STRONG

Capítulo 20. "Trust me"

Conduje rápido intentando alejarme cuanto antes de aquel lugar, esperaba por nuestro bien que no nos siquieran, había tenido suficiente por el día de hoy con aquel encuentro.

Cada vez que pisaba el acelerador el dolor corría por toda mi pierna, empezaba a dormirse, estaba perdiendo demasiada sangre, debía sacar la bala cuanto antes e intentar curar eso.

Nos alejabamos de la ciudad, debía ponernos a salvo por si todavía tenían ganas de pelea y decidían ir tras nosotros. No se oía ningún ruido excepto los sollozos de Helena, no sabía por qué demonios lloraba pero me estaba poniendo nervioso. La observé, no podía averiguar el más mínimo sentimiento en su rostro ya que sus dos pequeñas manos lo cubrían. Al parecer ya volvía a tener fuerza en sus extremidades o como mínimo algo de ella.

- ¿Hel? - abrí la boca por primera vez.

Intentó acallar sus sollozos en un intento fallido volviendo a llorar.

- Ya estás a salvo, no podrán hacerte nada, ¿vale? - dije en un intento de hacerla dejar de llorar y tranquilizarla.

No pareció funcionar, seguía con su estúpida manía de ponerme nervioso con sus repetidos sollozos. No podía soportar más aquella situación, quizás estaba demasiado alterado y cualquier cosa me ponía los nervios de punta pero no me quedó otra que parar el coche en la cuneta de la carretara, estabamos en una nacional en medio del bosque, no había tráfico. Salí del coche y comprendí que cada vez mi herida se ponía peor, ya no podía casi plantar el pie en el suelo, la observé por unos segundos, se había tornado de color morado, aquello no me gustaba nada. Hice caso omiso a la herida por unos minutos y me arrastré hasta abrir la puerta de Hel, me agaché para quedar a su altura y que no me doliera tanto la pierna.

- Ey, escúchame - dije en lo que retiraba las manos de su rostro, manteniéndolas entre las mías - mírame por favor - supliqué ya que no hacía más que evitarme intentando esconderse - por favor - repetí hasta logarar mi proposito.

La miré a los ojos, estaban completamente rojos de tanto llorar y no dejaba de sollozar. Me estaba rompiendo el corazón verla así, supongo que todos tenemos nuestra parte blanda en algún lugar de nuestro ser. Me podía desquiciar el que no parara de llorar, pero a la vez no quería verla así, me sentía mal a pesar de no tener por qué hacerlo, yo también estaba dolido por su culpa.

- Ya está, ya pasó - acaricié sus manos mientras ella asentía aguantando las ganas de estallar en llanto de nuevo - No sé que te habrán hecho esos bastardos pero ahora estás conmigo, se acabó, te llevaré a casa y estarás a salvo, ¿vale? - sus manos se escaparon de entre las mías y se avalanzó sobre mi cuerpo para abrazarme.

Me abrazaba con fuerza, su cabeza descansaba sobre mi hombro izquierdo, estalló en llanto de nuevo, podía notar sus lágrimas humedecer mi camiseta. La abracé con fuerza, necesitaba que de verdad se sintiera a salvo, no sabía qué le habían podido haber hecho ni qué había visto de todo lo sucedido aquella tarde, pero necesitaba que confiara en mí y dejara de llorar.

Hel's POV

Los brazos de Louis me arroparon. No sabía muy bien que era lo que acababa de pasar, no recordaba nada, tenía algún que otro flash, sabía que había estado secuestrada de eso no cabía duda, sabía que Louis me había sacado del lugar donde fuera que estubiera y sabía que había visto como disparaban a Peter y este caía desplomado y probablemente muerto al suelo.

Me sentía desolada, aturdida e impotente y lo único que sabía hacer era llorar. Me sentía débil, sentía como si mi cuerpo se fuera a romper en mil pedazos en cualquier momento y nadie estuviera allí para recogerlos y recomponerme.

- ¿Estás mejor? - escuché decir a Louis.

Me separé ligeramente de él secando mis lágrimas y asintiendo. Aquel abrazo me había calmado, no es que estuviera tranquila, pero lo agradecía.