MI ULTIMA LAGRIMA - Pausada-

capitulo 21

POV Daniela

Miraba el techo de mi cuarto anhelando que pasara el tiempo y que amaneciera... sumando otra noche que simplemente no podía dormir, dando vueltas en la cama intentando encontrar el lado correcto para poder por fin dar un descanso a los pensamientos que no paraban, por más que me esforzaba por concentrarme, no podía, el subconsciente es quien te manda a ti, así que simplemente a veces decidía salir a trotar y llegar hasta donde quedaba la casa de poche, luego regresaba de nuevo a casa, tomaba un baño dejando salir todo el sudor, en la ducha me volvía a perder en mis pensamientos, pero esos pensamientos si me agradaban... recordaba aquella chica cuando la conocí, cuando fui por ella al bar, recordaba su voz, cuando nos besamos, cuando dormimos juntas, cuando me jure cuidarla, cuando su sonrisa y sus ojos se iluminaban al verme, cuando en aquel lago me acobarde por su presencia, cuando me arrepentí y fui a decirle todo lo que sentía por ella, cuando nos volvimos a besar y nos dormimos, cuando al día siguiente me desperté por sus besos en todo mi rostro...

La extrañaba, y no sé si eso era bueno o malo, simplemente no podía negarlo, un día después de que se fuera de viaje me jure que tal vez eso era una señal del universo para que no me aferrara tanto a ella, y no me doliera el día que me fuera para siempre de Colombia, pero vamos ¿desde cuándo me importa mis sentimientos? A mí no me importaba, quería estar con ella las semanas que me faltaban en este país, y no sé si a ella le dolerá el día que marche, pero tratare que en su mente y en su corazón quede lo mejor que he hecho en mi vida, con mis buenos actos y dando lo mejor para ser su mejor compañía.

Después de unos minutos Salí de la ducha envuelta en una toalla, camine hasta mi armario y me detuve un momento en el espejo admirando mi reflejo... pase mis manos por todo mi abdomen, admirándolo, en dos semanas había tenido cambios en mi cuerpo, me encontraba un poco más delgada, pero había algo nuevo en mi abdomen, y era que se encontraba perfectamente marcado, más de lo habitual, y tal vez por mi rutina tan ardua de ejercicios que empezaban desde la madrugada... a continuación me fije en mi rostro, mi piel estaba perfecta, pero mis ojeras se marcaban más de lo habitual... deje de admirarme y me concentre en que ropa me pondría hoy, busque en mis cajones y luego de intentar combinar todo y por fin lograrlo Salí de mi habitación, baje a la cocina y me encontré solo con la empleada de servicio, le pedí que me sirviera el desayuno y ella muy amablemente lo hizo, luego de desayunar Salí a la cochera de mi casa, elegí una de mis camionetas preferidas y me dirigí a mi destino, una medio sonrisa se dibujó en mi rostro al saber que después de dos semanas la volvería a ver y sé que muy seguramente ella ya me estaría esperando en nuestro sitio favorito.

Una vez llegue al lugar aparque la camioneta a la orilla de la carretera, baje, puse los seguros y emprendí camino hasta adentrarme al bosque, seguí el camino por el cual conocía muy bien y mi corazón se aceleraba cada vez que estaba más cerca del lago, me reprendía por que seguía enfocada en que no debo encariñarme tanto, pero esos pensamientos se fueron por la borda apenas vi su silueta... estaba de espaldas contemplando la gran vista, camine cuidadosamente para quedar más cerca de ella sin que se diera cuenta. No me cansaría de mirarla, se le veía impaciente, cada dos segundos miraba su reloj, así que decidí terminar con su frustración, camine un poco más hasta quedar a dos pasos de ella, y la envolví entre mis brazos

-¿A quién esperas con tantas ansias? - dio vuelta sobre sus talones y se aferró aún más a mi cuerpo.

- A ti- susurro - no sabes cuánto te extrañe - añadió entre sollozos

Sentí una sensación extraña pero agradable que envolvía mi cuerpo, me sentía completa, y ciertamente eso se lo debía a ella.

Agarre sus mejillas y limpie sus lágrimas -No llores cariño ya estoy contigo- dije mientras le daba besos por toda su cara.

-Te extrañe- pronuncio, y de un inesperado salto se trepo a mi cintura.

Rápidamente reafirme mi agarre en sus glúteos para estar más segura.

-¿Te gusta sostenerme de mis glúteos verdad?- pregunto divertidamente

- No me quejo, son muy lindos- respondí siguiendo su juego.

Dio una gran carcajada y luego se inclinó un poco más... con las yemas de sus dedos acaricio mi rostro, instintivamente cerré mis ojos disfrutando de sus caricias.

-Te extrañe más de lo que imagine y más de lo que imaginas amor-concluyo mientras nuestras narices se rosaban

Termine con la poca distancia que teníamos y unimos nuestros labios... era un beso en donde nos demostramos cuanto nos extrañamos, cada toque suyo era glorioso, besaba como los dioses, y hasta ese momento me di de cuenta que esa chica me gustaba más de lo que me permitía, que la extrañaba más de lo que había extrañado a alguien, y que ese beso confirmaba que ella ya estaba muy dentro de mi corazón

Después de unos segundos más rompimos el beso por falta de aire, me dio por ultimo un pico y bajo de mi regazo. Se estiro un poco y luego empezó a quitarse su ropa.

¿- Que haces-? Pregunte un poco confundida.

-No es lo que estás pensando, solo voy a tomar un baño- dijo mientras se metía de clavado al lago.

Creo que verla con aquel traje de baño perfectamente alineado a su cuerpo me había dejado en otro mundo, aun recordaba la forma en la que se quitaba su otra ropa me había dejado anonada.

¿Te vas a meter? - Pronuncio - o necesitas más tiempo para procesar lo que vistes- añadió-

Negué rápidamente y empecé a desvestirme, vi como sus ojos se enfocaban en todos mis movimientos, no traía un traje de baño así que decidí entrar en mi ropa interior, retire lentamente mi pantalón, a continuación seguí con mi camiseta, una vez lista doble mi ropa y la deje al lado delas cosas de poche, recogí mi pelo en una coleta, dirigí mi mirada a aquella chica que parecía perdida ante mis encantos

-Trata de disimular un poco lo mucho que te encanto- dije, mientras me adentraba poco a poco al lago, estaba algo fría el agua y eso me hizo suspirar un par de veces.

- Muy pocas veces se ve a una británica tan linda como tú - respondió restándole importancia-

-Buen punto, aunque también hay que sumarle que además de ser una bella británica también estoy saliendo contigo, yo de ti me sentiría muy afortunada- concluí mientras llegaba a su lado.

-Me siento afortunada de tenerte, aunque no me gusta cuando se te sube mucho el ego como hoy- dijo mientras nuevamente se aferraba en mis brazos.

Di una pequeña sonrisa y la sostuve nuevamente, esta vez de su cintura ya que en el agua no existía su peso, ella en un ágil movimiento enredo sus piernas en mi cintura quedando como la posición anterior, se recostó sobre mi pecho y empezó a dar pequeños besos por toda mi clavícula, llenándome de una paz infinita

-Estas muy guapa- susurro mientras me miraba con sus bellos ojos verdes

- Tú lo eres aún mas - respondí mientras seguía perdida en sus bellos ojos

- ¿Cómo te fue en el viaje?- pregunte.

- Nada interesante, mi padre se la paso todo el tiempo en reuniónes. -

- ¿ Osea que tu padre te obligo a ir solo para dejarte sola mientras él se marchaba a sus reuniones? - pregunte confundida.

- No, osea si, pero el caso fue que tuve que viajar con el por qué teniamos un evento familiar- contesto- además no fue tan malo, conocí a una nueva amiga- añadio en su mirada se vio la ilusión que le hizo haberse acordado de su amiga, solo sonríe y bese sus mejillas, aunque sentía algo extraño en mi pecho era mejor que no se aferrara tanto ami...

- Estás más delgada, y tienes más ojeras, dime qué te pasa- en sus ojos se veía la evidente preocupación.

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