Revancha

Capítulo 14

Emilia

No soy mala, solo digo la verdad Claudio jamás tendrá chances conmigo, por el simple echo de que es un idiota y a mi me gustan los niños que no son idiotas. Después de que las niñas intenten convencer a Tony de no salir con Ulises se fueron a comer.

-Ya puedes salir- dije- No digas nada.

-Ulises de verdad quiere a tu amiga- ¿Por qué es tan hipócrita este hombre?- Mira no sé que tan traumada estás con el amor, pero Ulises y León no son iguales a mi y a Silverio.

-¿Algo más?- Pregunte y rodé los ojos.

-Si, jamás digas jamás- rio- Algún día Emilia Ruiz caerás en mis manos y voy hacer con tu corazón lo que yo quiera.

-Vete de mi cuarto.

Mi celular comenzó a sonar

Tony bb❤️
Emi, ven al buffet ahora.

Sabía que algo malo había ocurrido. Salí de mi cuarto casi corriendo y detrás mío venía el insoportable de Meyer. Se escuchaban gritos y pude identificarlos Oscar, Machu y los otro no sabía de quién eran.

-¡Neta estoy muy agradecida con el mundo de no tener que soportarte, eres un asco Silverio!- le grito Machu al amigo del idiota.

-Ya vas a volver- dijo Silverio muy relajado.

-Tu vas a volver- rio Machu.

-¿Yo volver contigo? Por favor, jamás volvería con una mujer que ni es buena en la cama.

Y no sé en qué momento Oscar y Silverio estaban peleando en medio del buffet. Álvaro, Agustín y Axel se metieron a separarlos porque ya ambos estaban sangrando.

-¡Claudio!- le grité, necesitaba que detenga a Silverio o si no mis amigos acabarían con el- ¡Reacciona!- parecía que no estaba vivo y que era una estatua solo veía como Oscar golpeaba salvajemente a Silverio- ¿Que te sucede?.

Conecto sus ojos con los míos y me tomo por los hombros, pero me saco del camino tan bruscamente que perdí el equilibrio y me caí al suelo. ¡Ay mi rodilla, me duele mucho!.

-¿Estas bien?- me preguntó Tony acercándose a mi- Ven que te ayudo.

No sé que me dolía mas la rodilla o la forma en la que Claudio se comporto. En vez de ayudar a separarlos ahora lo veo peleando contra mis amigos

-Me duele la rodilla- le dije a Tony- ¿Si me acompañas a la enfermeria?.

-Obvio.

Fuimos a la enfermeria y el doctor me dijo que se iba a hinchar un poco, pero que me dejaría de doler en tres días lo que significaba que cuando llegue a casa mi papá no me iba a dejar hacer nada. ¿Cómo le digo que me lastime? Lo mejor sería decirle la verdad, pero no quería que tenga una mala impresión de Claudio... No sé porqué me preocupo tanto en lo que mi papá piense de Claudio.

(...)

Nuevo día, nuevas aventuras. Entre al salón y estaba un poco cogeando, se notaba que mi rodilla estaba un poco roja y el uniforme no me cubría tanto es que las faldas están un poco más arriba de la rodilla. En fin, estaba apunto de sentarme en mi lugar cuando...

-Emi- dijo el inepto que me ocasionó este golpe- ¿Podemos hablar?.

-No- dije- Necesito pasar ¿Puedes correrte?.