La Estafa Horan (Niall y tu)

capitulo 37

|Capítulo treinta y siete|

Entré al departamento cansada, me tiré en el sillón principal y me quede dormida, desperté por el timbre que sonaba constante, me levanté y abrí la puerta, Michael apareció.

— ¿Por qué no abrías?—Preguntó preocupado.—Creí que habías cometido una locura. —Dijo tocándose la frente y haciendo una cara graciosa, reí.

—No, pasa.—Dije haciéndome a un lado, Michael entró.

—¿Dónde pongo las cosas?

—En el baño.—Contesté mientras caminaba hacia este y Mike iba detrás de mí.

Dejo todo en el lavabo y yo fui a cambiarme la polera, regresé al baño y Michael ya estaba preparando todo. 

—Comencemos.—Dijo emocionado y reí. 

…

Michael ya se había ido y yo me encontraba mirando tv. El timbre sonó, me levante y fui a abrir, quizá se le había olvidado algo. Alguien se abalanzó sobre mí.

—No me dejes…—Balbuceo, arriba de mí.

Me removí incómodamente del piso pero Niall no se quitaba. 

—Niall, ¿Estás borracho?.—Susurré.

—No me dejes.—Repitió. Y si, si estaba borracho.

Suspiré y de pronto quise llorar, pero no lo hice, empuje a Niall y este cayó a mi lado. Me levanté y lo primero que hice fue tomar al rubio del brazo y jalarlo en dirección al baño.

—Niall, levántate.—Pedí pero él solo gruño.

Seguí jalándolo y cuando llegamos al baño, hice un jalón más y entonces entro a la bañera, me acerqué a las llaves y las abrí, coloqué agua un poco más fría, me puse de cuclillas y lo escuché soltar un sollozo.

—Yo no hice nada.—Aseguró y se quitó algunos mechones castaños y rubios del rostro. —Yo no la amo, ¡Yo te amo a ti!—Dijo mientras me miraba a los ojos. 

Entonces fue cuando comencé a llorar y lo abrace,

—No…—Susurró mientras enterraba su rostro en mi cuello. 

El agua seguía cayendo y me olvide que yo también estaba mojada.

—Ven.—Dije mientras le ayudaba a levantarse, cerré las llaves y salimos de allí.—Espera aquí, creo que tengo alguna muda tuya.—Comenté.

Él asintió, entré a mi habitación y por segunda ocasión me coloqué otra polera y un short de una de mis piyamas, sequé mi cabello, tomé la muda de ropa y una toalla. 
Salí de allí y busqué a Niall y lo encontré mirando las fotos del estante.
—Toma.—Dije mientras se daba la vuelta y le entregaba la toalla.

—Lo siento.—Se disculpó mientras la tomaba, deje la muda de ropa en el sillón

Se veía tan atractivo así, acababa de darme cuenta que no traía camisa y que su abdomen estaba cubierto por pequeñas gotitas que se resbalaban hasta llegar a la orilla de los vaqueros. Me mordí el labio.

—_____, ¿Acaso no es esa mi camisa?.—Preguntó pero yo lo ignore. 

Me acerqué a él, mi cuerpo sentía la necesidad de tenerlo cerca. Me puse de puntitas y lo besé lentamente hasta que ese beso se convirtió en uno desesperado, metí mis dedos entre su cabello mojado. Los dedos de él caminaron hasta el extremo de mi camisa y pronto la saco.

—Te extrañe tanto.—Dijo mientras me besaba el cuello. 

—Yo más…—Respondí.