Claudio
Al día siguiente...
Estábamos esperando afuera de la casa de Emilia hace más de treinta minutos ¿Por qué tarda tanto?. Ernesto una vez mas estaba siendo mi cómplice, Alvaro y Antonia estaban en la parte de atrás y yo estaba adelanté
-¿Que onda?- por fin.
-¿Que onda tu?- Pregunto Tony- ¿Por qué tardaste tanto?.
-Le dije a mi papá sobre lo del gasto de la tarjeta, lo de Silverio y que hoy iba al cumpleaños de una amiga- wow que chica sincera- Vamos- subió al carro y prendimos camino.
Nadie hablaba sentía el aire algo tenso y si ¿Como no va a estar tenso? Después de lo que pasó anoche. Les explico...
-Seres de Luz- hablo Ernesto- ¿Por qué estamos aquí?.
-Te lo explico después- dije y todos bajamos del auto.
Entramos a ese lugar y no era una cárcel, no sé por qué quieren llevarse al tal Martin de acá. Se veía un lugar adorable lleno de dibujos y juegos había nenes jugando y cantando.
-Chicos ahí está Martin- Emilia señaló a un nene sentado en una silla amarilla. El nene tenía el pelo rubio y creo que tiene unos ocho o nueve años- Hola Martin ¿Me recuerdas?.
-Hola- el nene se detuvo- Emi... Emilia. ¿Que hacen ustedes aquí?.
-Vinimos a sacarte de aquí- dijo Tony- Tu no tienes que estar aquí, Martin.
-Pero necesitamos que te quedes en silencio- dijo Álvaro- Vamos por un helado de chocolate.
-¿Y ahora que?- pregunte.
-Necesitamos una distracción- dijo Tony- Urgente.
-Yo me apunto- ¿Ulises? ¿Y este cuando llegó?- Hola.
-Gracias por venir- dijo Tony- Oigan Machu colabora aquí y me dijo que nos iba ayudar.
-Yo voy afuera, debo decirle a Ernesto que este preparado- salí de ahí. No me sentía cómodo, solo quería estar lejos de Emilia y evitar pensar en todo lo que me produce estar cerca de ella.
Habíamos llegado a casa de ella, deje a Emilia en el suelo y ella comenzó a subir la escaleras- Gracias por lo que hiciste hoy- me dijo- Se que no es fácil para ti aguantar a Álvaro.
-No tranquila- dije- Pero creo que se aprovecho bastante de la situación hoy, digo- ¿Por qué estoy tan nervioso?- No hacia falta el beso que te dió.
-¿Y hacia falta que tú me beses?- maldita pregunta.
-Si- fui sincero- Hacia falta, a mi me hacía falta- ella sonrió tenía las mejillas rojas, se veía tan adorable. Emilia no es como todas las chicas con las que eh estado, ella es tan diferente a mi que eso es lo que me atrae de ella. Con otras pibas les llegó a decir eso ya me llevan a su cama o otra cosa, en cambio ella no y... Claudio deja de pensar un rato- Tengo que reconocer que cuando sonríes me vuelves loco
-¿Siempre eres así?- me preguntó y yo la mire confundido- A veces eres un galán, buena persona y después te transformas en un niño frío y soberbio. ¿Eres bipolar?.
-No soy bipolar- dije- Es que vos sos la que me produce estar feliz o enojado o triste, todo al mismo tiempo.
-¿Y cuando te produzco todo eso?.
-Enojado cuando no me querés hablar, triste cuando te veo con el pelotudo de Álvaro y feliz cuando estás conmigo- me acerque a ella y ahora la distancia que nos separaba era escasa- Aún tengo las fotos que te tome.

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Revancha
Ficção AdolescenteYo no quería hacerle daño, solo quería tener unas vacaciones normales con mis amigos. Pero todo se fue a la mierda... El, la piedra y... La sangre. Mi camisa estaba llena de sangre, yo no sabía que hacer. Y después la pelota rosa golpeó mi cabeza...