso te espera en su oficina para darte unas últimas instrucciones -dijo antes de salir.
Seguidamente bajé las escaleras y me paré al frente de la puerta de la oficina. Toqué rítmicamente dos veces.
- Pase...-escuché aquella hermosa voz.
Tomé de la manija de la puerta y la abrí con cuidado. 
Se encontraba sentado en su escritorio frente a una computadora portátil. Me sonrió e hice lo mismo.
- ¿Ya conociste a Alan? No te asustes si la mayoría de la gente de servicio me llama de 'tú', es solo que no me gusta que me llamen de usted. Toma asiento -me indicó una silla y me senté.
- Bien, Darcy está en su pieza con Paris, en unos minutos te las presento. Si necesitas ir a algún lugar con Darcy, le dices a Alan que te lleve. Si Darcy o tu tienen hambre, vas a la cocina, preguntas por Niní y le dices que prepare algo -me dió una hoja de papel-. Estos son los platillos favoritos de Darcy. Los domingos son tu día libre, en cuanto a mi madre y mi padre, los verás pocas veces, ellos todo el tiempo están en la empresa, pero yo estoy todo el día aquí así que si tienes alguna duda pregúntamelo a mi; ¿alguna duda?
Negué con la cabeza.
-Bien, vamos a la habitación de Darcy para que te conozca.