Una confesión

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Jackson y yo estamos en la misma mesa de siempre en el almuerzo pero algo cambia... Monic está ahí.

—Y entonces me dejo caer por las escaleras y estuve inconsciente por dos horas.... horrible pero mi mamá me dio a oler alcohol y por fin desperté.

—Eso fue terrible —le dice Jackson.

—Eso fue terrible —le dice Jackson

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— ¡Ay no, fue divertido!

Él la mira sorprendido.

—Iré por algo de beber ¿Quieres algo? —le pregunta a ella.

—No, ¿Tú Vale?

—Am no.

Él me sonríe y se va dejándonos solas.

—Espero no te incomode que este aquí, verás pelee con Tina y eso me tiene triste, Jackson me hace reír mucho.

—No es problema Monic, tú también haces reír a Jackson —miento—. Me ha dicho grandes cosas de ti.

Miento más.

— ¿Enserio? —Pregunta con emoción—. Crees ¿Crees que le guste?

—Claro... pero a él le gusta ir lento así que.

—Uy —su celular suena y lo ve de inmediato—. Debo irme a ensayar para la escuadra de porristas, dile a Jackson que nos vemos después ¿Si?

Digo que si luego ella sale corriendo, a los pocos segundos Jackson regresa.

— ¿Donde esta Monic?

—Fue a prostituirse...  es decir a ensayar para las porristas.

—Muy graciosa.

—A ella le gustas

—Es una pena.

—Ella te gusta.

—No.

—Vamos admítelo

—No Val, no es así.

Luce molesto con el tema así que no insisto.

— ¿Iremos comprar el regalo para Jessica hoy?

Había olvidado que su cumpleaños era pronto y que había prometido acompañar a Jackson por algo para ella.

— ¿Podría ser mañana?

— ¿Tienes algo que hacer? —pregunta confundido.

—Si, algo así.

                                                                                             ➼

Mi papá estará afuera por la noche por una cena por su nuevo libro. No aceptó mucho que alguien viniera menos un chico pero se tranquiliza cuando le miento diciendo que Jackson también vendrá. Me voy a la sala de estar a esperar a que sean las ocho. Ya he visto por la ventana el auto de Tina está aparcado y hay varias personas dentro. Seguro sus patéticas amigas. Son las ocho diez cuando él llega. Lo llevo hasta la sala de estar. Es extraño pero me siento como una tonta y muy nerviosa.

La apuesta © ➼ Editando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora