Pequeños escritos.
A veces siento una pequeña gotita de inspiración que toca mi mente, hay veces mi inspiración viene de todos lados,y no viene de ninguno.
Tal vez fue costumbre, o tratar de tapar soledades con caricias. Lo raro de esto, es que mientras nos "amábamos" la soledad seguía impregnando nuestras almas, seguía consumiendo el escaso amor propio que nos quedaba.
Quizá fuimos una guerra contra el tiempo, contra una sociedad que quiere verte de la mano de alguien aunque ya no exista amor. Fuimos un abrir y cerrar de ojos, tal vez lo que dura un beso.
Te extraño, admito que te extraño mucho. Pero sé que no es amor, éramos una carrera contra el tiempo, una huida de nosotros mismos, siempre escapando de enfrentar la soledad. Pero es momento de dejar de buscar sonrisas en otro rostro, tal vez sea el momento de vernos en todos los espejos y saber que seguimos enteros, tal vez en partes pero seguimos completos.
Pero lo nuestro no era amor, se parecía bastante. Éramos límites, ahí no existe amor. El amor es libertad, el amor o entra con todo o mejor se queda siendo parte del viento. Pensaba que eras la parte que me faltaba del corazón, pero era mi miedo a la soledad.
Que pena, nos esperaban miles de historias juntos pero prefiero ser patrimonio de las estrellas que de un corazón que me quiere a medias.
Tal vez nos esperaban perros, una casa o hasta hijos. Pero no quiero historias cortas, ahora tú tal vez seas escudo para la soledad de alguien más. Y yo aquí siendo una era glaciar en mi corazón.
Pero no era amor lo nuestro y me alegro que termino. Ni siquiera tiene nombre lo que éramos, éramos simplemente algo que nunca sabremos.
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