Llegó la semana del juicio y Gulf decidió llevar a Khalan a la casa para que jugara con Chopper. Mew se sorprendió gratamente al verlos allí. Mientras el menor jugaba con el cachorro el matrimonio lo observaba desde el porche.
-Me alegra teneros aquí.-Dijo Mew.
-Quiero saber la verdad. La necesito. Necesito saber que todo tiene una explicación.-Le imploró el menor.
Mew se sorprendió ante aquella petición y sin dudarlo se dirigió a su despacho. Cuando regresó traía unos documentos, fotografías y una grabadora.
-Art Pakpoom fue un ex-amante del pasado, mucho antes de conocerte. Fue una persona por la que realmente sentí algo parecido al amor pero él se encargó de acabar con todo eso. Tras descubrir que me estuvo engañando con varias personas decidí terminar con aquello. Él insistió pero no volví con él nunca. Después de varios años volvió como nuevo accionista de Suppasit Publicidad. Pensé que quizás había madurado y que podría haber un buen ambiente de trabajo pero nada fue así.
-Te hubiese entendido Mew.-Cortó Gulf.
-Lo sé, pero tenía el deber de alejarlo de ti. Después de varias propuestas para que fuese su amante decidí meter una nueva cláusula en el contrato que firmó dónde ponía que si atentaba contra mi matrimonio y familia ese contrato quedaría anulado automáticamente. Aquí puedes ver lo que ponía.-Dijo entregándole unos documentos.-¿Recuerdas el día de la muerte de Malai? Todo fue una trampa por él. Me encerró en la oficina durante horas y hubo un momento en el que el sueño me venció y el lo aprovechó para sacar esas malditas fotos.
Mew le entregó unas fotografías dónde se apreciaba la hora de entrada, salida y cómo el vigilante abría la puerta para que saliera.
-Con esas imágenes me chantajeó. Me dijo que si no aceptaba ser su amante que destruiría mi matrimonio. Evidentemente me negué. Pero tenía que llegar a ese límite, tenía que provocarlo para que cometiera el error de meterse en nuestro matrimonio para poder así alejarlo definitivamente.
El moreno le entregó la grabadora, en ella se escuchaba la conversación dónde Mew se negaba a ser su amante y Art le advertía que acabaría con su feliz matrimonio. Gulf observaba todo asombrado.
-Y cometió un terrible error que fue drogarme el día del aniversario y provocar aquella situación tan desagradable para ti y Khalan. Conseguimos la confesión del camarero que le ayudó a ejecutar su malévolo plan y a cambio de que no lo denunciara y manchara su apellido accedió a firmar un documento dónde tiene prohibido a volverse a acercar a nosotros y hacernos daño directa o indirectamente si no quiere acabar en los tribunales.
-Mew...-Susurró Gulf quién comenzó a llorar.
-Ya está mi hermoso Gulf, tranquilo mi amor.-Dijo Mew abrazándolo.
-Perdóname, perdóname por dudar de ti. Por no escucharte.
-Estás aquí y me has escuchado. No tengo nada que perdonarte. El que te pide perdón soy yo, por no haber sabido manejar este asunto de otra manera.
-Shh! Tu objetivo era cuidar y proteger de nuestra familia mi increíble Mew. Ahora siento que te amo mucho más.
-Y yo a ti mi hermoso Gulf. Te amo con toda mi alma y te juro que no nos van a quitar a Khalan. ¿Confías en mi?
-Confió y seguiré confiando por el resto de mi vida.
Los jóvenes se fundieron en un tierno beso. Un beso que les devolvió el aliento. Un simple roce de sus labios los hacía experimentar tantas emociones y sentimientos que no se podía explicar con simple palabras.
Más tranquilos decidieron cenar. Cuando Khalan y Chopper se encontraban dormidos pacíficamente los jóvenes decidieron amarse y disfrutarse como hacía tiempo no lo hacían.
Se desnudaron el uno al otro y se metieron en aquel lugar que tanto amaban, la ducha. Allí acariciaron sus tersos cuerpos. Se besaron apasionadamente, se saborearon y se dieron placer. Volvieron a unir sus cuerpos, volvieron a ser sólo uno. Mew ahogaba los gemidos de Gulf con besos y Gulf mordía sus labios a punto de enloquecer.
Se disfrutaron y amaron tanto que sintieron que el resto del mundo había desaparecido. Eran ellos dos, solo ellos y ese era su mágico momento.
Tras una agitada ducha continuaron en la cama dónde hicieron el amor hasta el cansancio.
A la mañana siguiente Win se encontraba en la academia cuando un sonriente Gulf apareció. El joven no tuvo que preguntar, ya se imaginaba a que se debía su reciente sonrisa. Seguro que siguió su consejo y habló con Mew. Estaba revisando unos papeles cuando recibió una llamada para que fuese de inmediato a uno de los gimnasios.
Cuando entró observó que el lugar se encontraba empapelado con notas de muchos colores. En todas ellas había algo escrito:
"Soy un imbécil" "Perdóname" "No soy nada sin mi molestia" y un largo etc.
Win miró las notas y cogió una de ellas. Cuando la tenía en su mano la estrujó y la tiró al suelo. Inmediatamente llamó a alguien para que limpiara aquel desorden. No podía creer que Bright hubiese hecho aquello sabiendo lo poco expresivo que es. Pero no le importó. Aquello no cambiaba lo que había pasado y todo el dolor que le había causado el moreno.
Volvió al despacho furioso cuando recibió una llamada:
-¿Sí?
-¿Me perdonarás?
-Te agradecería que no vuelvas a hacer algo así.
-¿No te gustó?
-Sinceramente no. Pero eso no es lo importante. No sigas perdiendo tu tiempo Bright.
-¿Crees que me daré por vencido mi pequeña molestia?
Win colgó el teléfono. No quería escuchar nada más. Había tomado una decisión.
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Ahora, mi suerte ha cambiado. 2ª PARTE
FanfictionCinco años han pasado desde que la vida de Gulf y Bright se cruzó con la de Mew y Win. Su etapa de estudiantes quedó atrás y ahora deberán afrontar los problemas de adultos que la vida le presenta. 2ª PARTE de "Maldita sea mi suerte"