"Una niña de ojos esmeralda, un niño con cabello como alas de cuervo. Que cuidaban el uno del otro. Me cuidabas, me enseñaste a pelear, a tener el temple del acero y buscar una sonrisa para el mundo. Limpie tus lagrimas, curaste mis raspones, te prometí que siempre estaría contigo... ¿Por que no recuerdas esta historia?" -Emi
-¿Qué te pasa fenómeno? ¿Asustado? -Decía Hotaru Tetsuhiko empujando a Aisawa en un callejón, Emi iba a su lugar de reunión habitual sosteniendo su bolso con sus respectivos almuerzos y su camara, estaba ansiosa por entrenar junto al Niño Neko. Pero vio como esos tontos tenían acorralado a este, eran niños mayores, más que Aisawa, y sin duda nada amigables.
Emi se mantuvo atrás sigilosa, o lo más sigilosa que podía, que era poco según Aisawa.
-Yo no quiero problemas... déjenme en paz... -Dijo con voz seria. Uno de los mayores le dio un golpecito en el hombro, Aisawa hizo una mueca de asco, odiaba ser tocado.
-No decías eso el otro día Mocoso, ¿Qué pasa? ¿Querías hacerte el héroe? -Hotaru lo empujó, haciéndolo chocar con la pared del callejón, Emi apretó sus pequeños puños- ¿Ya no eres tan valiente o sí? Grábate esto fenómeno, la razón por la que estas solo es porque eres una bazofia, con un Quirk inservible, tú nunca serás un héroe, tendrás suerte si llegas a ser un villano...
En su vida Emi había estado tan enojada, bueno, no al menos desde el coraje que tenía atorado desde que Scar mató a Mufasa. Pero Aisawa en vez de bajar la cabeza, soltó una corta y siniestra carcajada, acompañada por una de sus insolentes sonrisas.
-Bueno, al menos sé que seré algo... en cambio tu seguramente seguirás siendo la misma bola de excremento que siempre has sido Tetsuhiko -El chico, rojo de ira arremetió contra Shota, fue cuando cayó riéndose, junto a sus compinches, Aisawa levantó la vista encontrándose con la suya.
Antes de que pudieran hacer algo en contra de Emi borró sus particularidades.
-Gracias chicos, no fue un placer estar con ustedes esta tarde, lo sé lo sé, soy divertidísima... -Hizo una reverencia cómica, sacando su pañoleta, tomó a Aisawa del brazo halando de él- Me encantaría quedarme pero quiero vivir. Nos retiramos... ¡Hasta la próxima, bolas de excremento!
-¡Eres un chiste mocosa! JAJAJAJAJA ¡Me las pagaras! -Gritó, corrieron tan rápido como pudieron, Aisawa la arrastró la mitad del camino por sus regordetas piernas, llegando a su escondite entre la maleza, se tiraron al suelo ambos jadeando, el corazón le latía con mucha fuerza, dirigió su vista al pelinegro, este también la veía...
La boca de Emi se torció en una sonrisa al mismo tiempo que la de él, cayeron al suelo, riendo a carcajadas hasta que sus estómagos dolieron.
-¡LES JAJAJAJA DIJISTE JAJAJAJA PPFFF BOLA DE EXCREMENTOOO NIÑO NEKO JAJAJAJ!
-¿Y tú? JAJAJAJAJA, creo... que... cada vez te tolero un poco más... JAJAJAJAJA -Emi se volteó, observando como reía, le gustaba la forma en que el reía, era muy lindo. Aisawa-san era el único niño lindo que ella conocía. Y su risa era la más bonita de todas.
-Hacemos buen equipo Sempai... -Ella dijo. El niño Neko paro de reír, frotándose los ojos, una sonrisa rara en su rostro al ladear la cabeza, gesto que ella imitó por inercia.
-Si... eso creo Fukukado.
ESTÁS LEYENDO
Feelings and memories
Fiksi PenggemarEmi Fukukado había vivido siempre con el recuerdo que alimentaba su sonrisa, con el sueño del hombre que, si, amaba. Aisawa Shota no estaba nada interesado en los sentimientos, mucho menos en volver la vista al pasado. ¿Que sucede cuando los sueños...
