Un gran mal se ha desatado en Britannia junto con el regreso de dos de los demonios más antiguos. Una maldición, un propósito, una guerra.
Advertencia⚠
○Esta historia contiene spoilers, más allá de la 3era temporada de NNT.
🚫No copias
🚫No adaptac...
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•Emociones negativas•
°Narra Darcy° Comencé a abrir los ojos, el dolor de cabeza se presentó al instante, ¡Gilthunder!, miré hacia todos lados, ¡por fín!, pero... ¿porqué era de noche?, mi ropa estaba rasgada y rota, mis manos pasaron por mi cabello, ya no era largo, tampoco tenía heridas.
-¡Mamá!- grité y corrí subiendo la colina. -¡Mamá! ¿en dónde habías estado?- le pregunté en cuanto la ví de espaldas. -Creí que tú...-
-Yo creí que podías...- me interrumpió, fruncí el ceño. Me miró por encima de su hombro y apartó la mirada.
-¿Qué?- pregunté.
-Creí que tú podías contra ellos... pero me equivoqué, pudiste haber impedido la muerte de esa niña y no lo hiciste, así cómo pudiste impedir que tus amigos se metieran en esto...-
-Mamá yo...- sentía una gran presión en el pecho.
-¿Dirás que lo sientes?- volteó para mirarme, no respondí. -Lo sabía... tal vez Némesis tenía razón, nada de esto hubiera pasado si tú lo hubieras impedido- comenzó a caminar lejos de mí, ahora me sentía enojada.
-¡¿Qué quieres decir con eso?!- no respondió, -¡¿Estás insinuando que hubiera sido mejor si yo no hubiese nacido?!- dejó de caminar. Su silencio lo decía todo, mis mejillas comenzaron a mojarse por las lágrimas.
-Si...- siguió caminando. No puedo creerlo, no puedo creer esto, caí de rodillas, oculté mi rostro entre mis manos, ¿lo único que tuve que hacer para merecer esto... fué nacer?. Me siento la persona más miserable, porque a pesar de que me duela con todo el alma... ella tiene razón, si yo no estuviera aquí, nadie estaría sufriendo. Un ruido hizo que mirara hacia adelante, la tierra se estaba desvaneciendo, me puse de pie, cada vez se acercaba hacia mí, comencé a correr colina abajo, no podía ver con claridad debido a las lágrimas. Solté un grito al darme cuenta de que estaba cayendo a un abismo.
-Te lo dije... solo era cuestión de tiempo hasta que ella también te odiara- me valió el hecho de que estaba cayendo, ahora solo me dejé llevar, si caía, el dolor físico no secompararía con el dolor que siento ahora en mi corazón. -Dime, Dya... ¿aún te rehúsas a dejarte consumir?-
-Callate...- le susurré.
-Lo estoy haciendo ahora, y lo haré lentamente...-
