Capítulo 25

8.2K 530 8
                                    

-Sonrían.

Víctor nos toma una foto a mí... y a los otros tres vampiros que bebían mi sangre sin detenerse. Uno me mordia el cuello, otro el hombro y el último la pierna.

-Que linda... y tu mirada de sufrimiento le da un toque especial. - me muestra la foto.

Yo levanté mi brazo libre, saqué mis garras e intenté atacar a uno de ellos pero el que mordía mi cuello me detuvo y pasó a morder mi muñeca que agarró.

-¡Ngh... ! - me quejé.

-¿Aún lo intentas? Sabes que no conseguirás nada - dice Víctor mientras teclea en su teléfono -. Y... enviado.

¿Enviado? ¿Se lo envió a Erick... ?

-Tres, dos, uno... - sonríe ampliamente cuando su teléfono comenzaba a sonar y él atiende la llamada para luego ponerla en altavoz -Hola, estaba esperando tu llamada.

-Deja de estar jodiendo, Víctor ¡y déjala en paz!

Erick...

-Pero si nos estamos divirtiendo mucho... - responde Víctor -¿Quieres volver a hablar con ella?

Me coloca el celular en la oreja.

-E..Erick... ¡Ahg! - me interrumpen los tres vampiros al clavar sus colmillos aún más fuerte en, haciendo que el dolor se intensificara.

-Kia... Tienes que aguantar, ¿si? Te sacaré de allí, lo prometo... solo... espera por mí, ¿está bien?

-Y..Yo...

No contesté más ya que Víctor cuelga la llamada. Hice una mueca más pero hice mi mayor esfuerzo para golpear a uno, lo había conseguido al igual que conseguí darme vuelta luego de apartar a los otros dos. Me pegué a la pared, y respiré agitada. No traía puestas las cadenas ya que ellos sabían que igual estaba débil como para salir; me asusté cuando uno de los vampiros me agarra una pierna nuevamente y me muerde.

Otro, aparece tras de mi y clava sus colmillos en el hueco de mi cuello y el último yace lo mismo, estando frente a mí, y mordiendo mi pecho mientras agarra mis muñecas.

-Que lindo, el vampirito quiere a su Lobita... - su rostro cambia a una de asco y burla -. Que patético.

Ya ni siquiera pude gruñir o quejarme en voz alta, mis fuerzas desaparecían y yo comenzaba a ver borroso.

-Bien déjenla, aún la necesitamos viva para cuando nuestro invitado de honor llegue.

Los vampiros me sueltan y me dejan tirada en el suelo. Me intenté levantar pero apenas y podía moverme.

-M..Maldito... imbécil...

-¿Que dijiste? - se coloca una mano tras su oreja mientras sonríe con burla.

La ira ataca mi cuerpo y saqué fuerzas para mirarlo a los ojos y gritar.

-¡Eres un maldito estúpido! ¡Un imbécil! ¡Una mierda... ! - me golpea el rostro haciendo que mi cabeza se golpeara contra la pared.

-¡Silencio! - me agarra el cabello -Agradece que me he controlado porque o sino ya estarías muerta o quisas también...

Comenzó a tocar mi estómago y acarició hasta mi cuello subiendo y luego rasguñando un poco. Yo comencé a gruñir de nuevo e intenté a alejarme.

-Pero tengo planes para ti... - me vuelve a soltar, me coloca las cadenas y finalmente se va.

Yo miré las cadenas con ira, apreté mis manos en puños y comencé a estirarlas, solté quejidos mientras comenzaba a llorar por la impotencia y el dolor que me causaba la plata. Ni una se rompía.

Pero seguí intentando, intenté romperlas aunque comenzaba a salir sangre de mis muñecas, aún así no me importó y seguí estirando. Intente transformarme en mi loba pero me era inútil. Comence a respirar agitadamente y cai de rodillas al suelo.

-¡¿Por qué me tiene que pasar esto?!

Mis ojos desbordaron lágrimas sin parar, que caían por mis mejillas hasta el suelo, algunas caían en mis manos. Agaché la cabeza y sollocé, miré de nuevo a la única ventana con barrotes de la habitación y miré a la luna. Me levanté hasta arrodillarme como podía y la miré.

-¡¿A caso me odias?! - grité -¡¿Qué hice para ganarme tu desprecio?! ¡¿Por qué no simplemente me matas y acabas con todo esto... ?!

Apoyé mi frente en la pared y me deslicé hasta el suelo donde abrace mis rodillas y comencé a llorar más fuerte.

KIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora