Jaebum se asomó una vez más al estudio de Jinyoung. Sus nudillos golpearon suavemente sobre el marco de la puerta, anunciando su presencia. Jinyoung estaba de pie frente a un caballete. Un lienzo blanco donde solo había unos trazos a lápiz yacía delante de él. El leve sonido de pasos y el golpetear en la madera lo hizo girarse. Ya estaba bien entrada la noche, Jaebum usualmente no se paseaba por allí a esas horas, y mucho menos tocaba antes de entrar.
-¿Ya estás solo? –la voz del mayor se escuchó un poco rasposa, arrastrada y seca. Jinyoung no necesitó ser muy inteligente para adivinar lo que sucedía. Sabía bien reconocer cuando Jaebum bebía, después de todo, siempre lo hacía en exceso, siempre sin control, aun si no lo hacía muy seguido.
-¿Por qué bebiste esta vez? –Jinyoung se giró a verlo colocando el lápiz sobre el caballete.
-Solo sentí ganas. -Jaebum se adentró en el estudio, recorriendo el lugar con la vista-. Responde lo que te pregunté.
-Yugyeom ya se fue. Si es lo que quieres saber. Se fue poco después de lo que pasó.
Im esbozó una mueca de desagrado, acercándose al caballete, observando los trazos.
-Realmente estás pintando… -comentó.
-Te dije que lo haría.
-¿De dónde salió ese chico, Jinyoung? ¿Por qué la fascinación? –Jaebum se giró de nuevo hacia él. Jinyoung pudo sentir mejor el penetrante olor a bebida. Jaebum olía a perfume y whisky, a antro, su cabello desarreglado también parecía hablar por sí mismo. Aun si todavía no era medianoche, ya Jaebum había tenido suficiente para la noche entera. No necesitaba preguntar para saberlo.
-Me lo encontré por casualidad. Solo me gustó… tú lo viste. Es bonito.
-Lo es… pero de modelar a follar va una buena distancia.
-Sigo sin creer que eso sea algo que te importe.
-¿Quién es él? –insistió Jaebum-. ¿Dónde vive? ¿Qué hace? ¿Qué edad tiene?
-Eres fotógrafo, Jaebum, no policía.
-No voy a dejar que haya alguien aquí metido, follando contigo, sin al menos saber eso.
-Piensa que me está ayudando a pintar. Lo demás es insustancial. –Jinyoung exhaló un suspiro, un poco cansado de la extraña y posesiva actitud de Jaebum.
-¿Era sexo lo que necesitabas? Podías haberlo dicho antes. Todo este problema se hubiera resuelto mucho antes.
Jinyoung levantó una de sus cejas.
-¿Qué ibas a hacer? ¿Tener sexo conmigo?
-Te he dicho antes que te ayudaría con lo que fuera. Incluso con eso.
-Pues no es sexo lo que necesitaba. Solo necesitaba algo que me diera deseos de pintar una vez más. No hay una explicación sencilla para eso. –Jinyoung respondió, haciendo su mejor esfuerzo por ignorar las implicaciones de lo que Jaebum acababa de decir.
-¿Te gusta el chico?
-¿Y si me gusta qué? –se acercó a Jaebum, encarándolo-. ¿Me vas a decir de una vez cuál es tu jodido problema?
-Mi problema, Jinyoung, es que no me gusta ver como alguien aparece de la nada y se mete contigo. No cuando te he cuidado tanto.
-Ni él se está metiendo conmigo, ni yo soy de tu propiedad… -Jinyoung se llevó las manos a la cintura-. Mira, hyung, sabes que te aprecio, y te quiero, y que eres demasiado importante para mí como para discutir por esto. Pero creo que hay emociones que te están cegando, estás actuando como un imbécil y eso no es lo que necesito ahora mismo. –Señaló hacia el caballete con una de sus manos-. Lo que necesito es apoyo. Finalmente estoy pintando de nuevo. Voy a poder hacerlo una vez más. Todo el esfuerzo que has puesto en mí, te lo voy a devolver. Voy a hacer que valga la pena.
Jaebum relamió sus labios, su garganta estaba seca, árida, había una especie de enojo que aún no se disipaba. No importó cuánto bebió, ni cuánto trató de distraerse en el abrazo de otra persona. La ira seguía allí. La sensación era ardiente y dura, entorpeciendo sus pensamientos, sus acciones. No le importaba que Jinyoung pudiera pintar de nuevo, y eso lo hacía sentir como la mierda. Lo único que seguía pensando era en aquel chico. En aquel desconocido con cara de cachorro que Jinyoung insistía en proteger, en la forma en la que parecía estar apartándolo de su lado con inmensa facilidad.
A su Jinyoung.
-Ya te dije lo que pienso al respecto. –Buscó la mirada de Jinyoung, viéndolo con una intensidad que el menor había visto pocas veces-. Ese chico te va a abandonar. Y cuando tu trasero inestable caiga de nuevo en su agujero depresivo, no voy a estar aquí para ti. Te lo advierto desde ahora. Así que más te vale pintar rápido, antes de que el sexo ya no sea lo suficientemente bueno como para mantenerlo alrededor.
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❝Canvαs❞ 〈JinGyeom〉✓
FanfictionYugyeom necesita dinero. Tal vez esté tomando malas decisiones, pero ya no le importa lo que tenga que hacer para conseguirlo. Jinyoung necesita pintar. Ya olvidó como se sentía desear plasmar algo en colores, ahora solo siente el amargo sabor de la...