CAPÍTULO 20

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El día del juicio:

Las investigaciones habían tomado un rumbo completo y Alyssa había pautado el día del juicio en contra de Paul, todos asistiriamos al lugar; nadie se perdería tal escena.

Me había despertado temprano para poder darme un baño; luego bajé a prepara el desayuno para mis ahora tres hombres.

¿Por qué tres hombres? Facil, Sebastian había decidido que hasta que Paul no se encontrara detrás de las rejas no estaría tranquilo, la simple idea de que Paul pudiera atentar contra mi vida le aterraba, yo por mi parte ya no le temía a la muerte; pero si al tiempo.

Es muy doloroso ver el tiempo pasar y ver al mundo seguir girando sin mi presencia en el, era horrible ver que por salvar a todos; los podía destruir con mi ausencia.

Los tres apuestos hombres bajaban por las escaleras, tallando sus ojos; una vez listo el desayuno todos tomaron asiento.

-¿Qué tal está?-dije captando la atención de todos

-Muy delicioso amor-dijo Daniel

-Aprendiste muy bien de mi, hermanita-dijo James con una sonrisa la cual reflejaba orgullo

-Aunque Jessica cocina mejor que nadie, contigo hay una excepción-dijo Sebastian para luego regalarme una sonrisa

Una sonrisa se formó en mi rostro por sus cumplidos, ya que no solía ser muy buena en la cocina pero en mi tiempo libre me ponía a practicar; además recordaba alguna de las recetas que mi madre solía hacer en mi niñez.

Pensar en ella y en mi familia en general, me hacia pensar en que me encantaría tener una familia con un hombre que amará profundamente, también esperaba que Daniel continuara en mi vida; que se convirtiera en mi compañero y en el padre de mis hijos.

También solía soñar con un futuro el cual en mi situación era insólito sabiendo que Paul seguía por ahí suelto.

De tanto pensar mientras observaba por la ventana mi jardín; no me di cuenta cuando unos brazos abrazaron mi cuerpo y me atrajeron a otro ajeno.

-¿En qué tanto piensas amor?-dijo Daniel para dejar un camino de besos desde mi hombro hasta mi mejilla

-En el futuro-reí ingenua ante aquella verdad, realmente para este punto no sabía si existía un futuro para mi

-Amo pensar en el futuro, antes de dormir suelo imaginarte caminar hacia el altar con un hermoso vestido blanco, con un precioso ramo de flores del viento-sonreí ante aquel anhelo

-Yo pienso igual que usted Sr. Callahan-dije soltando una pequeña risita

-Tambien suelo verte embarazada, con pequeños niños corriendo por la casa, volviendo loco a James con sus ocurrencias-ambos reímos por aquel último comentario

-Espero que nuestro futuro sea tal cual lo imaginas-dije para girar hasta encontrarme con sus ojos

Lo besé, el beso fue tierno y como cada uno de los que nos dábamos; expresaba todo nuestro amor.

Nos separamos por falta de aire y por inercia unimos nuestras frentes; mientras nuestras respiraciones se mezclaban debido a la cercanía.

-Vamos amor, hay que prepararnos en una hora será el juicio, le daremos fin a toda esta pesadilla que te atormento por años, le daremos vuelta a la página de una vez por todas, podremos tener esa vida normal y feliz, la que tanto soñamos-dijo Daniel para dar un último beso

Caminamos tomados de la mano hasta la parte superior de la casa, más exactamente a nuestra habitación para cambiar nuestra vestimenta; la cual ahora constaba tan solo de una pijama.







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