Esponjosa dulzura | Yuno x Charmy |

D: Disfraz

Como bien todos saben, Yuno, es alguien tranquilo que prefiere pasar sus noches leyendo un libro que ir de fiesta, pero por alguna razón no rechaza la invitación de Charmy para asistir a la fiesta de disfraces. De hecho, no llegó a aceptar la invitación ya que llegó Vanessa y se auto invitó arrebatado de las manos de Charmy la tarjeta. Ante eso no tardó nada en pedir la invitación, antes ofrecida, de Asta, éste no dejó pasar el tema sobre el repentino interés en salir, pero sacarle información a Yuno fue casi imposible. La fiesta es el sábado así que salieron a alquilar los disfraces por la mañana.

Por su parte, Charmy está molesta con su hermana por arruinar la oportunidad de conquista, nunca se ha interesan por un chico y cuando por fin aparece alguien parece ser imposible de alcanzar, malditos gustos de millonaria siempre queriendo lo mejor. Mimosa fue amable al invitarla a su fiesta de cumpleaños como agradecimiento y creyó poder acercarse a Yuno con esto, pero cuando éste aceptó e iba a tomar la tarjeta Vanessa debía estar escuchando. Vanessa, no es tonta, sabe que pretendía su hermana, pero ella también quiere divertirse. Igual Charmy no se desanima, tendrá más oportunidades. Ahora está ahí saliendo del vestidor para mostrar el genial atuendo que eligió.

—Soy una calabaza —ríe ella haciendo un baile tonto—, soy deliciosa.

—Lo eres.

—¡Yuno!

Charmy deja de bailar y mira con las mejillas rojas al chico, justo él tenía que verla así, que vergüenza. Queda frente al alto Yuno cuando éste se acerca, él no parece pensar nada, pero una sutil curvatura en su labio demuestra que se está divirtiendo.

—Charmy —llama Yuno con suave sonrisa e intensa mirada que golpea el corazón de ella—, ¿me permites ocupar el probador?

—Claro —Charmy se hace a un lado.

—Gracias.

Una vez que Yuno entra al probador, Charmy corre para golpear a Vanessa que se parte de la risa, ella había visto a Yuno desde antes, pero no quiso decirle nada a Charmy cuando comienzo a bailar de forma ridícula. El intercambio entre esos dos fue todo un espectáculo.

—Voy a llevar este —asegura la chica guapa de rosas cabellos, es un disfraz de bruja: un vestido corto y entallado con escote prominente, cinturón, sombrero y botas a juego, todo de color rosa oscuro, con detalles en bordado negro, un diseño atrevido y sexy justo como le gusta.

—A mí me gusta este —dice Charmy feliz con su circular disfraz.

—No, eso nunca lo permitiré. ¿Acaso no quieres conquistar al príncipe? —da justo en el blanco, las mejillas de su pequeña hermana toman un adorable color rosa.

—¿Entonces qué?

—Yo me encargo —guiña un ojo y comienza a buscar entre las perchas.

—Aquí estoy ¿cómo me veo? —sale Asta del vestidor utilizando un disfraz de hombre lobo, uno terrorífico: camisa, pantalón y botas negras, guantes peludos con garras y una cabeza de un furioso lobo.

—Demasiado peludo —comenta Vanessa tocando el cuello de la máscara repleta de pelo—. Eso me da una idea.

Y diciendo eso Vanessa empuja a Charmy en el probador que antes ocupó Asta, ya que hay sólo dos probadores, y pide cambiarse mientras ella va a por el disfraz ideal. Vanessa, sabe que su hermana no va a ocupar algo sexy como ella así que debe ser algo adorable, si a Yuno termina gustándole será por ese lado, de lo contrario no es el indicado. Cuando entrega el disfraz a Charmy saca su celular y comienza a tomarse fotos, enseguida Asta cae dentro del cuadro para una sección intensiva de poses. Es entonces que Yuno sale del probador dejando a los otros dos asombrados ante el increíble cambio que puede hacer una simple vestimenta.

—Te ves fantástico, ¿cómo haces para lucir todo lo que tocas? —se queja Asta golpeando a su amigo en el hombro.

—Ahora sí que eres todo un príncipe —comenta Vanessa a la par que toma fotos de Yuno, ella nota como éste mira a su alrededor de forma muy sutil. Sonríe con maldad—. Se está cambiando.

Yuno mira de forma aburrida a Vanessa como si hubiera escuchado algo fuera de su interés, pero la atención que pone enseguida sobre Charmy, cuando ésta sale del probador, delata enseguida sus sentimientos.

Charmy lleva un adorable y esponjoso disfraz de oveja; corto vestido blanco y gorro de igual color con caídas orejas a los costados, remera simple de mangas largas negras y medias enteras de igual color, zapatos simples negros. Yuno está disfrazado de príncipe; camisa, saco, pantalón de vestir, guantes y capa, todo blanco excepto por la capa y saco que tienen bordados en dorado, unas botas negras para terminar.

La pequeña oveja admira embelesada al príncipe y se vuelve tímida al acercarse, nunca antes se había sentido así y es emocionante.

—Yuno se ve muy bien con ese disfraz —comenta ella jugando con sus manos y mirando sus pies.

—Gracias, también te vez bien —Yuno pretende parecer normal, como si sólo estuviera devolviendo un cumplido por cortesía, cosa que no es y sólo debes observar esa cálida mirada que sostiene sobre Charmy y esa imperceptible sonrisa que intenta corresponder a la gran sonrisa de ella. Ambos son adorables.

Vanessa no para de tomar fotos a esos dos.