|CAPÍTULO 29|

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Matt

Me encontraba recostado en mi cama mirando cosas en el celular, estos últimos días había notado más apegado a mi a James. No quería ilusionarme, pero algo dentro de mí sentía que él estaba sintiendo cosas por mí y no eran falsos. Tenía planeado declararme a James, todavía no estaba muy seguro de como hacerlo, pero iba a hacerlo, de eso no había duda.

Decidí mandarle mensajes a Leila preguntándole si podía venir a mi casa a ayudarme a buscar una forma de declararme a James. ¿Estaba nervioso? Bastante, pero cada vez sentía que nuestro vínculo era más fuerte y no era el único que lo sentía, mis amigos ya estaban sospechando bastante, estaba completamente enamorado y ni siquiera sabía cómo había surgido, solo un día comencé a sentirme demasiado a gusto con su presencia. El miedo de que James me rechazara se hacía presente, pero no iba a acobardarme, nada me podía detener.

Luego de una hora tocan la puerta y me encuentro a Leila sonriendo de una forma tonta.

- Hola chico enamorado. -dijo dándome un abrazo.

- Hola tonta, pasa. -dije moviendome de la puerta y dejando que pase.

- Hace bastante no venía a tu casa ¿están tus padres? -preguntó dejando su abrigo colgado.

- No, están trabajando ambos. -dije caminando hacia mi habitación con Leila siguiendome por detrás.

- Entonces... -dijo sentándose en la cama.- ¿Tienes algo en mente para esto? -preguntó mirándome.

- S... No, no sé qué hacer. -dije sentandome a su lado.- ¿Alguna idea?

- Bueno, hace frío, qué te parece si... -dijo pensando.- ¿Lo invitas a una cena en uno de estos lugares extravagantes?

- No lo sé ¿crees que funcionará? -pregunté dudoso, la idea no era del todo mala, una cena romántica, solo nosotros dos.

- Claro que sí, cualquier persona caería rendida si alguien hiciera eso. -dijo suspirando enamoradamente.- Además luego de cenar y de confesarle tus sentimientos, pueden venir aquí o ir a la casa de James a continuar con el asunto. -dijo levantando las cejas pícaramente.

- Eres una estúpida degenerada. -dije tirándole una almohada y riendo.

- Pero admitamos que te mueres porque algo así pase ¿o me equivoco? -dijo mirándome pícaramente.

- Ya callate. -dije cubriendo mi cara con mis manos.

Continuamos hablando sobre esta cita por un rato y luego de dos horas se fue a su casa, hablamos de cómo se lo pediría, a donde iríamos, como le diría mis sentimientos y ese tipo de cosas. Ya estaba todo arreglado, se lo pediría hoy para ir mañana, lo llevaré a un restaurante de aquí cerca, el cual ya reservé para mañana a las ocho de la noche, comeremos y luego le diría lo que siento. Después veríamos a que casa ir y eso, todo estaba perfectamente planeado.

Ahora mi mayor miedo eran, primero que James me rechace, y segundo mis padres. No tenía idea de cómo iban a reaccionar, por el momento lo mantendría oculto para mí, y solo les contaría a mis amigos, ya vería más adelante como decirle a mis padres que era gay, por ahora no iba a decir nada.

Luego de pensar una y mil formas de invitar a salir a James, decidí mandarle un mensaje.

{Conversación por WhatsApp}

Matt: Hola James ¿como estás?

Amor platónico: Hola Matt!! ¿Bien y tú?

Matt: Bien, quería preguntarte algo...

Amor platónico: Claro ¿qué pasa?

Matt: Me preguntaba... ¿Te gustaría salir conmigo mañana a la noche?

Los Cambios siempre existieronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora