Soy tú tormento, Alex

Celos y secretos revelados

Capítulo 8

La noche ha pasado como si fuera un relámpago. Tan deprisa que no me había dado cuenta cuando fue que amaneció solo sabía una cosa estaba que reventaba de la ira contenida que sentía en mi interior era tanto que mi cabeza la sentía apunto de explotar no había podido dormir nada.

Y no solo eso estaba cabreado estaba enojado, desquiciado ya no encontraba nombre para descifrar lo que estaba sintiendo en ese momento. Sentía que de todo su cuerpo brotaba humo por boca, nariz, ojos, sin exagerar.

Lo que más me molesta es el cinismo del sujeto de pararse frente a mí y después saludar con ese descaro como si nada hubiera pasado como si mi hija no estaba presenciada todo.

Fue tanto el cólera que sentía al ver esa escena que después de la comida la había dejado en la empresa y él se había marchado con la excusa que llevaría a su hija a casa y descansará un rato.

Pero lo que en realidad quería era exigirle una maldita explicación del porqué ese saludo tan afectuoso entre ellos y en público.

Si tenían una relación y no le había informado y si era así no veía futuro entre ellos ya que no le caía muy bien que digamos ese sujeto.

Por más que lo pienso no encuentro una maldita explicación lógica a todo lo que sucedió en el restaurante.

Era tanto su enfado que sentía por dentro Alex que si le cortaban en la piel el no votaría una sola gota de sangre.

Pero lo que sí me tenía fuera de sí es la forma en como el tal David ese se atrevió a coquetear con ella frente a él con tanta confianza. Y para colmo se invita solo el muy degenerando.

Es que acaso no se daba cuenta que estaba una niña presente observando todo lo que pasaba a su alrededor, pero no - dice enfadado en su mente mientras conduce - ese desgraciado decidió ignorarlo y proseguir con su descaro frente a mi hija.

Pero ella debió detenerlo, frenarlo de golpe, pero no lo hizo, sino que lo abrazo hay enfrente de todos.

Lo peor no fue eso lo peor fue la forma en que vio que sus ojos brillaban cuando veía al degenerado ese.

Maldita sea - golpea el volante airado - ¿será que ella está enamorada de ese sujeto? No y no y no eso no puede ser, si fuera así se lo habría dicho o me hubiera dado cuenta.

Lo cierto es que no sabía qué hacer con este coraje que siento en este instante.

Ese hombre no es buen partido para ella, se ve a legua que es un descarado mujeriego que le gusta jugar con las mujeres y eso no lo permitiré no dejare que jugué con ella. No señor.

Las protegería de sí misma si era necesario, pero no dejaría que fuera objeto de nadie.

Deja su auto en frente de la empresa para que los guardaespaldas lo estacionen en el parqueo de la empresa.

Cuando llega a su oficina de inmediato la visualiza tan feliz que su cólera aumento en gran manera.

Claro está feliz porque se encontró con ese sujeto. - se dice mentalmente.

-Milagros a mi oficina ahora.

-Sí señor - dice encantada mientras lo sigue a su oficina.

Las cosas le salieron mejor de lo que pensó. Aunque debe confesar que no le hubiera gustado que Esperanza estuviera involucrada en esto. Por suerte ella es una niña y no entiende nada de esto por el momento.

De todas formas, de solo recordar su cara de espanto cuando David hizo acto de presencia en el restaurante y la saludo para después sentarse como si fuera el invitado de honor fue poético y más la forma en la que se dirigió a mi como si fuéramos dos amantes enamorados.