Mangelito ; Anhelando El Amor

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Mangel

Nuestro viaje continuaba, y aunque algunos estaban más agotados que otros. Nos arreglamos en continuar y tratar de disfrutar ello.

Aquella noche de lluvia fue terrible, fui regañado por haber actuado tan impulsivamente , pero también tenia en cuenta que mis compañeros estaban preocupados por mí.

La idea de perder a rubius esa noche no paraba de recorrer mi mente, y aunque tratase de continuar con la idea de tener tiempo a solas para pensar sobre lo nuestro , no podia evitar volver a ser cercano a él. Casi lo pierdo , casi muere, queria aprovechar el tiempo con él antes de que ocurriese algo así de nuevo.

Aunque haberlo hecho me empezó a distanciar un poco de lolito.

Era amable conmigo aún, pero las manias de abrazos y demás , se volvieron menos recurrentes.

Los días en varios lugares a los que ibamos se volvieron semanas, al principio no duraria tanto pero ya casi ibamos al mes. Sobreviviendo como podiamos.

Me encontraba a solas en la cabaña junto a luzu, ocupandonos de crear las telas que nos habian pedido los demás. Para tener mantas que abrigasen más por las noches, avanzamos mucho y ya llegamos a los lugares donde empezaba a nevar.

Necesitabamos protegernos de las frías noches.

-Aunque no es mi primera vez , soy malo haciendo esto.. Perdón , Mangel.- Se lamentó el de sudadera.

-No , no , lo estás haciendo muy bien. - Mentí.

Llevaba muchas horas dándole clases de coser a luzu, y lo cierto es que daba la impresión de que cada vez tejía peor. Aún estaba solo con una manta y se pinchó con la aguja, no pude evitar hacer una mueca.

-¡Pero si nada más hay que verme! -Exclamó.- Lo hago fatal. Lo mismo daría que cosiese con los pies.

-Deberiamos probarlo , a lo mejor con los pies funciona mejor.

-Me rindo. - Dijo con un suspiro - Lo siento , Mangel , has tenido mucha paciencia conmigo , pero aún así solo arruino las telas. Parecen haber sido rasgadas por un animal.

-De hecho, el animal no hubiera hecho tanto destrozo , luzu.

El castaño se echó a reír, y yo con él. Cuando me había pedido clases para tejer , no pude haberme imaginado lo mal que se le daba, y verlo pincharze cada tanto me ponia nervioso.

-¿Y si mejor cocinas? Puede que en eso seas mejor. -Sugerí.

- No , tampoco se me da bien, arruinaria la poca comida que tenemos.- Dijo para luego ponerse de pie y sentarse a un lado mío. Donde las telas estaban esparcidas por todos lados.

-Bueno, tampoco pasa nada , un día te casarás y tu pareja te ayudará con los deberes de cocer, cocinar y más ¿No?

-Te envidio , Mangel , eres bueno en estas cosas. A mi me gustaría ser de los que hacen estas cosas en la relación, tejerle un regalo a mi pareja o cocinarle. Pero soy un desastre en ello..- Repuso él ,soltando un suspiro. - Aunque ni siquiera sé si algún día me enamoraré o casaré.