Colapso... [TODODEKU]

Nadie

Nadie sabe... No necesito decirle a alguien y aunque quisiera él se encargará de hacer imposible. El abuso se ha estado aumentando con el tiempo, siento que en algún momento me voy a desmayar, me siento cada vez más cansado. Las miradas que recibo al caminar me vuelven loco, es como si él me estuviera mirando... 

En los entrenamientos me cuesta respirar y moverme, en las clases no puedo concentrarme, cuando alguien me habla o me toca me tenso. Sin embargo nadie se da cuenta, nadie se me acerca y me pregunta, nadie se da cuenta, nadie logra ver esto...

Los días en casa son los peores, debo de fingir ante mis hermanos, las personas que más amo y puedo confiar. Debo de fingir de que él cambió, que ya no es como antes y nos llevamos bien, debo de fingir que siempre estoy bien. 

...

El entrenamiento había comenzado, Eijiro y Todoroki estaban juntos en una pelea en el ambiente de ciudad. El pelirrojo intentaba golpear al bicolor, pero este se cubría con su hielo y fuego. El del quirk de endurecimiento, en un momento, logró golpear con su pierna izquierda a su oponente, este retrocedió doblándose de dolor, pero sin mostrar expresión alguna. Kirishima, con su puño derecho endurecido, golpeo la cara del heterocromático.

Shouto pudo visualizar a su padre por unos breves momentos, entonces bajo su guardia dejándose golpear, Eijiro creyó que por fin podía dar un poco más de pelea y empezó a aporrearlo. El bicolor seguía sin hacer algún gesto. Por eso, su contrincante lo golpeaba cada vez más fuerte, hasta que el chico de la cicatriz se dio cuenta de su entorno. No estaba en su casa entrenando con su padre, sino estaba en clases con su compañero. Un ataque, más fuerte que los otros, se dirigía a él, con todo creó hielo, deteniendo por completo el golpe de Kirishima, mas se había excedido...

— ¡Todobro! — escuchaba a lo lejos la voz del pelirrojo — No, no, no... Por favor no.

El mencionado estaba temblando en el suelo completamente congelado. El de dientes de tiburón estaba aterrado, entonces lo único que se le ocurrió fue quitarse el chal que traía en la cintura y envolver el frío cuerpo. Una vez hecho lo acercó él para otorgarle más calor. El chico de cabello rojo no sabía que más hacer, le asustaba pensar en que su amigo pudiera morir. Al cabo de unos minutos llego Aizawa.

— ¡Kirishima! — gritó a lo lejos — ¿Cómo está? 

A pesar de su tono cansado y desinteresado, el maestro estaba muy preocupado por el bicolor, después de todo el chico sabía como controlar a la perfección su hielo, esta sería la primera vez que se descontrola. Algo estaba mal, ambos lo sabían, el de la cicatriz ya podía manejar su temperatura corporal sin problemas, entonces ¿qué fue lo que pasó?

— M-m-muy mal, sensei — decía el estudiante al borde del llanto — E-e-esta completamente congelado.

Shouto temblaba descontroladamente, murmuraba cosas incoherentes, su respiración era cada vez menos profunda y pulso era débil, todos eran síntomas de hipotermia. Aizawa frunció el ceño molesto con sigo mismo por no haberse dado cuenta de las otras evidencias, desde hace un buen rato Todoroki estaba descoordinado y se movía muy lento.

— Ayúdame — fue lo único que dijo para después darse la vuelta.

El pelirrojo entendió entonces, quería que le ayudara a cargar a Todoroki. Con mucho cuidado lo colocó en la espalda de su maestro, este se paro y rápidamente se dirigió a la enfermería, el de dientes de tiburón lo siguió. Este se encargó de abrir la puerta, con estrépito se estrello, sobresaltando a Recovery girl.

— ¿¡Qué diablos sucede!? — gritó la mujer.

— Dis... Disculpenos... Re...Recovery Girl... — dijo jadeante Eijiro — Pe... Pero... Es una emergencia...