Rebeca
Entre a casa con sumo cuidado, no quería hacer ruido aunque todavía eran como las 18:30 tenía que ser lo más cautelosa posible, tal vez solo así evitaría que papá o mamá se dieran cuenta de que llegue. ¿Miedo a mamá?, bueno, tal vez un poco porque estoy segura de que Robert le conto lo que paso hoy, y aunque a veces mamá parezca no estar de acuerdo con papá, no le gusta que lo desobedezca cuando piensan lo mismo. Tal vez tengan un poco de piedad.
¿Pero que pienso? ¿Que mis padres me perdonaran porque me fui con un chico del instituto que causa mala espina?...y en frente de su nariz.
Cruce el arco que es de la sala y apenas logre subir los peldaños de las escaleras cuando mi padre salió de su habitación. Su ceño fruncido y la mala vibra que se creó entre nosotros me hizo asustarme, realmente había salido cuando yo no me lo esperaba
—Hay Dios.... —susurre para mi dando un brinquito en mi sitio. Quise girar e irme como una total torpe, tal vez que fingía ir al baño, pero mi padre me llamo.
—Rebeca Mendes.
—¿Si, Robert? —pregunte ahí, jugando con los dedos de mis manos.
Por un momento juro que pareció querer contener su enojo, y que sería más suave conmigo, pero tan pronto apareció esa pequeña chispa de esperanza, tan pronto es como se fue siendo substituida por ese par de manos elevadas al aire, comenzando con el sermón.
—¿¡Qué demonios pensabas cuando te fuiste con él?!
Correando los parpaodos, me susurre a mí misma mentalmente que no tuviera miedo. Porque para ser sinceras, era como si cualquier extraño te gritara tratando de fingir algo que no era. En este caso, la palabra papá solo era un sinónimo, más en mi vida nunca fue alguien.
—Él es mi amigo... —me corto.
—¡Amigos me importan un bledo!, ¿estas idiota? —esas palabras me dolieron, más cuando fue a tocar su sien, sentí que estaba hablando realmente con alguien que no le entendiera, un bebé por ejemplo. Aunque tengo que admitir que sí, lo estoy—¡Eres mi hija, nunca te habías portado así y ahora que te meto a esta escuela te relacionas con la persona que menos es adecuada!
—¡No entiendo! —dije antes que nada—Cuándo dices que nunca me había comportado así, ¿te refieres a los 5 años que estuviste conmigo?, ¿Cuándo no tenía uso de la razón?...y sobre todo: ¡No entiendo que tienes en contra de Dylan!
—Rebeca, él es el más inadecuado para que salga contigo...
—¡No somos novios, Robert!
—¡¿Entonces qué carajo fue eso de irte con el cuándo yo te dije que no!? —él se acercó a mi peligrosamente y retrocedí por causa del miedo que me invadió. Me tomo de la muñeca apretando con notoria fuerza, y estirando su mano, bruscamente sacando mi iPhone del bolsillo de mi pantalón.
<<¿Dónde estás mamá?>> Me pregunte internamente cuando realmente supe que la necesitaba. ¡Este señor era un extraño para mí!, y estoy segura de que esta no es la forma de "convivir" que acordó con mamá. Si ella no está aquí, significa que no sabe nada.
—¡No! —fui interrumpida, pero no por un par de palabras...
Pero si por una cachetada, una tan fuerte que fui directo al suelo recibiendo otro golpe, no de mi padre, si no por el borde de uno de los buros que cargaba retratos de nosotros y mamá. El golpe callo directamente por debajo de mi ojo, haciéndome sentir inmediatamente como el ardor y el picazón, por parte de la cachetada, llegaban a mi rostro. No quería llorar, pero cuando estuve en el suelo y toque mi ojo para ver algo de sangre, entonces fue cuando toda lagrima salió sin permiso, ni siquiera quería llorar, porque estaba enojada, enojada con Robert, conmigo y mi cuerpo: ¿Cómo era posible que por un golpe no pudiera aguantarme las ganas de llorar?, ¿Cómo era posible no verme débil ante tan odiosa persona?...alguien que no era resaltante en mi vida.
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Intocable ➳ DO'B©
FanfictionRebeca Mendes es una chica que esconde muchas cosas detrás de una sonrisa y un "estoy bien". Siempre se muestra sonriente y llena de positividad, a pesar de como han pasado un montón de situaciones con lo que es respecto a su familia, se mantiene de...