RESILIENCIA (Blanca Suárez)

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[Narra Edu]

Estaba en casa cuando el teléfono de mi hermana sonó, ella estaba cocinando así que fui yo quien atendió la llamada, dándome la peor de las noticias, y el porque Deniss no estaba en mi posesión , ella estaba inconsciente en el hospital, fui a la cocina y escuchaba el sonido de la campana aspirando los vapores de las ollas y a Dulce feliz tatareando una canción mientras cortaba la verdura oyendo el golpe del cuchillo en la tabla de cortar de madera-Dulce...-ella siguió al mismo ritmo, lamente haberla lastimado antes con mis golpes de rabia pero se le pasaría tarde o temprano, ella ignoraba mi presencia y me acerque a ella poniéndome detrás- Dulce...-Seguía ignorando mi presencia, pero yo no tenia la culpa de lastimarla, yo no quería lastimarla, era mi hermana y no se merecía ese golpe, pero estaba lleno de ira y cólera cuando se cruzó por mi camino, el plan falló porque Yavé se interpuso, el golpe no era dirigido a ella, era para Deniss, esa si que se merecía cada uno de los golpes desde que me había robado el corazón. Puse mi mano en su hombro y dejo de cortar la verdura de golpe, todavía estando ella girada podía notar como el cuchillo que estaba en el aire se movía a temblores sobre su mano que lo agarraba con fuerza-Deniss esta en el Hospital- soltó el cuchillo haciendo ruido al caer en la encimera-¿y que quieres que vayamos a verla?- dijo gritando dirigiéndose a la puerta cogiendo el abrigo de su perchero -pues acabemos con esto de una puta vez- y yo salí detrás de ella. El viaje en el coche fue silencioso, era un silencio incomodo, yo no paraba de mirarla como conducía pero ella seguía ignorando mi presencia, aparcamos en el parking del hospital y en silencio subimos las escaleras hasta llegar a la calle y encontrar al padre de Deniss fumando un cigarrillo nervioso, sin duda si lo viera su mujer ahora mismo fumando ese cigarrillo estaría durmiendo en el sofá una semana por lo menos -Adam-dijo dulce dándole un abrazo -Sr.Waters- dije yo con las manos en cada uno de los bolsillos de mi chaqueta, el solamente me miro y lanzó una sonrisa forzada, mi hermana deslizo el abrazo, me quede asombrado, a mi hermana se le da bien ese estúpido papel de niña buena  -Dicen los médicos que sufrió un fuerte shock emocional, que estaba bajo demasiada presión hace días y agotada psicologicamente y que al estallarle todo se desmayó, dicen que dormirá unas cuantas horas y que luego le aran preguntas para comprobar si sus recuerdos siguen hay o...a perdido mas, dicen que puede haber una posibilidad entre mil de que recupere la memoria y un 70% de posibilidades de que pierda mas recuerdos- dijo el señor watters con ojos aguados, rezaré para que los pierda-Seguro que sale bien- le dijo mi hermana intentando consolar a Adam.

Entramos al hospital y íbamos por los pasillos detrás de Adam, estaba todo tan en silencio que solo se escuchaban los pasos de nuestros zapatos chocando contra el suelo que parecía ser lo único que inundaba los pasillos silenciosos de ladrillo brillante y viejo. Adam que iba por delante nuestra entro en una de las puertas, poco después entro mi hermana....

[Narra Dul]

Detrás de mi iba Edu pero se quedo petrificado en la puerta a ver la imagen de Yavé sujetándole la mano y dándole un beso en la frente, la rabia corrió por mi cuerpo  desee ser yo la de la camilla solo para sentir sus labios, mi hermano, si ese ser tan repugnante se puede llamar así, apretó sus manos de furia y su ceño se arrugó completamente dejando a ver un rostro oscuro, el verdadero Eduardo Davis, pero no, el no iba a montar una escena en un hospital, Yavé solo le mandaba dagas con su mirada con la mas fría expresión, siguiéndolo con la mirada hasta que se sentó en una silla, ni siquiera se acercó a ver a Deniss, ni la miró, ni tristeza, ni preocupación, nada, absolutamente nada, así era mi hermano, un gran hijo de puta que solo pensaba en el mismo que se había encaprichado en una niñita, dos tíos peleándose por Deniss, es estúpido. Adam se puso a un lado de la camilla dándole la mano a su hija y Yavé me presto su sitio y ahora era yo la que le daba la mano al otro lado de la camilla, Yavé se sentó en una butaca azul marina que había detrás mía en una esquina mientras que Edu le mandaba dagas con la mirada desde la otra butaca en la otra esquina aunque Yavé tampoco se echaba atrás con las miraditas asesinas-Dul acompáñame a la cafetería, necesito una cocacola- dijo adam -o un refresco de esos del bote negro, con una M que parece un arañazo de 3 garras, ¿Sabes lo que quiero decir?- dijo con voz cansada y débil que incluso parecía graciosa, el señor Adam siempre fue gracioso, a diferencia de la madre de Deniss, me da pena por el, es el único que aguanto,  el levanto su mano en forma de garra y hizo un leve rugido de león que nos hizo reír a los 4 de la sala -Monster- dice Yavé con una risa entre dientes, es precioso, el señor Adam se quedo parado pensando-Si, eso también, y quizás un kinder bueno y una hamburguesa con extra de queso ¿Por aquí hay un Mc donals cerca?- dijo en un hilo de voz, yo lo cogí de los hombros y lo llevé fuera mientras no paraba de decir comidas, imagino que seria una manera de evadirse un poco de todo esto, así que salimos de la habitación del hospital dejando a Edu y Yavé solos en la misma habitación que Deniss.

[Narra Yavé]

Edu y yo nos quedamos solos en la habitación, todo estaba en silencio, un silencio que me ponía nervioso, solo se escuchaba el sonido de las varillas del reloj dando vueltas aunque de vez en cuando se escuchaban por el pasillo los zapatos de goma de las enfermeras cada vez que daban un paso y joder, necesitaba un cigarrillo, tanto silencio me ponía de los nervios y tener sentado a mi lado al gilipollas del novio de Deniss tampoco ayudaba mucho. Estaba tan nervioso que mi pie daba ligeros golpecitos constantes en el suelo de la habitación mientras que acariciaba mi barba -Para de hacer esa mierda con el pie me molesta- dijo edu, lo que me hizo parar -para de respirar me pones nervioso- dije en sarcasmo y el rió, ¿Que cojones le pasa a este subnormal que no para de reírse?, puse mi mirada en el y su risa casi de carcajada fue disminuyendo -¿Sabes que hay una flor que dicen que es la mas bonita del mundo? Y mas singular también, no por su belleza, es porque esa flor solo puede vivir un día

-¿Y esa cursilada de mierda que quiere decir?¿Que Deniss es como es flor?- el frunció el ceño y apretó sus manos con fuerza en los reposabrazos del asiento, me alegraría si me pegara aquí mismo así se podría quedar ingresado por un buen tiempo y alejado de Deniss -Te estoy hablando de mi- dijo por fin, yo reí sarcásticamente -¿Que eres un gay que necesita sentirse hombre?- el desaflojó el agarre del asiento y empezó a respirar intentando calmarse.
-Después de 4 años Deniss dejo de tenerme miedo, volvió a quererme, quería hacer las cosas bien con ella, empezar desde cero, quererla como el primer día y todo iba bien ¿Sabes? Hasta que te volvió a ver a ti, el corazón de Deniss me ha pertenecido apenas una semana. 4 años, 4 años tardé en que volviera a ser mía otra vez y a ti....a ti solo te ha hecho falta un segundo para destrozar todo- sus ojos estaban encharcados, quizás hasta le repugnaba ser como es, ser una mierda de persona. El estaba equivocado el corazón de ella nunca le había pertenecido, ni siquiera sabia si me pertenecía a mi y eso, eso me frustraba, estar confuso, eso era una maldita mierda, no saber que quieres, tener miedo a aceptar la realidad, exactamente era a lo que yo tenia miedo, a aceptar lo coherente y no era por miedo a equivocarme, esa mierda me la traía floja, te equivocas pues aprendes, pero ese no era el problema, a lo que tenia miedo era ha hacerle daño a ella, yo no soy bueno para nadie-¿Sabes una cosa Eduardo?-dije por fin captando toda su atención-Yo no sé si puedo hacer feliz a Deniss y las veces que lo he intentado he fracasado, y si te digo la verdad seguramente lo mejor para ella es que yo me quite del medio, dejar que sea feliz con quien sea, pero luego te miro a ti y no puedo dejar que se joda la vida por un cabrón de sangre fría como tu, y ojala pudiera de verdad, ojala ella no me importara y solo fuera otra mas- no me puedo creer que este apunto de decirle esta cursilada justo a el - pero no puedo, no puedo dejarla escapar porque estoy enamorado de ella hasta las trancas, porque soy demasiado egoísta, no puedo.- Edu quedo en silencio y miró a Deniss tumbada en la camilla mientras pellizcaba su labio con sus dedos, se echó hacia delante y apoyo sus codos en sus rodillas mientras seguía admirando a Deniss -Pues estas jodido, porque ella me pertenece y voy ha hacer todo lo que este en mi mano para alejarla de ti- se levantó de la silla -La venganza no te va a ayudar a recuperarla- el dirigió la mirada hacia mi-Puede ser, pero prefiero tenerla físicamente a no volverla a tener de ninguna de las formas- el no la iba a conseguir, no lo iba a dejar -La mejor venganza es el olvido- dije yo mientras el se dirigía hacia la puerta haciéndolo parar para mirarme-Nunca se olvida, se supera, se remplaza, se aprende a vivir sin ello con el tiempo...pero ¿olvidar? Eso son palabras mayores- Dijo para salir de la habitación, solo imagino que esto seria la guerra y que uno de nosotros no iba a acabar bien.