Relatos Yuri ( ꈍᴗꈍ)

[ Reencuentro pt 4 ] Mei y Yuzu

2 días después

Yuzu

Mayuri se ve muy tierna cuando duerme.
No me había percatado de ese hecho en las pocas veces que ella se ha quedado a dormir conmigo.
Su expresión es de tranquilidad absoluta.
Hace solo una hora me dijo que estaba feliz de que pasaría la noche conmigo después de un día agotador en su segundo empleo, y se durmió de inmediato mientras me sonreía con amor.

Que terrible situación...

Me siento nostálgica al mirarla en este momento, quizás por la enorme culpa que estoy sintiendo en mi interior desde que volví al departamento aquel día.

No debí haber besado a Mei...

Es un hecho. Estoy saliendo con Mayuri.
Aún así mi corazón no entendió de razones y crucé la línea.
Engañé a Mayuri y mi confusión mental es muchísimo peor de lo que era.

No me he atrevido a buscar a Mei aunque ganas no me han faltado.
Quisiera que habláramos de lo sucedido, pero por más que lo pienso no sé cómo afrontar lo que pasó.

Hay muchísimas cosas que quisiera decirle y muchísimas más que aclarar, pero no quiero que mi resentimiento y confusión lo empeore todo y termine diciendo algo que no debería.
No quisiera que hubiera otro malentendido cómo el de esa mañana en que pensó que yo la golpearía porque según ella se lo merece.

Oh Mei...

Me levanto de la cama con cuidado, es
una acción que hago sin pensar, porque Mei está en mi mente y eso me nubla los pensamientos coherentes.

En mi armario encuentro lo que estoy buscando: una caja pequeña de madera.
Me siento en mi escritorio y la abro con cuidado, como si temiera que se fuera a romper.
Dentro hay muchos papeles y recortes de revistas.
Los levanto con cuidado, mientras en el fondo lo diviso: el pequeño anillo que hace juego con el de Mei.
Aún está unido a la cadena, convirtiéndolo en un collar.

Ahí lo había guardado después de esa noche fatídica.
No soportaba verlo, pero tampoco quería deshacerme de él porque era muy valioso aunque guardara ése recuerdo doloroso.

Desde ésa noche no lo había vuelto a ver.
El sostenerlo en mi mano se siente muy extraño, es nostálgico y algo deprimente.

Está frío... Pero extrañamente me transmite calidez...

Lo aprieto entre mis dedos mientras recuerdo que Mei llevaba el suyo esa mañana.
Según ella dijo que siempre lo tenía consigo y que era su bien más preciado.
Eso es algo que no tengo forma de confirmar, pero simplemente no puedo dejar de pensar en su tono de voz al decirlo, sonaba muy sincero y muy dulce.

Talvez era cierto...

- ¿Yuzu?

Guardo el anillo de vuelta en la caja y me volteo hacia la cama.
Mayuri está viéndome con expresión confundida mientras bosteza.

- ¡Oh! ¿Te desperté?
- No en realidad... ¿Estás bien?
- ¿Porqué lo preguntas?
- Desde aquí parece que estás llorando.

Subo mi mano derecha a mi rostro, y en efecto, puedo sentir una lágrima derramarse por mi mejilla.
Mis sentimientos me están sobrepasando.

- Estoy bien - Distraídamente limpio la lágrima.
Agarro la cajita, y me levanto del escritorio para llevarla de vuelta al armario.

Regreso a la cama, dónde Mayuri toma mi mano de inmediato y se acerca a mí para darme un beso en la mejilla.
Por su expresión sé que intuye que algo no anda bien conmigo.