Gulf se encontró con Malai y Khalan en su casa. El pequeño estuvo un largo tiempo mostrándole todos los regalos que había recibido y Gulf lo observaba feliz. La hora del concierto se aproximaba y Mew no contestaba a sus llamadas, quizás algo se complicó así que decidió esperarlo allí directamente.
Por su parte Malai declinó la invitación ya que tenía que ir a otro lugar pero agradeció el gesto enormemente.
Bright y Win ya estaban camino dónde tendría lugar el concierto. Bright conducía mientras el menor observaba su móvil. El moreno lo observaba de reojo.
-Le dije a Pear que nos acompañara. Ella disfruta mucho de la música al igual que nosotros.-Dijo Win sin separar la vista de su teléfono.
-Veo que os habéis hecho muy cercanos.-Contestó el mayor quién volvió a sentir ese calor que le llegaba a las orejas.
-Es buena chica y tú sabes que yo soy muy social morenito.
Bright se quedó callado observando la carretera. No sabía por qué se sentía así ya que nunca había experimentado una sensación similar en su anterior relación. Se había vuelto muy posesivo. Para él Win era un tesoro y no quería que nadie más lo admirara. Quería que sus sonrisas, sus besos, sus bromas, sus caricias, todo Win fuera sólo para él.
Los chicos estacionaron y se encontraron con los demás que ya se encontraban en la entrada del Black Mouth.
-¡Ey chicos! Qué puntuales.-Dijo Win.
-Por supuesto, no podemos perdernos nada.-Contestó Kao.
-Oye Gulf ¿Dónde dejaste a tu marido?-Preguntó Bright.
-Tuvo que ir a la oficina a resolver un problema de última hora, pero ya me está extrañando su tardanza.-Digo Gulf preocupado.
Sin más fueron a entrar al pub cuando la voz de Pear se escuchó a lo lejos:
-¡Win!-Gritó la chica.
-Hola Pear, llegaste justo a tiempo.-Indicó el joven.
EL moreno que observaba con recelo decidió adentrarse primero para no pensar demasiado en el tema. Todos los demás le siguieron.
Mew abrió los ojos y se sobresaltó al darse cuenta de dónde estaba, hacía siete horas que Mew se encontraba en aquel lugar encerrado junto a Art. Su paciencia ya se estaba agotando pero debía esperar. Seguro el imbécil de Art se pensó que por ser fin de semana el vigilante no estaría por esta zona de la empresa. Se equivocaba. Debía ser paciente, sólo quedaba una hora más para que éste llegase y sería libre.
Art parecía disfrutar del momento. Sus comentarios fuera de lugar no cesaban y Mew se desesperaba por momentos. Se preguntaba una y otra vez qué pudo ver en aquel hombre. Ahora lo aborrecía con todas sus ganas. Pensaba en Gulf y veía qué tan diferentes eran.
Gulf era descarado pero de una manera muy dulce. Era tierno, protector, leal, un gran amante y era realmente hermoso. Pensar en él hizo que su corazón dejara de latir por un momento. Ya estaría en el concierto y estaría preocupado por él.
-¡¡Maldita sea!!-Gritó y pegó un golpe en la mesa.
Seguidamente no lo resistió más. No quería usar la violencia y mucho menos con el ahora socio de su empresa pero su paciencia se agotó. Se acercó a Art, quién se pensaba que el moreno tendría otras intenciones, y lo cogió por el cuello dejándolo a penas sin poder respirar.
-¡¡Abre la puerta ya!!
-¿Me... va...s a.. matar?-Dijo como pudo Art.
Mew se dio cuenta de que no merecía la pena formar un escándalo y lo soltó. Pronto llegaría el vigilante y la pesadilla habría terminado.
Mientras en el Black Mouth los amigos disfrutaban de un agradable concierto. Bright, Mike y Boss habían mejorado mucho en los últimos años. Si antes eran buenos ahora eran sensacionales. El público aplaudía y bailaba.
Ellos se sentían en una nube. Hacer lo que realmente amaban y encima ser reconocidos era impresionante.
De repente el móvil de Gulf sonó y se salió afuera para contestar. Seguramente sería Mew.
-¿Mew?-Respondió.
-Hijo.. Gulf..-Se escuchó entre sollozos.
-¿Mamá? ¿Eres tú? ¿Qué ha pasado?-Se puso en alerta.
-Khalan... pobre criatura ¿Qué será de él?
-¿Qué dices mamá? ¿Le pasó algo a Khalan? Mamá dime algo por favor-Contestó Gulf nervioso.
-No hijo, a él no. Pero Malai... Malai... Malai murió hijo.
Gulf se paró en seco y sintió cómo su teléfono caía al suelo. De repente unas lágrimas salían de sus hermosos ojos. ¿Cómo podía ser posible? ¿Por qué? Pensó en el pequeño y el corazón se le encogió.
Win salió a la puerta en su búsqueda ya que el pelinegro se estaba tardando demasiado.
-¿Gulf? ¿Qué te pasa?-Preguntó al ver la apariencia del mayor.
-Win... Malai murió.
-¿¿Qué?? Eso no puede ser cierto, tiene que haber un malentendido-Respondió nervioso Win.
Gulf entró al local para comunicarle la triste noticia a todos los demás. Tan pronto como se enteraron salieron de allí a toda prisa dejando el concierto a medias, eso era lo que menos importaba en esos momentos.
Mew seguía sin contestar a las llamadas de Gulf y este decidió dejarle un mensaje.
"Mew algo terrible sucedió. Malai murió y estamos en el tanatorio. Ven pronto, te necesito"
Gulf
Y allí se encontraban, velando el cuerpo sin vida de la joven Malai. Nadie se explicaba como algo así podía haber sucedido. Todos lloraban y martirizaban. El pequeño Khalan se encontraba en la casa de sus abuelos con una tía de Malai. No había querido decirle nada al pequeño aún.
Gulf se encontraba muy afectado. Con Malai compartió cuatro años de su vida. Aunque terminaron quedaba una bonita amistad. Pensaba en su hijo y más lloraba. ¿Cómo le dirían al pequeño que su mamá se fue al cielo? Las lágrimas no dejaban de salir.
El padre de Malai dijo que al parecer la joven se encontraba en un centro comercial y salió a una de las terrazas a tomar aire. Se sentó en una plataforma que había, perdió el equilibrio y cayó al vacío. Todos lamentaban aquello. Se trataba de un terrible accidente y les costaba asimilarlo.
Tras dos horas la puerta se abrió y apareció Mew. Gulf se lanzó a sus brazos y sollozó desconsolado. Mew lo abrazaba con fuerza.
-Tranquilo mi hermoso Gulf, aquí estoy contigo.
-¿Dónde estuviste tanto tiempo? ¿Por qué no me contestabas?-Preguntó en medio del llanto.
-Luego te explicaré, este no es momento ni lugar.
Gulf le dio la razón y siguió abrazado a su marido mientras lloraba pensando en Malai y sobre todo en el pequeño Khalan.
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Ahora, mi suerte ha cambiado. 2ª PARTE
FanfictionCinco años han pasado desde que la vida de Gulf y Bright se cruzó con la de Mew y Win. Su etapa de estudiantes quedó atrás y ahora deberán afrontar los problemas de adultos que la vida le presenta. 2ª PARTE de "Maldita sea mi suerte"