EN EL CERRO DE CUATRO CARAS

CAPÍTULO VIII . La liberación de Nancy Ellis

   En la oficina del profesor Elías García, Guillermo era entrevistado por el jefe de seguridad de la Sociedad Secreta de Cuauhtémoc.

- Le voy a mostrar fotos de helicópteros para que me diga si alguno se parece al que usted vio.

Esquivel colocó su computadora portátil sobre el escritorio.

- ¡Este! –Señaló Guillermo-

Esquivel pasó las diminutas hojas de su libreta hacia adelante y hacia atrás, se detuvo en una y comenzó a leer en voz alta.

"Se alejó volando rumbo a Perote hasta perderse de vista".

Después compartió sus reflexiones.

- Pero cuando llegó vino del Suroeste, no del Oeste que es en donde está el Cofre... entonces lo más seguro es que volaron de México directo a un helipuerto que está antes de llegar a Xalapa y por eso llegaron de ese rumbo. ¿Pudo ver la matrícula?

Guillermo movió la cabeza negando y dijo apretando los dientes.

- No, traté pero no vi ningún número; se supone que debería estar pintada en la barriga ¿no?

- Sí, el que no lo hubiera tenido visible me confirma que se trató de un equipo camuflajeado.

Por favor dígame el número telefónico de la señorita.

Guillermo buscó en su celular y dictó el número solicitado.

Haciendo caso omiso de las escrutadoras miradas del profesor Elías y de Guillermo, Esquivel echó mano a su radio intercomunicador para hablar al centro de logística que estaba un piso abajo, en donde dos empeñosos cibernautas tecleaban ininterrumpidamente sentados frente a un enorme panel de pantallas que estaba adosado a la pared mostrando variados panoramas, gráficas y mapas.

- Rastreen este número –repitió los dígitos recitados por Guillermo-, me avisan en cuanto tengan algo.

Les tengo otra tarea, necesito saber a quién pertenece un helicóptero Bell 204 o 205 que operó hoy en el helipuerto de Banderilla.

Esquivel enfundó su teléfono y se dirigió al profesor ignorando a Guillermo.

- Todo indica que fue una operación dirigida y posiblemente realizada por Spinosa, él tiene un helicóptero así a su servicio.

En cuanto me confirmen la matrícula del que bajó en Banderilla veremos si su plan de vuelo fue reportado a la comandancia del aeropuerto de la Ciudad de México; aunque sería excepcional que Spinosa dejara rastro de lo que hace.

El profesor García recibió el reporte con naturalidad, mientras Guillermo se hacía cruces tratando de entender que es lo que pasaba a su derredor.

¿Quiénes eran en realidad García y Esquivel?

¿Quién es Espinosa? –Así escuchó-

En esas cavilaciones estaba cuando el timbre de su teléfono lo hizo salirse abruptamente de ellas.

Al ver la pantalla dijo algo que sacudió a sus acompañantes.

- ¡Es Nancy!

Esquivel salió corriendo hacia su centro de operaciones.

El profesor García sintió el impulso de ponerse de pie para seguirlo, pero decidió no dejar solo a Guillermo en su oficina y canceló su intención.

Guillermo contestó abriendo el altavoz.

- ¡Güerita! ¿Cómo estás?

- Estoy bien y caminando en libertad sobre Paseo de la Reforma, ¿cómo estás tú?