Sol de Medianoche (Finalizada)

Capitulo 28

Luego de nuestra presentación, bajamos del escenario y caminamos hacia la mesa donde se encontraban Alice y Jasper. Busqué a Edward con la vista y no lo encontré por ninguna parte. Todos mis amigos de la preparatoria asistieron a mi fiesta, y como los demás, me felicitaron por mi presentación. Esme y mi madre estaban platicando sobre Renesmee. Apenas iba conociendo a la bebé y ya estaban encantadas con ella.

Jacob, Seth y Leah, estaban sentados con Charlie y Sue juntos. No sé sí era mi imaginación, pero veía a Charlie interesado en Sue. No habría algo que me hiciera más feliz que Charlie consiga enamorarse de otra mujer y ser feliz. Aunque por lo visto, ya la había encontrado.  

-— ¿Elizabeth donde está Edward? -. Me preguntó Jacob.  

-— No lo sé. -. Le respondí mirando a nuestro alrededor. -. No lo veo desde que bajamos del escenario.  

-— Creo que lo vi entrar en la casa con Emmett. -. Me dijo Seth comiéndose lo que encontraba en la mesa.  

-— No seas tan tragón. -. Le dijo Leah golpeándole la cabeza con su mano abierta. -. Compórtate.  

-— No seas aguafiestas, Leah. -. Se quejo él. -. Hay suficiente comida. 

-— No me refería a eso. -. Le respondió ella.  

-— Chicos no peleen. -. Le dijo Sue.

-— Es cierto. -. Les dijo Charlie. -. Hay suficiente comida. 

-— Eso es bueno para nosotros. -. Me dijo Jacob guiñándome un ojo.  

-— Voy a buscar a Edward. -. Les dije mientras me levantaba de la silla y me dirigía a la casa. Un chico de rostro aniñado y pelo rubio de punta cuidadosamente arreglados con gel, me corto él pasó.  

-—Elizabeth. -. Dijo con una sonrisa. Su voz se escuchaba rasposa y su sentido de coordinación no era muy bueno. Al parecer estaba borracho. 

-— Eh... hola, ¿Mike, cierto? -. Le pregunté. -. ¿Estas bien?  

—- Sólo... te... iba a felicitar. -. Me dijo.  

-— Bueno... gracias. -. Le dije encaminándome a la casa. -. Espero que la estés pasando bien. Disculpa, tengo algo que hacer.  

Me dirijo rápidamente a la casa y entró en la cocina. Sólo hay dos chicas de servicio que están sacando más comida para los invitados. Me dirijo hacia la sala y no veo a Edward por ningún lado. Me doy media vuelta para irme, pero alguien tropieza conmigo, haciéndome trastabillar hacia atrás, casi haciéndome caer. 

-— ¿Mike, que haces aquí? -. Le pregunté desconcertada. 

Los ojos de Mike tienen un destello azul muy oscuro, y sonríe con aire despectivo mientras mira con lascivia mi cuerpo de arriba a abajo. ¿Qué es eso? ¿Qué quiere?  

-— Te estaba... buscando. -. Me dijo arrastrando las palabras. -. ¿Qué te parece... sí... tú... y yo... nos divertimos un rato?  

—- No sé en que estés pensando. -. Le dije haciéndome para atrás. Sí sabía que pensaba. Claro... que lo sabía. -. Pero es mejor que vuelvas a la fiesta. 

— No seas así. -. Dijo acercándose a mí, mientras tropezaba. -. Nadie se va a enterar... me gustas... mucho. 

Estiro una mano para tocar mi rostro, pero una mano blanca lo detuvo, frente a mis ojos. Volví la mirada y vi a Edward con la mirada salvaje, mirando a Mike. Emmett estaba detrás de él. 

-— Ni siquiera lo intentes. -. Le dijo Edward con un gruñido. -. ¡Es mi mujer! 

-— Cullen... -. Dijo Mike arrastrando las palabras. -. Siempre... te coges a las mejores... y... a las... hermanas... eres un... desgraciado.