🌌 s e i s 🌌

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Los movimientos bruscos que ejercían sobre él hizo que despertará de golpe, pero aún con los ojos entre cerrados.

- ¿Qué querés, Tae? - pregunto mientras se tallaba los ojos.

- Oh vamos, levántate. - siguió insistiendo.

- Ugh, está bien, TaeHyung. - dijo sentándose sobre la cama mientras estiraba los brazos y bostezaba - ¿Para que me despertaste tan temprano?

- Tu mamá, huele muy rico haya abajo, así que necesito que me acompañes, quiero desayunar, ya tengo hambre, Kook.

- ¿Enserio?

- Sí.

- Bien.

Ambos bajaron y en efecto olía delicioso, al llegar su madre los recibió bastante feliz, tomaron asiento y comenzaron a comer.

Por la mente de JungKook solo pasaba la idea de que JiMin llegará pronto, deseaba pasar algo de tiempo con él, pero también quería pasar tiempo con su amigo.

Una vez que terminaron subieron a darse una ducha, JungKook le prestó ropa a TaeHyung, como siempre, JungKook utilizó ropa oscura y TaeHyung decidió usar la clara.

Al estar vestidos, TaeHyung insistió a más no poder para ir al parque de diversiones con JungKook que al final termino aceptando.

- Vamos rápido, será un gran día, Kook.

- Sí, como digas.

Tomaron el autobús, al paso de veinte minutos ya estaban frente al parque, se adentraron y de manera rápida TaeHyung fue directo a los tickets, quería subirse a la montaña rusa.

- ¿A cual juego subiremos primero? - pregunto JungKook con emoción que al final TaeHyung le contagió.

- A la montaña rusa. - contestó con una sonrisa maliciosa.

- ¿Que? No, yo no me subiré a esa cosa.

- Oh por favor, no seas gallina, además ya compré los tickets.

- A veces te odio, Kim TaeHyung.

- Yo se que me adoras, JungKookie. - canturreo.

- Como sea vamos.

- ¡Sí!

Una vez que se subieron los nervios de JungKook aumentaron, realmente le aterraba un poco la idea de subirse a una cosa que está a varios metros de altura y va a gran velocidad, aunque tenía miedo, jamás se había subido a una, pero escuchar lo que los demás decían de esta era lo que lo desalentaban.

Al subirse y darse cuenta de que no era tan malo como parecía decidió volver a subirse, así lo hicieron, se subieron varias veces, unas ocho veces hasta que sintieron el estómago revuelto.

- Siento que voy a vomitar, Tae.

- Yo igual. - respondió riendo.

Se subieron a un par de juegos más, además de comprar unas golosinas, cerca de las dos de la tarde salieron del parque rumbo a la casa de JungKook.

En el camino dejo a TaeHyung en su casa para luego continuar caminando hasta su casa una vez que llegó miró con una pequeña sonrisa a JiMin que iba en camino a su casa con un par de libros y un cuaderno.

- ¡JiMin! - lo llamo - ¡Espera!

- JeongGuk, no quiero hablar con vos...

- Soy JungKook. - habló el chico acercándose - ¿Ibas a mí casa?

- Sí.

- Ah... Genial vamos.

Ambos chicos se adentraron en la casa de JungKook, una vez allí fueron a la habitación del chico, donde olía de manera extraña.

Los Jeon «KookMin» •COMPLETA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora