Cap. 2: Noches de pesadilla

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§

*Narra Ethan*

Cuando estaba llegando a la salida no pude evitar ver que Jessica seguía sentada en la sala de espera así que decidí acercarme a ella...

Parecía algo desorientada, miraba a la nada y no se percató de mi presencia hasta que agité mi mano delante de su rostro haciéndola reaccionar. Pero no me miró, solo frunció el ceño, así que proseguí a hablarle.

—Señorita West ¿Qué hace todavía aquí? —. Se quedó callada por un momento cuando por fin dijo.

—Lo siento oficial —. Y volteó la mirada para verme la cara.

—Perdóname a mí, soy Ethan, Ethan Dolan—. Le dije, mientras extendía mi mano para estrecharla con la suya.

—Un gusto Ethan, soy Jessica—. Me dijo mientras estrechaba su mano.

Empezamos a hablar y me explicó que no se podía ir hasta que el detective Black la dejara irse. Pasaron alrededor de unos 20 minutos, y la verdad es que es una chica muy simpática y graciosa a pesar de estar pasando por uno de los peores momentos de su vida.

En eso llegó el detective interrumpiendo nuestra conversación.

—Señorita West, tengo que informarle que no puede abandonar el país hasta que se demuestre que no es la culpable y no podrá quedarse en su casa puesto que es la escena del crimen, si necesita buscar ropa y objetos de uso personal tendrá que ir acompañaba con el segundo al mando ya que yo tengo cosas más importantes que hacer.

—Y... ¿Ese sería? —. Pregunta ella.

—Creo que ese sería yo—. Le respondo interrumpiendo a Hunter. A lo que él asiente.

—Bueno, ya tengo que irme—. Nos informa para darse vuelta e irse por donde vino, pero no sin antes darle una mirada a Jessica de superioridad.

—¿Siempre es así o yo no le agrado mucho? —. Me pregunta Jessica al encontrarnos solos en la sala de espera.

—Cuando se trata de trabajo—, suspiré— sí, si suele ser así, pero en él fondo es buena persona— le di una sonrisa para calmar la incomodidad en el ambiente, a lo que ella me responde de la misma manera.

Se hizo el silencio, ninguno de nosotros emitía ningún tipo de comentario y me di cuenta de que volvía a centrar su vista en un punto, indicando que estaba pensando en algo y que ese algo le preocupaba.

—¿Estas bien? —. Le pregunto a lo que ella solo asiente— ¿En qué piensas?

Suspiró y volvió su vista hacia mi — Pensaba en donde pasaría la noche—. Me responde con desanimo.

—¿No te quedarías con tu madre? La señora Crystal

—Ella no es mi madre, además no creo que quiera verme. Cree que fue mi culpa.

—Pero ahora estas bajo su cuidado y quiera o no, te tiene que cuidar.

—Salió del país a hacer no sé qué —. Dijo con un tono frío — Y no tengo familia en este país.

Lo que Jessica me contaba era algo preocupante, aunque no la conocía de nada no podía dejarla tirada en la calle puesto que al ser las 11 de la noche la mayoría de los hoteles no aceptan a personas después de las 9pm y el hotel más cercano queda a 1 hora de aquí, así que me atreví a ofrecerle mi casa para que pasara la noche, inicialmente se rehusó, pero logre convencerla.

Se lo que están pensando me he de volver loco al invitar a una completa extraña y sospechosa número uno de un homicidio a mi casa, pero cada vez que la veo me transmite que no es esa clase de persona, que no sería capaz de matar o herir a alguien y no cargaría con la culpa de si llegase a dormir en la calle y la secuestren o algo por el estilo, además si llega a intentar herirme se defenderme así que no creo que pase nada.

Jessica West [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora